Estudiante De Mercadotecnia

La sociedad actual ha creado una persona ideal o un prototipo. También le han creado ciertos sueños y expectativas que la gente sigue perdiendo su autenticidad, al mismo tiempo, perdiendo lo que en realidad busca por encajar con la sociedad.

Desde que el hombre existe en la faz de la tierra ha tenido su yo “real” y su yo “ideal”, siempre buscamos ser mejores de lo que ya somos, sin embargo, nunca perdemos nuestra esencia ya que es algo que nos caracteriza y nos hace únicos. Ese yo “ideal” es lo que nos impulsa a seguir adelante y es ahí la razón de cada uno de nuestros sueños.

La razón de ser de nuestra vida son los sueños, ya que sin ellos no tendríamos ninguna aspiración y no tendríamos nada por que luchar. No hay nada más sano que tener un sueño que perseguir, ya que eso nos impulsa a diario ser mejores, pero es nuestra tarea no dejar que las personas o algunos momentos difíciles que vivimos los derrumben. “Lo que algunos le llaman imposible es porque nunca lo han visto” y es por eso que hay personas que insisten en no dejar que uno crezca como persona, por el miedo que ellos tienen sobre sí mismos.

Hay todo tipo de sueños: los “inalcanzables”, los que solo aparecen a la hora de dormir o aquel sueño que nos sigue día a día, ya sea el luchar por el amor, la familia o convertirte en alguien importante en la vida.

En la obra leída y la película vista podemos observar distintos tipos de sueños en los que podemos ver que hay sueños que ni nosotros mismos podíamos imaginar que teníamos en nuestra mente pero están latentes en lo más profundo de nuestro ser.

En “La vida es sueño” Segismundo, no sabe que es el heredero legitimo al trono ya que el rey Basilo, su padre, decidió mantenerlo en custodia a consecuencia de una predicción de los astros que decía que el sería un tirano. Segismundo tras la decisión del rey, vive atado y cubierto por pieles como un animal salvaje, ese mundo en el cual vive es algo inhumano ya que todas las personas tenemos derecho a la libertad, cosa que él no vive y es lo que más anhela.

La persona que lo tenía en custodia lo envenena para llevarlo al trono, pero reafirman lo que habían dicho los astros, era un tirano, por lo tanto deciden envenenarlo nuevamente para llevarlo a su vida pasada, el despierta y juraba que era un sueño pero poco a poco descubre que no es así, su sueño era real y decide ir a enfrentar lo que la vida misma le tenía guardado en secreto.

Los sueños son algo mágicos y muy difíciles de explicar, parecen tan inalcanzables que a pesar que los tengas en la palma de la mano, muchas veces te rehúsas a aceptar que ya lo has logrado y decides dar un paso atrás, porque no son lo que tu tanto esperabas. Segismundo ya tenía el poder sobre Polonia pero no podía aceptar ser una persona que él no era, el no quería ni debía ser tirano por el hecho de defraudar a su padre y a su patria.

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