“Culturalización de las adicciones y su relación con los sectores más desprotegidos de la sociedad”
Enviado por Caro_19 • 22 de Agosto de 2016 • Documentos de Investigación • 2.761 Palabras (12 Páginas) • 201 Visitas
I.S.F.D N° 82
Materia: S.I.A 2
Profesora: Ester Toconas
Alumnos: Carlos Fontanabuona
Elías Fontanabuona
Trabajo de investigación:
“Culturalización de las adicciones y su relación con los sectores más desprotegidos de la sociedad”
Hipótesis:
“Las adiciones relacionadas con el consumo de distintas drogas, forman o están en proceso de formar, parte integrada de la cultura, en este contexto, la franja más carenciada de la sociedad, se lleva la peor parte.”
Marco teórico:
Las sociedades actuales tienen características distintivas de otros periodos de la historia, que se manifiestan en los cambios culturales que experimenta a consecuencia del desarrollo humano, en todos los campos, como la ciencia, la tecnología, el arte, el pensamiento e inclusive la ética y la moral. Teniendo en cuenta también en este sentido, la influencia de factores como, el crecimiento tecnológico, la globalización, la organización del trabajo la economía etc.
Dentro de este cuadro de situación muy amplio, esta investigación estará enfocada en la problemática de las adicciones, entendiendo las adicciones como un síndrome constituido por un conjunto de signos y síntomas característicos.
El origen de las mismas es multifactorial, entre los que podemos mencionar factores biológicos, genéticos, psicológicos y sociales. Algunos síntomas característicos son el daño o deterioro progresivo de la calidad de vida de la persona, debido a las consecuencias negativas de la práctica de la conducta adictiva, la pérdida de control caracterizada por la práctica compulsiva, la negación o auto engaño que se presenta como una dificultad para percibir la relación entre la conducta adictiva y el deterioro personal, y el uso a pesar del daño, este daño es tanto para la persona como para su entorno.
Pueden desarrollarse adicciones tanto a sustancias psicotrópicas como a actividades y hasta relaciones. Algunos casos que podemos mencionar son las relacionadas con sustancias, como el alcohol, la nicotina y diferentes tipos de drogas, los juegos de azar, comidas o componentes comestibles, el sexo, el trabajo, o relaciones interpersonales, como por ejemplo una pareja.
La investigación se va a apoyar desde la geografía social, aplicando la particular concepción del geógrafo norteamericano William Bunge, que planteo el retorno a la realidad social y el trabajo de campo como sustento científico de cualquier investigación.
También se consideraran aspectos de salud, admitiendo el debate y las diferentes concepciones que esta problemática tiene, pues muchos consideran al adicto, como un enfermo, ubicándolo en un rango similar al de las patologías mentales, incluso aplicando tratamientos terapéuticos muy similares.
Esta variable será considerada desde una mirada de la geografía de la salud tratada por Gustavo D Buzai, quien desarrollo una relación entre las características sociales de la población, la salud y los servicios de atención sanitaria, presentando un campo de estudio muy dinámico en el ámbito actual de la Geografía. La incorporación de la dimensión espacial en el análisis del total de relaciones llevó a la conformación de la Geografía de la Salud.
Consideramos que esta relación, que Buzai hace, entre las características sociales de una población, con la salud de la misma, tiene un fuerte punto de encuentro con nuestra investigación, si contemplamos un marco que trate la problemática de las adicciones desde este paradigma, teniendo en cuenta que en la misma tratamos de demostrar que los nichos más desprotegidos de la sociedad quedan expuestos a las peores consecuencias de este problema y con una gran deficiencia estructural en la atención y/o el tratamiento terapéutico de las personas que lo padecen.
También creemos muy necesario, en esta investigación, tener un enfoque desde la geografía económica, haciendo un análisis de los cambios, de tipo económico y político y sus inevitables consecuencias sociales y en este sentido considerar las prácticas neoliberales llevadas a cabo en Argentina entre los años 80 y 90 junto a la crisis del 2001 donde sin dinero y sin ahorros, miles de empresas cerraron, aumentó el desempleo y con ello el índice de pobreza del país.
La marginalidad social se extendió por las ciudades, especialmente en Buenos Aires, la capital; incrementando también el número de personas indigentes, las bandas callejeras y el crimen organizado en torno al tráfico de drogas. Todos estos factores confeccionaron un caldo de cultivo ideal para la creación, por ejemplo, de un producto como el paco, extremadamente colocante, adictivo y barato, factores que garantizan que sus consumidores no puedan dejarlo.
. Este tipo de droga se vende en las calles, parques y villas del país. Es la tercera droga más consumida por detrás de la marihuana y la cocaína y sus efectos son tan destructivos que pueden acabar con la actividad cerebral del consumidor en cuestión de seis meses.
El paco se fuma en unas pipas elaboradas de manera casera por sus consumidores, en las cuales se mezcla la pasta base con virutas metálicas y cenizas de cigarrillo para potenciar la combustión y así potenciar su efecto. La euforia que se experimenta tras su consumo, suele durar entre los 2 y 10 minutos, aunque a medida que aumenta la adicción, el consumidor se ve forzado a aumentar drásticamente la dosis para poder igualar el efecto hasta alcanzar el mismo punto de euforia que lo enganchó en un principio. Al cabo de unos meses, el consumidor se encuentra atrapado en una red de adicción de la cuál es imposible salir sin ayuda.
...