EL REGISTRO DE OBSERVACIÓN COMO HERRAMIENTA PARA LA RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN

[pic 1]Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación. [pic 2]

Facultad de Filosofía y Educación

Departamento de Formación Pedagógica

Convenio de Desempeño UMC-1111  “Validación de un Modelo de Prácticas Pedagógicas, como eje articulador de la formación inicial docente de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación”

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EL REGISTRO DE OBSERVACIÓN COMO

HERRAMIENTA PARA

LA RECOLECCIÓN DE INFORMACIÓN

Ma. Victoria Gómez

Sin lugar a dudas, para lograr una real comprensión del fenómeno educativo y los procesos que interpelan la complejidad y multiplicidad de dimensiones que intervienen en la práctica pedagógica y educativa, se requiere fundamentalmente de una aproximación cualitativa. Es el enfoque etnográfico, con el desarrollo alcanzado en las Ciencias Sociales, privilegiado para posibilitar esta mirada.

En la década del 80, en Chile se empieza a desarrollar investigaciones de este tipo, especialmente en instituciones como el PIIE (Programa Interdisciplinario de Investigación en Educación) y el CIDE (Centro de Investigaciones en Educación); cuyos investigadores se van integrando paulatinamente, a la Red Latinoamericana de Investigaciones Cualitativas de la Realidad Escolar. Se rompe así, con la tradición investigativa dominante; esto es, partir con una hipótesis, direccionar un diseño para  su verificación y luego generalizar, sobre la realidad estudiada a partir de los datos cuantitativos. Con el advenimiento de lo etnográfico, se trata más bien, de estudiar la realidad desde los propios contextos naturales de ocurrencia de los fenómenos, respetando y reconociendo lo particular de lo cultural.

Algunas consideraciones generales en torno a la Etnografía.

La etnografía posibilita observar la realidad en tanto, interacciones sociales, en situaciones naturales y no intervenidas o inducidas; y en consecuencia, acceder a fenómenos sociales no documentados sin perder su complejidad ni sobresimplificar los códigos culturales y significados que les son propios y le imprimen identidad. Esta opción teórica necesariamente, implica a su vez, una posición epistemológica que determina el método de aproximación a la realidad, su análisis y el tipo de conclusiones a las que se arriba.

Algunos de los supuestos más importantes que están a la base de este enfoque son:

- La realidad se percibe integrada. Lo interesante es que desde esta mirada la comprensión del fenómeno o situación se da en el marco de un contexto global que le confiere sentido. Si bien, la realidad educativa y pedagógica -identidad y ética profesional, cultura escolar, vida cotidiana del liceo- admite analíticamente el reconocimiento de dimensiones y elementos constitutivos que definen su naturaleza, estos sólo adquieren identidad en la trama de relaciones que se establecen entre ellos y respecto del todo que configuran. En consecuencia, aprehender un fenómeno social en profundidad, reclama de algo más que la simple desagregación de él en factores y variables aisladas, expresadas en lenguaje cuantitativo.

- Las categorías sociales, su búsqueda y comprensión desde la perspectiva de los actores. Reconstruir la realidad social desde la etnografía implica al menos dos referentes ineludibles; observar los fenómenos en su "manifestación natural" y dar cuenta de sus significaciones; en tanto, se las confieren los propios sujetos en estudio. Sin lugar a dudas, todo investigador porta categorías teóricas, esto es, no se aproxima al campo de estudio desprovistas de ella; sin embargo, el rol del observador está en la capacidad de objetivarlas, flexibilizarlas y resignificarlas, según avanza el proceso investigativo. Siendo así, la construcción teórica del objeto en la etnografía, es producto de la dialéctica entre la postura del investigador, los sujetos de estudio y la realidad social. Esta apuesta epistemológica es la que posibilita el rescate de lo empírico, durante el proceso de investigación y su formalización teórica posterior. Más aún, permite rescatar lo impredecible; es decir, aquello que no estuvo considerado en el diseño original. Esto, no es posible en la investigación de tradición analítica-cuantitativa, por cuanto el objeto requiere ser dependiente teóricamente desde su concepción. Rockwell sostiene, que si bien es necesario observarlo todo, "el proceso normal de observación es selectivo, siempre se selecciona inconscientemente en función de la categorización previa -social o teórica- que se tiene de la realidad a la que se aproxima uno" (Rokwell, 1980).

- La construcción de significados como parte de la trama de relaciones en que está inserto el individuo. En el marco de este supuesto resulta medular el concepto de cultura de Geertz (1987): "El hombre es un animal inserto en tramas de significación que él mismo ha tejido, considero que la cultura es esa urdimbre y que el análisis de la cultura a de ser por lo tanto, no una ciencia experimental en busca de leyes, sino una ciencia interpretativa en busca de significaciones". El hecho de que el hombre esté inserto en una trama de significaciones construidas socialmente, permite dar cuenta de las significaciones que comparte un grupo social determinado, o una comunidad profesional,  y que están a la base de toda interacción social.

- Lo cotidiano como referente categorial etnográfico. Por vida cotidiana se entiende "el conjunto de actividades que caracterizan la reproducción de los hombres particulares, los cuáles, a su vez, crean la posibilidad de la reproducción social… Por consiguiente, la reproducción del hombre particular es siempre reproducción de un hombre histórico, de un particular en un mundo concreto" (Heller, 1987). Lo cotidiano se transforma entonces, en una categoría de análisis de la realidad en estudio, entendida esta no como el conocimiento cotidiano que cualquiera puede tener sobre la escuela; sino como el modo analítico general de acercarse a las formas de existencia material de ella. El concepto de sujeto que aquí subyace, es el de sujeto social, heredero de un conjunto de relaciones contextuadas y, por tanto, determinadas históricamente. (Gómez, 1995).

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