El Plagio, Como El Arte De No Pensar

Es un hecho que con los avances tecnológicos, plagiar se ha vuelto una práctica común y lo que es peor, hasta cierto punto es aceptada. Lo digo, porque estoy segura de haber cometido plagio en secundaría y nunca me dijeron nada; no recuerdo haber recibido una charla sobre el plagio, sus pautas o algo que me indicara estar obrando mal y menos acciones para evitarlo. De ahí que vine a entenderlo ya en la universidad, cuando me adentre en el mundo del “ojo con lo que escribes”; concientizándome de la necesidad de pensar por sí misma en pro de mi desarrollo personal.

Puedo asegurar, que si plagié en determinado momento lo hice por ignorancia; lo que no me excusa, ni me hace menos responsable de tomar frases o apartes de un texto ajeno y apropiarme del mismo.

Ante el desconocimiento de la norma, resulta difícil cumplir con requerimientos de los cuales no se tiene conocimiento previo. Como dice el refrán, El que no sabe es como el que no ve. En este aspecto gran parte de la responsabilidad la tiene el sistema de enseñanza que aplican los docentes a sus alumnos desde la secundaría, quienes en su mayoría además de pasar por alto las normas de citación y todo lo concerniente a los derechos de autor, no despiertan en el alumno la necesidad de expandir su conocimiento.

Ahora bien, no todos llegan al plagio por ignorancia, hay quienes lo hacen por pereza mental o inseguridad intelectual.

En la pereza mental o acción de vivos, es donde se evidencia la falta de compromiso, las personas que optan por el plagio como recurso inmediato buscando salir del paso; se están negando a sí mismos la oportunidad de crecer como individuos.

En cambio la inseguridad intelectual, tiene que ver con la duda que se genera ante el temor de no sentirse capaz de exponer asertivamente ideas propias, de no dar la talla en cuanto a los planteamientos que se lleguen a presentar; donde el solo hecho de imaginar que su trabajo será examinado y evaluado, lo hará preferir plagiar uno que le proporcione seguridad. Sobre esto último, vale la pena aclarar que tal seguridad no parte de lo bueno que sea el material a plagiar sino del simple hecho de no ser de su propiedad.

¿Sabías que existen leyes que protegen los Derechos de Autor?

Según la Dirección Nacional de Derecho de Autor, estas leyes presentan ciertas modificaciones según el país, pero en general se enfocan en lo mismo; cobijar sus creaciones ya sean artísticas, musicales o literarias .

Así mismo, existen pautas específicas sobre como evitarlo dando los créditos respectivos al autor. Por esta razón, independientemente de si se incurrió en la falta por desconocimiento, pereza o inseguridad; el plagiario será objeto de sanciones y verá afectada su credibilidad ante los demás.

Ahora bien: aún cuando esta práctica parezca beneficiar a quien la usa, a largo plazo adormece su capacidad de expresarse con voz propia llevándolo

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