Enfermedad De Altitud O De La Montaña

Enfermedad de altitud o de la Montaña

Como se produce

Consejos para prevenirla

Es un articulo extraído de elbrus.org, que merece ver, en el se dan consejos como prevenir la enfermedad de la altitud o de la montaña, producida por las diferencias e oxigeno en altura y sobre todo como se produce.

Esto son solo consejos que pueden ayudar, pero nunca hay que olvidar ponerse en manos de los especialistas médicos para que nos guíen y nos aconsejen.

La adaptación a la altitud

El cuerpo sufre numerosos cambios con la elevación más alta con el fin de aumentar el intercambio de oxígeno a las células y mejorar la eficiencia de uso de oxígeno. Estas adaptaciones suelen comenzar casi de inmediato y siguen produciéndose durante varias semanas. Las personas varían en su capacidad para aclimatarse. Algunos se adaptan rápidamente mientras que otros no se aclimatan, incluso con la exposición gradual en un período de semanas.

En general, el cuerpo se aclimata aproximadamente el 80 por ciento después de 10 días en altitud y aproximadamente el 95 por ciento en seis semanas. La frecuencia respiratoria suele ser alta aproximadamente durante una semana y luego disminuye lentamente en los próximos meses, aunque tiende a seguir siendo superior a su tasa normal que a nivel del mar. Después de 10 días, el ritmo cardíaco comienza a disminuir.

Cuando bajamos, empezamos a perder nuestras adaptaciones en aproximadamente a la misma velocidad con la que hemos ganado, 10 días después de regresar a el nivel del mar, hemos perdido el 80 por ciento de nuestras adaptaciones.

La adaptación a la altitud

Principios de Cambios

Aumento de la frecuencia respiratoria

Aumento del ritmo cardíaco

Cambios de fluidos

Pasados unos días

Aumenta la producción de glóbulos rojos

Aumento de 2, 3 DPG difosfoglicerato

Aumento del número de capilares

Aumento de la frecuencia respiratoria

Durante la primera semana de adaptación, una variedad de cambios tienen lugar. La frecuencia respiratoria y la profundidad aumenta en respuesta a la disminución de las concentraciones de oxígeno en la sangre, causando más emisiones de dióxido de carbono que se pierde y más oxígeno para ser aportado a los alvéolos. El aumento de la frecuencia respiratoria se inicia en las primeras horas de llegar a alturas tan bajas como 1.500 metros. La pérdida de dióxido de carbono hace que el organismo sea más alcalino.

Para compensar el aumento de la alcalinidad del cuerpo, los riñones excretan bicarbonato - una sustancia alcalina - en la orina. Esta adaptación se produce dentro de las 24 a 48 horas después comienza la hiperventilación.

Aumento del ritmo cardíaco

Las células requieren un suministro constante de oxígeno por lo que el corazón late más rápidamente para satisfacer la demanda. Excepto en altitudes extremas, la frecuencia cardíaca, regresa a la normalidad después de la aclimatación.

Los cambios de fluidos

El flujo de sangre al cerebro aumenta al proporcionar el volumen necesario de oxígeno (equivalente a la disponible en el nivel del mar).

En los pulmones, los capilares se constriñen, el aumento de la resistencia a fluir a través de los pulmones y el aumento de la presión arterial pulmonar. Peligrosamente la presión arterial elevada en la arteria pulmonar puede causar líquido para escapar de los capilares y las fugas en los pulmones (edema pulmonar).

El aumento de la producción de glóbulos rojos

Como la aclimatación continúa, la médula ósea contribuye mediante aumentando la producción de glóbulos rojos. Nuevos glóbulos rojos están disponibles en la sangre dentro de cuatro a cinco días, aumento en la sangre de la capacidad del oxígeno. Una persona aclimatada puede tener de 30 a 50 por ciento más de glóbulos rojos de la sangre que su homólogo en el nivel del mar.

Aumento de 2, 3 DPG difosfoglicerato

Dentro de la células de la sangre 2, 3 difosfoglicerato (DPG), el cual facilita la liberación de oxigeno a los tejidos, aumenta. Este es un fosfato orgánico que ayuda a combinar el oxígeno con los glóbulos rojos. Producción de hemoglobina, la intramuscular de transporte de oxígeno de proteínas en los glóbulos rojos, también aumenta.

Aumento del número de capilares

El organismo desarrolla más capilares en respuesta a la altitud. Esto mejora la difusión de oxígeno por acortar la distancia entre la celda y capilar.

Enfermedad de altitud

Enfermedad de altura es el resultado de una falta de oxígeno en el cuerpo. Cualquier persona que sube en altura se convertirá en hipóxica (la insuficiencia de oxígeno en la sangre). ¿Por qué algunas personas enferman y otros no lo hacen no se conoce. Se sabe, sin embargo, que la mayoría de las personas que enferman lo hacen dentro de los primeros días de ascender a la altitud. El único tratamiento seguro es parar y descender.

Seis factores que afectan la incidencia y la gravedad de la enfermedad de altura

1. Tasa de ascenso - cuanto más rápido es el ascenso mayor será su riesgo.

2. Alcanzada la altitud (sobre todo para dormir en altitud) - es mayor es el riesgo, que los beneficios de dormir.

3. Duración de la exposición - ya que la estancia en altura aumenta el riesgo.

4. Nivel de esfuerzo - esfuerzo duro, sin descanso o de hidratación, aumenta el riesgo.

5. Hidratación y la dieta - alto contenido de grasa y dietas de alta proteína, y la deshidratación, aumenta el riesgo.

6. Fisiológicos inherentes a la susceptibilidad - algunas personas tienen más probabilidades de ser malos y no sabemos por qué.

Los tres tipos comunes de la enfermedad de altura son de enfermedad aguda de montaña (AMS), a gran altitud edema pulmonar (HAPE) y Alto Edema cerebral de altura (HACE). AMS es el más común. No es una amenaza para la vida, pero si no es tratada, puede progresar en HAPE o HACE.

Enfermedad aguda de montaña

El mal de montaña agudo es un término aplicado a un grupo de síntomas. Es más probable en personas que hacen ascensiones rápidas por encima de 2.500 metros. También se produce en las personas que se aclimatan parcialmente y luego hacen una brusca subida a una mayor altitud.

Signos y Síntomas

Los signos y síntomas tienden a comenzar entre seis a 72 horas después de la llegada a gran altura.

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