Ensayo guerrero pacifico
Enviado por Zaid Tataje • 21 de Agosto de 2015 • Ensayo • 468 Palabras (2 Páginas) • 432 Visitas
Alumno: Zaid Farfán Tataje
Ensayo el Guerrero Pacífico
Desde mi punto de vista, la película en mención está llena de comentarios y parlamentos que crea en uno mismo, la sensación de estar viviendo uno mismo la experiencia que se recrea en el largometraje.
En particular, me he identificado bastante con el protagonista de la película, ya que al igual que él, me siento lleno de metas e ideales que siempre trato con el día a día de poder alcanzar. Es por lo mismo que también me encuentro lleno de preocupaciones que muchas veces no me deja ver con claridad el hermoso presente que me voy forjando con el día a día. Es más, en la misma película se hace hincapié en la importancia del vivir el presente, ya que siempre nos estamos preocupando de lo malo que hicimos en el pasado y sobre lo acongojante que puede ser el futuro y todo partiendo del egocentrismo que muchas veces no nos permite valorar tampoco a las personas que nos rodean.
Otro aspecto que me pareció muy importante es que al igual que veo en mis compañeros de trabajo, siempre nos dejamos poner limitaciones haciendo mucho caso de lo que las demás personas nos dicen. Como será de fuerte esa imagen que nos hacen creer que muchas veces uno mismo sabe qué camino debe de realizar pero por seguir la idea de lo que es correcto, no crea si propio camino y hace lo que le dicen. Esta parte a mi parecer es la más fuerte porque creo que la vivo con el día a día, donde veo gente muy preparada pero encasillada en el que dirán.
Para terminar, aunque en la película no se hable mucho de ello, deseo escribir acerca de cómo Sócrates ayuda a Dan, sin recibir nada a cambio e incluso aguantando muchas veces la terquedad que la rutina ha creado en él. Esta parte a mi parecer es muy importante. En mi experiencia de vida por no decir en toda, siempre había creído que uno tiene que hacer las acciones para recibir cosas, ejemplo: te ayudo porque después tú me vas a ayudar cuando yo lo necesite. Es decir, nada es gratis, todo tiene un precio. Y me dejaba mover por los intereses. Al igual que Dan yo tuve una persona que me ayudó a cambiar esa idea, fue un asistente de docencia de la universidad donde ingresé. Este personaje, al igual que Sócrates, aguantó mis malos humores y egocentrismo porque según él yo podía ser una persona mucho mejor. Me mostró la burbuja en que vivía y como mis preocupaciones eran banales. Pasaron más de dos años y esta gran persona me seguía apoyando y nunca me pidió nada, porque él decía que al final él estaba siendo feliz realizando su propósito de vida EL SERVICIO.
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