Conceptos básicos de la semiótica

TEMA 1. Conceptos básicos de la semiótica

Semiótica: la disciplina que estudia los signos: qué son y de qué formas son, cómo se producen, cómo se interpreten y para qué sirven.

Siendo el signo su unidad mínima, la semiótica se ocupa por lo general de constelaciones de signos articulados en códigos, y que se actualizan en unidades más vastas, tales como enunciados, textos, mensajes, discursos... (el discurso tiene una intencionalidad de cambiar una opinión).
En este sentido, “La semiótica es la disciplina que estudia las relaciones entre el código y el mensaje, y entre el signo y el discurso; Eco”.

Presemiótica

• Conjunto de reflexiones teóricas que pueden considerarse como precedentes de la semiótica como tal, en tanto giran sobre los signos (el lingüístico, pero también los síntomas y otros signos naturales), sobre cómo clasificarlos, sobre la relación del signo con la realidad y con el pensamiento...
• Los presocráticos, los sofistas... desarrollan teorías presemióticas.

Francesco Casetti, Introducción a la semiótica.

Umberto Eco, Signos, peces y botones: apuntes sobre semiótica, filosofía y ciencias humanas de De los espejos y otros ensayos.

Fundadores de la semiótica (como disciplina moderna)

Charles Sanders PEIRCE (1939 – 1914) → Semiótica

Ferdinand de SAUSSURE (1857 – 1913) → Semiología

Hay diferencias de enfoque muy considerables entre la semiótica y la semiología, pero la International Association for Semiotic Studies (IASS) decidió emplear el “semiótica” como denominación unificada de la disciplina.

• La semiótica de Peirce no tiene nungún prejuicio logocéntrico ni tampoco antropocéntrico: signo es, sobre todo, lo que al conocerlo nos hace conocer algo más. Signo es todo aquello que admite ser interpretado y en tanto es interpretado (pero esa interpretación a su vez es un signo, que admitirá ser interpretado, en una cadena virtualmente inacabable de interpretaciones: la SEMIOSIS ILIMITADA).

• La semiología de Saussure privilegia a aquellos sistemas de signos que comparten con el lingüístico las propiedades de ARBITRARIEDAD, CONVENCIONALIDAD, LINEALIDAD, INTENCIONALIDAD (la escritura, el alfabeto de los sordomudos, las señales militares), y duda de la inclusión en dicha ciencia de fenómenos en los que la relación entre SIGNIFICANTE y SIGNIFICADO no sea enteramente ARBITRARIA.

SIGNO: “Algo que está en lugar de otra cosa” es la definición más sintética y operativa.

Designa una relación de remisión, de reenvío, en la que cabe tanto la nube que está por la lluvia futura (que no vemos, pero pronosticamos) como la palabra “nube”, que está por el concepto de nube que compartimos los hablantes de castellano.
Es decir, cosas que parecen completamente diferentes: las palabras son signos lingüísticos (convencionales, intencionales), mientras que la nube es un fenómeno natural (y no intencional), pero que alguien decide interpretar como indicio de una lluvia futura.

Heterogeneidad de los signos: la definición de la escolástica (algo que está en lugar de otra cosa) es de una generalidad tal que permite explicar gran parte de lo que nos rodea, sean los signos quizá más obvio para nosotros – las palabras, es decir, los signos lingüísticos – como otros signos artificiales (signos visuales convencionales, como las luces de un semáforo o la señalética urbana), pero también los fenómenos atmosféricos, los síntomas médicos, los gestos... y por supuesto, los mensajes de comunicación de masas.

Ahora bien, la heterogeneidad de los signos no convierte a la categoría en un “cajón de sastre”: la semiótica (y antes, presemiótica) se esforzó en establecer tipologías, aplicando criterios de distinto tipo.

Por ejemplo, el significado de “lluvia” (esa otra cosa) puede responder a muchos significantes (ese algo que la sustituye) distintos:

1. Una nube amenazadora, acompañada de rayos y truenos (cuando aún no llueve) es un indicio de una lluvia futura.
2. Un charco en el asfalto (cuando el cielo está azul) es una huella (de una lluvia pasada).
3. Si no vemos llover, pero vemos que la gente por la calle lleva paraguas abiertos y chubasqueros, eso es un síntoma (de una lluvia presente).

Los signos pueden ser:

1. Señales de tráfico y en general señalética urbana o de edificios.
   Responden a un código de circulación que pretende ser no ambiguo. Señalética urbana y en el interior de los edificios.
   Como se aprecia, se mezclan colores, formas geométricas simples, signos icónicos y signos escritos, lingüísticos y numéricos.
   
2. Alfabetos y otros sistemas gráficos de notación.
   Los alfabetos, los códigos de la escritura musical, de la química y física, de las matemáticas, el Braille...
   Podríamos incluir todos los códigos escritos que corresponden a diversos sociolectos profesionales: el de los arquitectos (en los planos por ejemplo), ingenieros, electricistas, diseñadores, economistas, topógrafos... Casi cada colectivo profesional especializado tiene un repertorio de signos gráficos propio.
   
3. Gestos
   Los gestos, sean convencionales (dar la mano como signo de ser educado) o sean más espontáneos (gestos de euforia o tics gestuales). Todos son signos para quien los contempla y decide interpretarlos, con independencia de si han sido producidos conscientemente o no.
4. Obras de arte de cualquier índole.
   Sean plásticas, literarias, musicales, escenográficas, de danza, teatro... Cada una emplea códigos de diverso tipo: la perspectiva y las distintas convenciones pictóricas, la escala musical, la tonalidad, el ritmo, el lenguaje cinematográfico, la métrica en la poesía...
   
5. “Signos” adivinatorios.
   La quiromancia, la cartomancia, las astrología...La incógnita sobre el futuro, de los individuos o de las comunidades, ha movido en todas las culturas más o menos complejos sistemas de signos “prognósticos”.
   Por ejemplo, los signos del zodíaco, tienen unos significantes (los dibujos que representan las constelaciones) y unos significados (las formas de ser de cada persona nacida bajo ese signo).
   
6. Mensajes de comunicación de masas.
    Los Mass-Media, los productos de las industrial culturales y las TIC relativamente recientes, emiten conjuntos de signos articulados en códigos de gran complejidad: las noticias y anuncios en periódicos y revistas, las ilustraciones de los cómics, los programas de radio, contenidos de páginas Web...
   

Hasta ahora hemos vistos conjunto de signos construidos explícitamente con la voluntad de significar. Ahora bien, los objetos que nos rodean, y que en principio parecen responder a necesidades utilitarias (la ropa, complementos, el coche...), e incluso extremadamente utilitarias (la comida, la bebida, ya sea agua o cualquier otro tipo de líquido, la vivienda...) también significan y entran en redes de signos muy complejas, de códigos (el sistema de moda, con sus códigos bien complejos.

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