El análisis de la práctica educativa

EL ANÁLISIS DE LA PRÁCTICA EDUCATIVA

UNA ALTERNATIVA QUE CONTRIBUYE A LA FORMACIÓN DE FUTUROS DOCENTES

Material de trabajo exclusivo Seminario de pedagogía y didáctica de la tecnología 2019-I

Docente Juan Carlos Muñoz Q.

Presentación

La práctica educativa, al interior de este seminario, es concebida como un proceso de formación dinámico, que desde la reflexión y la acción lleva a la a la comprobación de supuestos teóricos, tanto pedagógicos como   disciplinares, a la comprensión de diferentes estrategias de enseñanza y estilos de aprendizaje de la población escolar y a la apropiación de conocimientos particulares que emergen en el contexto escolar.  Se basa en el razonamiento práctico y deliberativo, tanto en el plano individual como en el colectivo.

En el sentido expuesto, las prácticas educativas pueden ser objeto de observación, de conocimiento, de interpretación y de intervención. Al ser construidas  a partir de múltiples  referentes, viabilizan, a los docentes en formación, la aclaración, comprensión y proyección  de las dinámicas escolares, al tiempo que los involucra  en procesos de reflexión pedagógica y en los medios que potencian el análisis de dicha reflexión.

Antecedentes del análisis de la práctica educativa

El análisis de las prácticas educativas y los propósitos de éste,  posee una gran recorrido en el campo de la investigación educativa. Sánchez y Rosales (2005) presentan  una revisión crítica de cuatro líneas de investigación de la  práctica educativa. (Dereck Edwards y Neil Mercer (1988), Lemke (1997), Coll, Rosa Colomina, Javier Onrubia y Mª José Rochera (1995) y la propia Sánchez y Rosales (2005).  De cada línea describen los objetivos, el marco de referencia empleado, la muestra en la que se basan, las características del sistema de análisis empleado y el tipo de resultados que cada línea brinda. Ofrecen además los puntos comunes y  diferencias entre la líneas.

Coll y Sánchez (2005), “aun a riesgo de simplificar en exceso” dirigen su atención  a revisar los objetivos de las relaciones e interacciones que se dan entre los profesores y alumnos en el contexto de aula.  

Chaves y Jaramillo (2011) presentan un modelo teórico para El Estudio de las Prácticas Educativas que permita la descripción y la comprensión de la organización de los diferentes componentes que debe incluir la formación docente, dado el esfuerzo que realizan las universidades para ubicar en el centro de la actividad académica la enseñanza y el aprendizaje.

Fuentes (2011), expresa que “La  utilidad  de la observación de las prácticas educativas ha sido reconocida tanto en la formación inicial del profesorado, como en la formación continuada de los docentes en ejercicio. Ya que la colaboración entre docentes en formación y “docentes expertos” ha sido considerada fundamental para el desarrollo del proceso.

Ya en el plano netamente operativo Zabala (2000) y César Coll (1991) ofrecen, respectivamente, unidades de análisis de la práctica educativa y un acercamiento a las  dimensiones, subdimensiones e indicadores para llevarla a cabo.

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