El Arte Y El Espacio. Martin Heidegger
Enviado por pastorosma • 4 de Noviembre de 2013 • 462 Palabras (2 Páginas) • 1.978 Visitas
EL ARTE Y EL ESPACIO. MARTIN HEIDEGGER
Este texto de Heidegger expone la idea del espacio como área vital, en relación directa con el hombre.
El texto va dictando una serie de descripciones del espacio y el vacío y se pregunta cuál es la naturaleza de los mismos, relacionándolos con el arte y más concretamente con la escultura.
Una de las conclusiones de Heidegger es que el espacio ya no es el espacio cartesiano que sólo sirve para cuantificar la velocidad. El espacio lo construye el mismo sujeto, que logra con su artefacto las relaciones necesarias para crear el espacio con todas sus relaciones. Podemos concluir entonces que según el autor, el artista crea el espacio.
Heidegger levanta el interrogante de si el espacio pertenecerá a los fenómenos primarios ante cuya presencia, en palabras de Goethe, sobreviene una especie de miedo que lleva a la angustia, lo cual podría remitirnos al consabido “horror vacui” que experimentan muchos artistas.
Posteriormente, Heidegger trata de aproximarse al concepto de espacio a través del lenguaje, y señala que “espacio” habla de “espaciar”, de roturar, despejar el bosque, así que lo más propio del espaciar sería la libre donación de lugares. Pero queda la cuestión de si los lugares son a partir del emplazar o sólo como consecuencia de éste, así que tendríamos que aprender a reconocer que las propias cosas son los lugares y no sólo que pertenecen a un lugar. Entonces la escultura no sería un debate con el espacio, sería la encarnación de lugares. Dentro del arte moderno, este concepto nos llevaría por ejemplo hacia la noción de instalación donde lo anteriormente expuesto se hace patente.
Heidegger, en el texto citado, también aborda el concepto de vacío desde el punto de vista del lenguaje. Según éste, el vacío aparece como falta del espacio y hueco. Y el autor añade que, sin embargo, el vacío no es nada. Tampoco es una falta. En la materialización plástica juega el vacío como un acto fundante que busca forjar lugares. Pone por ejemplo la estatua como establecedora de lugares y como la encarnación de la verdad del ser en la obra, que funda un lugar para la verdad. Finalmente cita una frase de Goethe según el cual no siempre es necesario que lo verdadero se encarne, sino sólo que se cierna espiritualmente. Goethe parece sugerir el hecho de que no sólo es arte el mundo material sino también el conceptual, lo cual nos remite a un tipo de arte que también está presente en el panorama actual.
El juego de volumen y vacío y la concepción del arte a partir de estos dos conceptos en continuo debate sigue vivo hoy día, así como las preguntas formuladas en el ensayo quedan igualmente abiertas exigiendo un atento examen de esta problemática.
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