El orador: Cualidades

El orador: Cualidades

Un orador es aquella persona que habla ante un público, y para ello, se sirve del recurso de la oratoria, la cual es definida como el arte de hablar con elocuencia.

Un orador debe vestirse adecuadamente, pero siempre teniendo en cuenta el público ante el cual se presenta. Su postura debe ser erguida, mostrando decisión y seguridad.

Su presencia no debe ser estática, sino que debe moverse para dirigirse a distintos sectores del público y para mostrar su entusiasmo y transmitirlo a la audiencia.

Debe dominar el tema, los argumentos que desarrollará, pero también anticipar las preguntas que pueden dirigirle. Su conocimiento sobre el tema que desarrollará le permite mantener un discurso fluido, sin titubeos que pueden provocar la desconfianza o disminuir el interés del público.

Por otro lado, la preparación también incluye la puntualidad, conocer el recinto donde se realizará la presentación y saber con qué elementos tecnológicos contará. A la hora de la exposición debe ser conciso, ir directo al punto, no aburrir, para ello, el orador debe tener creatividad a la hora de preparar el mensaje, ser dinamico y tener buena imaginación.

Oratoria y liderazgo

Una va de la mano de la otra, la sinergia es extraordinaria cuando se juntan estas dos en una persona, el liderazgo sin oratoria es casi imposible, y la oratoria ejerce un liderazgo intrínseco, la oratoria es poder de influencia sobre las personas, con un buen uso de la oratoria las masas pueden ser motivadas e impulsadas a un compromiso e avanzar en sus vidas. Un buen orador necesariamente, aunque existe excepciones, es un buen líder.

Al ponernos frente a equipos de trabajos en empresas, o en nuestra comunidad, aun en nuestra familia, la oratoria es el ingrediente necesario para el éxito en el liderazgo.

La voz como recurso de la oratoria

La manera de cuidar nuestra voz y aun la de aprender a modularla, el control del volumen, la dicción, las técnicas de respiración, todo nos ayuda a cuidar de un recurso esencial: nuestra voz. A través del sonido de voz, podemos contagiar o transmitir alegría a una audiencia, por la modulación de los tonos, podemos llamar a la reflexión o al rechazo de una ideología. La voz embellece, la voz es lo que hace a la oratoria un arte: el arte de hablar.

Técnicas básicas de respiración. Dicción. Proyección de la voz.

Las técnicas de respiración, así como las prácticas de dicción y proyección de la voz, nos ayudan a pulir y hacer un mejor uso de la voz. Practicas sencillas, como la de aprender a respirar por el diafragma y no por los pulmones, la práctica de lectura en voz alta, haciendo extravagante pronunciaciones de cada oración, gesticulando con el rostro, mejora si se hace un habito, de manera progresiva y diaria nuestras habilidades de oratoria, dando más confianza y manejo de nuestro propio

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