El Jugador

ENSAYO

TEORIA DEL ARTE

EL JUGADOR

(Fëdor Dostoyevski)

NELSON GUERRERO AVELINO

PARALELO: 32

INTRODUCCION

El Jugador es un libro con mucho de autobiografía, Dostoyevski era aficionado a la ruleta y perdió mucho dinero jugando, todo eso se ve plasmado en su obra. Alexei Ivánovich esta perdidamente enamorado de Polina, quien le da dinero para que juegue en el casino por ella, el General Zagorianski es padrastro de Polina y atraviesa por una crisis económica pero tiene una esperanza, tiene una tía de avanzada edad que es inmensamente rica y está a punto de morir, y él es el único heredero, como Alexei, el General también está enamorado, pero de Blanche, francesa que es la clara muestra de lo que es una mujer convenida. Gran parte de la novela está narrada en primera persona, con una correcta introducción de los personajes y su problemática. Se desnuda claramente la personalidad de Alexei, su inseguridad, su pasión casi enfermiza por Polina y todas las tonterías que hace por ella. Un detalle interesante es como se describen los conflictos y formas de actuar de distintos personajes dependiendo de sus nacionalidades. El correctísimo lord inglés Astley, el cinismo y magníficos modales del francés Des Grieux, la arrolladora personalidad de la abuela rusa que de lejos es el personaje más simpático de la obra.

OBJETIVO

Extraer de esta riqueza literaria los valores y puntos referentes de los sucesos, a fin de aprender mediante la obra ¿cuáles son las consecuencias de tener como vicio la apuesta?

DESARROLLO

El protagonista y narrador de la historia, Aleksei Ivanovich, es tutor de los hijos de un general ruso arruinado, Zagorianski, y está enamorado de la hijastra de éste, Polina, aunque mantiene con ella una extraña relación de amor-odio. Está pasando el verano con la familia en un hotel balneario de Roulettenberg, Alemania. Allí vacaciona también un francés llamado Des Grieux, que tiene hipotecados todos los bienes del general. También se encuentra en la ciudad Mr. Astley, un aristócrata inglés educado y tímido; y Mademoiselle Blanche, prometida del general, que está acompañada por su madre. Polina pide a Aleksei que le empeñe unos brillantes y que apueste a la ruleta el dinero obtenido, está en mala situación económica pero no le cuenta al amigo los motivos de su necesidad. Aleksei va al casino y se adentra en el mundo y el ambiente del juego.

Gana una noche y a la siguiente pierde. Ahí empieza su afición a la ruleta. Espera conseguir dinero propio para apostar; tiene la seguridad de que se hará rico y aspira a casarse con Polina.

La visita al casino propicia la crítica que hace el protagonista sobre los convencionalismos e hipocresía de la aristocracia la cual distingue dos tipos de Jugadores: los plebeyos, cuyo juego es mezquino ya que el interés por la apuesta radica únicamente en la ganancia monetaria; y los caballeros, que sólo apuestan por diversión.

Él opina que el deseo de ganar es común a todos y que el juego es una actividad tan respetable como la del comercio para conseguir dinero.

Un día está paseando con Polina. Se confiesa su esclavo y le dice que hará todo cuanto ella le pida. Medio en broma, Polina le pregunta si sería capaz de matar por ella y él contesta que sí. Aleksei le profesa total sumisión, lo que le produce al mismo tiempo una gran humillación; estos sentimientos contrarios le provocan pensamientos confusos en los que se aúnan el odio y el deseo. Además se siente utilizado, es su recadero, amigo solícito y un confidente a medias al que aún no ha contado la causa por la que necesita urgentemente el dinero.

Durante el paseo encuentran a los barones de Burmerhelm y Polina halla la ocasión de poner a prueba ese amor; lo reta a cometer una grosería con el matrimonio. Él obedece: ante la estupefacción del barón, se inclina delante de su esposa, se quita el sombrero y, en una especie de parodia burlesca fuera de lugar, le declara ser su fiel esclavo.

Es capaz de hacer cualquier cosa por Polina, lo atrae su crueldad. Recuerda como enamoró de ella cuando llegaron hace 4 meses al hotel, la vio discutir con Des Grieux y abofetearlo. Esa escena le encantó. Al enterarse el general de la afrenta causada a los barones, llama al tutor y lo despide. El barón alemán le ha pedido un resarcimiento por la burla de su empleado. Aleksei se siente ignorado y ofendido, lo han tratado como a un simple criado, lo consideran socialmente incapacitado para reparar el agravio en persona. Decide quedarse en el hotel y arreglar por su cuenta el problema con el barón, irá a pedirle disculpas y tratará el asunto personalmente.

Des Grieux visita a Aleksei y le pide que deponga su actitud en este asunto pues dejaría en mal lugar al general. Aleksei argumenta que todo se llevará a cabo con decoro y discreción, quiere proponer a Mr. Astley. Entonces, Des Grieux le entrega una carta de Polina en la que ésta, apelando a su amor, le suplica que abandone la empresa. Después de la entrevista con Des Grieux, Aleksei se encuentra con Mr. Astley. Se dirigen a un café y conversan. El inglés le cuenta todo el misterio de este asunto, el motivo por el que la familia tiene tanto miedo de molestar al barón. El verano anterior, Mademoiselle Blanche, actual prometida del general, pasó las vacaciones en esa ciudad.

Al parecer tuvo relaciones con varios hombres ricos que le proporcionaron dinero para el juego, pero todos la abandonaron. Intentó coquetear con el barón y la baronesa la denunció. Mademoiselle Blanche tuvo que abandonar el país. Pero también inició relaciones con el general antes de la huida. No quieren que las relaciones con el barón se compliquen más.

Mientras conversan Aleksei oye que alguien lo llama, es Antonida, abuela de Polina, a la que creían moribunda en Rusia y de la que la familia esperaba heredar pronto para resolver sus problemas económicos. La abuela ha decidido abandonar su lecho en Moscú y visitar a sus familiares. Es una mujer enérgica, autoritaria y sin pelos en la lengua, nada más llegar espeta a toda la familia expresando lo que piensa de ellos: que esperaban ansiosamente su muerte para recibir la herencia, que viven por encima de sus posibilidades, que cómo podían pagar aquel hotel si no era con dinero ganado en el juego. Sólo es agradable con Polina. Antonida pide al general que le preste a Aleksei como guía. Se aloja en las mejores habitaciones del hotel y actúa como una vieja excéntrica, malhumorada y exigente.

Trata de simple al general cuando conoce la causa del despido de Aleksei. Al instalarse, Antonida pide a Aleksei que la lleve al casino. Todos deciden acompañarla. Sin conocimientos mínimos sobre el juego empieza a apostar de manera impulsiva

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