Encuentro Con La Diferencia

Hablar sobre la diferencia es bastante complejo ya que venimos de diferentes culturas, religiones, países y por lo tanto la diferencia es inevitable. Cuando observamos las diferentes culturas indígenas o personas de la sociedad común que se perforan y se realizan tatuajes, en algunas personas, nos parece que deforman la belleza de la naturalidad del cuerpo y su apariencia llega a ser desagradable pero también hay otro tipo de perforaciones y tatuajes que las observamos de una manera artística o cultural de llevar una historia marcada en su cuerpo y me parece maravilloso e interesante.

Ver a los indígenas nos genera emoción porque estas manifestaciones en su cuerpo dan muestra a su cultura, así son desde hace millones de años. Verlo con sus atuendos, sus piercings, nos parece muy lindo y de admiración que ciertas culturas después de tantos años sigan vigentes.

Al hablar de los tatuajes podemos poner de ejemplo al viejito, es un señor ya de edad lleno de tatuajes con su piel arrugada, no luce igual que como debió lucir apenas se los hizo, cuando aún era joven.

Otras imágenes como la mujer de las uñas más largas, la verdad no nos explicamos como hacía para llevar una vida normal, pues si coge objetos pesados, si va a utilizar un computador o lo que deba manipular con las manos es casi imposible. A pesar de que causa cierta impresión, también es de admirar.

Algo que si nos impresionó mucho fue ver todos esos cadáveres, creemos que eso eran, causan impresión y tristeza.

El cuerpo que tiene las lombrices, no pudimos diferenciar si era un cadáver en descomposición o un fanático de hacer estas cosas.

Al observar todas estas imágenes nos damos cuenta que la diferencia es inevitable observarla y para ojos de muchos como nosotras nos puede llegar a causar impresión y calificar estas acciones.

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