Etiqueta Etica

La etiqueta ética

Por: Alejandra Lewis Urízar

Profesora de la Carrera Profesional de Administración y Negocios Internacionales

ULASALLE

Toda empresa que orienta sus productos a un consumidor objetivo, debería tomar en cuenta que para la elaboración del diseño de los envases y las etiquetas, no solo debe considerar los aspectos ergonómicos, productivos, antropométricos y ambientales, sino también, debe contemplarse el aspecto ético. Tal es así que muchas veces como consumidores nos sentimos engañados al adquirir un producto que no cumple con los requisitos y mucho menos contiene la información que necesitamos para consumirlo.

Para poner un ejemplo claro de lo que sucede, tomaremos el caso del yogurt, que es ofrecido en diferentes presentaciones, sabores y con distintas propiedades que ayudan a nuestro organismo para un mejor funcionamiento y fortalecimiento de las defensas a favor de nuestra salud. Esto, según la información que podemos obtener de los comerciales. Sin embargo, hay un detalle muy importante que en muchos casos es un factor que define la decisión de compra; me refiero a la cantidad y presentación del producto.

No somos muchos los que nos hemos preguntado por qué actualmente en los envases de yogurt de marcas reconocidas que antes nos ofrecían información sobre la cantidad expresada en litros ahora es expresada en kilos. Esto, a pesar de ser el yogurt parte del segmento alimenticio de las bebidas a pesar de que su contenido es más denso que una bebida común; pero aun así estamos acostumbrados a recibir esa información en base al volumen neto del producto, es decir que la unidad debe ser expresada en litros.

La norma dice que deberá declararse el contenido neto en unidades del sistema métrico mundial internacional, a su vez nos indica que debe de declararse para líquidos viscoso en peso o volumen peso o volumen. De esta manera, el yogurt tiene una consistencia densa y viscosa, y estaría dentro de la norma que prescribe una información que se exprese en peso a través de kilogramos o en volumen a través de litros según lo determine la empresa.

Si lo pensamos de manera inocente, no habría ningún problema ya que están cumpliendo con la norma. Pero si nos ponemos analizar de manera detenida, no viene a ser lo mismo ya que la cantidad que se ofrecía antes en envases más grandes ahora viene en envases llamados “ergonómicos” que por su forma permiten que la cantidad se reduzca unos mililitros. Para explicar mejor este hecho debemos tener como referencia la siguiente información: 1000 ml o 1 litro de agua equivalen a 1 kilo, sin embargo, si hablamos de yogurt debido a la densidad que este posee no es equivalente un litro de yogurt a un kilo de yogurt, siendo menor la cantidad en volumen que la que recibíamos anteriormente.

Eso quiere decir que tras la simple apariencia de ofrecernos 1 kilo de yogurt, más la falta

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