Discurso De Oratoria Vilencia Vs La Mujer

VIOLENCIA CONTRA LA MUJER

Muy buenos días tengan todos, honorable mesa del jurado calificador, profesores, compañeros alumnos, en esta mañana en que nos encontramos reunidos para llevar a cabo este certamen de oratoria, me permito presentarme ante todos ustedes (aquí dices tus datos personales como nombre, grado y grupo) y vengo a participar con el tema: “la violencia contra la mujer”.

Por muchos años, quizás milenios se ha considerado a la mujer como un ser inferior, solo por ser físicamente más débil que el hombre, se le ha relegado a las tareas del hogar y, aun hoy en día, se le cierran las puertas del crecimiento profesional negándoseles trabajos considerados solo para hombres. Muchos podrán hoy decir que tal desigualdad ya no existe, yo más bien diría que se ha avanzado en la lucha por lograr la igualdad entre los dos sexos, pero tal cosa no se ha dado por completo. Si no veamos unos ejemplos: si nos vamos al plano internacional veremos en los países árabes que las mujeres no existen en la vida política o académica del país, estas mujeres hasta para ir al doctor necesitan del permiso de un varón, si no el medico no las atiende, sus derechos humanos no les son reconocidos para nada. Y así en muchos países del mundo, del continente que escojamos se dan situaciones, si no iguales si muy similares; pero también en nuestro propio país pasan estas cosas, en mi Estado de Oaxaca, por ejemplo, en muchos pueblos indígenas las mujeres todavía son vendidas como si fueran animales o son casadas por acuerdos celebrados entre los padres sin que se les tome en cuenta su opinión. Incluso en la vida política son mas hombres los que ostentan los cargos públicos, todo esto, señores, es una forma de violencia, el hacer sentir inferior a un sexo, claro que es una forma de violencia.

En una mayoría de matrimonios se observa la gran cantidad de problemas que surgen al vivir en pareja, pero si somos observadores, vamos a ver que la causa mayoritaria de estos problemas está en la concepción que el hombre tiene de la mujer, cómo el hombre concibe a la mujer, como persona y como ser humano, y se ve con claridad que esta concepción todavía es machista, sobre todo en los estratos sociales mas bajos, en estos niveles la mujer es golpeada por su pareja de manera cotidiana, el esposo se gasta el dinero en borracheras con los amigos, es mujeriego; y todo porqué?; porque no ve a la mujer como su igual, él se cree con todos los derechos, pero sin ninguna obligación, y hasta llega al cinismo de decir cuando le preguntan su estado civil “la casada es mi mujer”, yo soy soltero. Por si esto fuera poco, se llega al grado hasta de privar de la vida a una mujer, por violarla o por robarla, y por estos últimos años los feminicidios han aumentado considerablemente, sobre todo en el Estado de Oaxaca, donde la desigualdad de sexo es una tradición. Y así podría seguir enumerando infinidad de situaciones que demuestran que aun hoy, en pleno siglo veintiuno, todavía nos falta mucho por hacer para cambiar la concepción racista femenina.

Las nuevas generaciones tenemos la obligación de cambiar esta forma de pensar, no podemos entrar en el progreso si antes no cambiamos nuestra forma de ser y de sentir y ese cambio no se va a dar con modificaciones a la ley, si no con un cambio de conciencia, porque este problema es una cuestión cultural, una forma de pensar que heredamos de nuestros abuelos, pero que en estos tiempos ya tiene que ser erradicada, pues impide el progreso de nuestro país.

Podrán decir que no tiene nada que ver la violencia intrafamiliar con el avance científico o cultural, pero analicemos bien el problema, y vamos a ver que los hijos de una familia donde se sufre violencia aprenden a vivir con ella y llega a implantarse en su cerebro a través de los circuitos cerebrales esta forma de vida; y como queda grabada en su cerebro las reproducirá inmediatamente que inicie una relación de pareja o forme una nueva familia, porque la violencia es la enseñanza principal que tiene arraigada en su concepción mental y cultural; y entonces, si es varón, en el trabajo será un jefe acosador y abusivo, y como jefe de familia será un marido y padre golpeador;

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