Eugenesia por Charles Davenport.

Reciban ante todo un cordial y afectuoso saludo de mi parte Charles Benedict Davenport para todos los delegados presentes y la excepcional mesa directiva.

Desde mi relación con la Estación para la Evolución Experimental de Cold Spring Harbour, de la Institución Carnegie y al propio tiempo con la dirección de las investigaciones de la Oficina de Registro Eugénico (Eugenics Record Office) y American Genetic Associatión, realice múltiples investigaciones y di un fuerte impulso a la eugenesia norteamericana. Convirtiéndome en el impulsor de la Primera Conferencia Panamericana de Eugenesia y Homicultura, celebrada en La Habana en 1927 y pude presidir el tercer Congreso Internacional de Eugenesia, llevado a cabo en Nueva York en 1932. Con el redescubrimiento de los trabajos de Mendel, las ciencias biológicas entraron en una fase acelerada y fue cuando decidí adscribirme al mendelismo. Realice estudios relativos a la variación, la herencia y evolución de las plantas y de los animales, obtuvimos muchos resultados. Propuse como objetivo la herencia humana y el mejoramiento racial propugnado por la eugenesia.

Siempre he abogado por el mejoramiento de la raza, apoyándome en rasgos físicos, como el color de los ojos, mediciones de miembros y estatura y ciertas enfermedades (epilepsia, locura y otras afecciones del sistema nervioso), pero también de aspectos sociales como la criminalidad y el pauperismo, de las cuales creemos tienen un fuerte componente genético. Por eso las medidas que propongo son las más típicas; como la selección de la pareja para el matrimonio, la prohibición de mezcla racial y la exclusión de inmigrantes indeseables para los Estados Unidos.

Debemos acabar con el mestizaje, los mulatos y mestizos son inferiores tanto física, como intelectual, psicológica y moralmente a los progenitores de "razas puras" y homogéneas. La inmigración en los pueblos de América debe acabar. Pueden alegar que son “prejuicios racistas”, pero para muestra un botón, vean en lo que nos hemos convertido durante años, permitiendo que aquellos impuros ingresen a nuestras naciones, se liguen con nuestros ciudadanos que con tanto empeño han evadido a estos sujetos carentes de capacidad para procrear. Para ello debemos creer y sostener el Principio de la Supremacía Blanca, esa es la verdadera salida a tantos errores que hoy hacen vida en nuestros hemisferios. Seguimos dando suficiente peso a la herencia, esa es la base fundamental para el verdadero desarrollo de nuestras sociedades, no es la educación o la cultura, es la falsa idea del mestizaje que nos han vendido durante años para una supuesta “integración social” de grupos inferiores.

No fui el miembro de más de sesenta sociedades científicas y me premiaron con la medalla de oro del Instituto Nacional de Ciencias Sociales por obtener argumentos falsos o erróneos, si no por la gran eficacia con la cual afronte la realidad del tomar acciones inmediatas para acabar con los verdaderos debacles de nuestro mundo.

...