CONSTRUIR COMPETENCIAS DESDE LA ESCUELA, PHILIPPE PERRENOUD

CONSTRUIR COMPETENCIAS DESDE LA ESCUELA,

PHILIPPE PERRENOUD

Docente: Rosalba Márquez López

Aun no se define el objetivo primordial de la escuela si es ¿transmitir conocimientos o desarrollar competencias?

Se cree que al desarrollar competencias no se desarrollan conocimientos. Sin embargo mientras más desarrollada la tecnología se requieren más conocimientos, mejor organizados, avanzados y confiables.

Un enfoque por competencias precisa el lugar que ocupan los saberes eruditos (es decir los conocimientos multidisciplinarios para resolver un problema) o no en la acción: estos constituyen recursos a menudo determinantes para identificar y resolver problemas, preparar y tomar decisiones. Sólo son válidos si están disponibles en el momento adecuado y logran «entrar en fase» con la situación. No se trata de exponer sabiamente, con toda tranquilidad, todo lo que se habría podido hacer, reflexionando calmadamente, recordando de manera metódica los conocimientos olvidados y consultando gruesos libros, sino de decidir en las condiciones efectivas de la acción, con informaciones incompletas, a veces urgentemente o bajo estrés, teniendo en cuenta compañeros poco cooperativos, condiciones poco favorables e incertidumbres de todo tipo.

El autor menciona que cuando los profesores aceptan la idea de competencia, algunos pueden sentirse, primero, responsables de dar conocimientos básicos a sus alumnos, considerando que deben adquirirlos antes de movilizarlos en una situación según una progresión metódica y organizada en el «texto del saber».

Los profesores acostumbrados a un enfoque disciplinario no creen, en efecto, poder «transmitir su materia a través de un problema», mientras que toda la tradición pedagógica los lleva a dar autonomía a la exposición de los saberes y a concebir las situaciones de empleo como simples ejercicios de comprensión o de memorización de saberes previamente enseñados en un orden “lógico”.  Por lo tanto la formación de competencias exige una pequeña «revolución cultural» para pasar de una lógica de la enseñanza a una lógica de la capacitación (coaching) basada en un postulado bastante simple: las competencias se crean frente a situaciones que son complejas desde el principio.

Para lograr que el docente pueda aplicar la práctica de competencias en lugar de solo dar conocimientos debe desarrollar competencias el docente primero.

• El docente no debe considerar que los alumnos aprenden más cuando experimentan, cuando ponen en juego todos sus conocimientos, antes que investigar o de modo metódico  sin una experiencia para tener la movilidad de esos conocimientos.
• El docente debe permitir el desorden, actividades  incompletas para permitir que los alumnos tengan el tiempo necesario para movilizar los conocimientos y solos descubran como desarrollar la competencia. Cuando un profesor responde a una pregunta siente la tentación de anticiparse y responder todas las preguntas que aún no se le han formulado, lo que transforma a una respuesta en un curso. Trabajar en la creación de competencias es aceptar aportar el mínimo requerido, sabiendo que el resto vendrá otra vez, en otra ocasión, de manera ciertamente deshilvanada, pero en función de una necesidad real.
• Los educadores deben despedirse del dominio de los contenidos para exponer,  organizar y transmitir información, ahora debe ser un vinculador entre conocimientos y saberes al resolver una actividad concreta.
•  El docente puede, de vez en cuando, «poner manos a la obra», no sustituiría constantemente al alumno, so pena de impedir que éste aprenda. Por consiguiente, debe renunciar tanto a la dicha de la demostración deslumbrante como a la palabra ex cátedra, en que nadie le impide desenvolverse de manera soberana, tomar su tiempo con tranquilidad fuera de toda contradicción y de todo diálogo. El enfoque por competencias exige las mismas renuncias, que nadie hará si no encuentra, en otra función, satisfacciones profesionales al menos equivalentes.

Para desarrollar un enfoque por competencias: “El sistema educativo depende de la adhesión y el compromiso de los profesores. Dicho enfoque supone el surgimiento de un nuevo tipo de profesionalidad, de identidad, de formación en el trabajo del docente” PHILIPPE PERRENOUD.

La palabra competencia no está definida sin embargo lo que sí se sabe, es que consiste en desarrollar los conocimientos de los alumnos al vincularlos con casos concretos de la vida diaria. Como docente de telesecundaria me resulta difícil dimensionar hasta que punto puedo desarrollar las competencias en los alumnos; sin embargo somos un proceso de cambio y considero que lo poco o mucho que se pueda hacer con los alumnos, tendrá grandes beneficios para ellos.

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