Escuelas Bolivarianas
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ESCUELAS BOLIVARIANAS
AVANCE CUALITATIVO DEL PROYECTO
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República Bolivariana de Venezuela
Ministerio de Educación y Deportes
Escuelas
Bolivarianas
Avance cualitativo del proyecto
Caracas, noviembre de 2004
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MINISTRO DE EDUCACIÓN Y DEPORTES
Aristóbulo Istúriz
VICEMINISTRO DE ASUNTOS EDUCATIVOS
Armando Daniel Rojas
DIRECTORA DE NIVELES Y MODALIDADES
Marianella León
DIRECTORA DE DESARROLLO EDUCATIVO
Gisela Toro
DIRECTOR DE INSTITUTOS AUTÓNOMOS
Rafael Chacón
DIRECTORA DE EDUCACIÓN INICIAL
SIMONCITO
Olga Sánchez
DIRECTORA DE ESCUELA BOLIVARIANA
Vladimira Moreno
COORDINADORA DE LICEO BOLIVARIANO
María de la Paz Regueiro
DIRECTOR DE TÉCNICA ROBINSONIANA
Rómulo Rodríguez
SISTEMA BOLIVARIANO
INCLUSIVO DE ADULTOS
Intermisiones
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COMISIÓN NACIONAL
LICEO BOLIVARIANO
Armando Daniel Rojas
María de la Paz Regueiro
Eliana Naranjo
Cosme Arzolay
Luis Mariano Joubert
Mireya Salas
Nelson Sánchez
Francis González
César Ledezma
José Luis García
Índice
Bases conceptuales, filosóficas y legales
del proyecto “Escuelas Bolivarianas” 7
La nueva escuela 25
Anexos 61
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Bases conceptuales, filosóficas y legales
del proyecto “Escuelas Bolivarianas”
Introducción
El compromiso del Ministerio de Educaci
ón y Deportes consiste en que
todas las escuelas venezolanas se conviertan en Escuelas Bolivarianas
y esta denominaci
ón representa una gran responsabilidad por su
connotación histórica, ilustrada, nacionalista e internacionalista que
evoca y a la vez convoca.
La referencia al Libertador Sim
ón Bolívar tiene un profundo valor
para los venezolanos. Sus ideas y acciones constituyen una referencia
ineludible de nuestra nacionalidad. Resaltar lo bolivariano nos dirige a
lo mejor de nuestras tradiciones y a los fundadores de la Naci
ón. Toda
esta situaci
ón reivindica nuestras potencialidades y fortalezas como
país y como pueblo. En consecuencia ello nos abre posibilidades para
contextualizarlo y resignificarlo en nuestra realidad de hoy. No se trata,
tampoco, de vivir del pasado sino de reconocernos en nuestro acervo,
para asumir las responsabilidades que hoy corresponden y afrontar
nuestros retos actuales.
El reencuentro con la idea Bolivariana corresponde a la escuela que
conlleva, en Primer Lugar la idea de cambio, de ruptura, de persisten
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cia y de reflexión. El reencuentro con Bolívar, y con el gran innovador
Simón Rodríguez, sirve para tomar ejemplo de quienes, contra toda
clase de avatares, levantaron sus ideas, pensaron con cabeza propia,
combinaron la reflexi
ón y la acción, asumieron con todo empeño el
compromiso de enfrentar el reto de sus tiempos y, precisamente por
eso, trascendieron m
ás allá de su época.
En Segundo Lugar, nos recuerda que un pueblo es algo más que un
grupo de gente sobre un territorio. As
í, una nación se reconoce en su
historia y sus referentes comunes, pero sobre todo se construye y re
construye
en
su
acción
diaria,
en
su
capacidad
para
asumir
un
proyecto
conjunto,
en funci
ón
de asumir los retos del
momento.
Esta idea nos confronta con la necesidad de reconstruir la naci
ón.
Una naci
ón de todos y no sólo para unos pocos. La escuela debe ser
uno de los espacios donde los actores que han estado relegados pue
dan
irrumpir a la vida ciudadana, en la construcci
ón de una nación
que se sostenga sobre el di
álogo y el reconocimiento de los derechos
políticos, sociales, económicos y culturales de todos. Los lenguajes y
formas de las mayor
ías y de las minorías, deben ser también protagonistas
en
los
espacios
p
úblicos.
La
participación
tiene
que
ser
el
signo
de
la nueva democracia, participaci
ón desde la diversidad, desde su
reconocimiento y su aceptaci
ón, no como aceptación verbal, estática,
inamovible o conformista, sino como visi
ón de construcción y posibilidad.
El reto que estamos asumiendo es el pasar de la democracia
representativa a la verdadera democracia
“participativa-protagónica”;
por ello es determinante pasar del discurso a la acci
ón en el reconocimiento
y la integraci
ón
de la diversidad.
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Nos proponemos, desde la educación, reconstruir el país, mirar hacia
atr
ás
y
hacia
adelante,
recuperarnos,
reconocernos,
construir
futuro
y convivencia. El pa
ís no está hecho ni es siempre igual a sí mismo. La
Patria hay que hacerla continuamente para que est
é viva; la patria vive
en la medida en que recreamos la naci
ón desde nuestras diferencias,
semejanzas y referentes comunes. Hacer educaci
ón es hacer del ciudadano
el
nuevo
republicano
bolivariano.
Hacer democracia, es cons
truir
un
espacio
de
todos,
es
decir,
democratizar
igualmente
al
espacio,
como
un todo.
En Tercer Lugar, el carácter bolivariano de las escuelas nos recuerda
que somos latinoamericanos y caribe
ños, y que como tales, tenemos
que ver y comprender hacia el sur, hacia Centroam
érica y las Antillas,
porque nuestra suerte es necesariamente compartida y las posibilida
des
de futuro común
están
atadas
...