Evaluación de prácticas que llevó a cabo en la secundaria Andrés Balvanera

En la segunda jornada de prácticas que se llevó a cabo la semana del 25 al 29 de mayo de 2015, en la escuela Secundaria #8, Andrés Balvanera, tuve muchas experiencias buenas y malas pero que me ayudarán a mejorar mi práctica docente en el aula cuando ya sea mi tiempo de estar frente un grupo.

Pensando en algunos errores que cometí en la jornada anterior, mismos que el profesor titular y mi profesor de la materia me hicieron notar quise hacer algunos ajustes en esta ocasión; por ejemplo, cambié las actividades de inicio por lecturas porque noté que al hacer actividades se generaba desorden lo que no me permitía llegar a una reflexión o conclusión correcta del tema, lo que en cuanto al desorden me ayudó, pero al revisar las encuestas de los jóvenes me di cuenta de que para ellos no es muy agradable ya que la clase de matemáticas la tenían en los 3 últimos módulos y ya estaban cansados, me comentaron algunos que les habría gustado salir más activos de la clase.

Otro punto que cambié fue dictar, esto porque cuando yo anotaba sólo en el pizarrón o les explicaba de manera verbal no hacían apuntes y cuando tenía que retomar temas no tenían idea de que había dicho la clase anterior, entonces opté por dictar los conceptos que me interesaba que quedaran claros y posteriormente explicar en el pizarrón algunos ejemplos del concepto que les había dictado; esto me ayudó porque ya tenían más clara la conceptualización pero me perjudico porque los jóvenes no están acostumbrados a que les dicten y son muy lentos escribiendo, además veían monótono y aburrido el inicio de la clase y ya no se concentraban en la explicación.

Cambié también el revisar tareas al final de la clase, en lugar de hacerlo yo, revisamos la tarea de modo grupal, el acierto fue que ayudó a reforzar el tema y el error fue que en una ocasión fueron bastantes ejercicios y me llevé casi media clase revisando tarea lo que no me permitió llegar a la reflexión del tema del último tema a tratar y la clase siguiente habría evaluación.

El punto de la evaluación fue otra cosa que cambié, anteriormente sólo había evaluado con tareas, trabajos, cuadernos y actitudes al trabajar en equipos, esta vez decidí hacer evaluación del aprendizaje por medio de un examen, el acierto fue que los jóvenes tuvieron que estudiar lo visto en los días anteriores teóricamente, el error fue muy claro, los jóvenes respondieron mejor a la evaluación de la jornada anterior donde tuvieron que aplicar el tema en equipos y de manera didáctica y divertida, esta vez los resultados del exámen dejaron mucho que desear, la mayoría no aprobó, además de que el último día de clases llegó un alumno que no había estado en las clases anteriores y descontroló a todo el grupo. No me dió tiempo de despedirme como hubiera querido y a diferencia de la jornada anterior mis alumnos no salieron con caras felices.

Además realicé mi propia lista de alumnos personalizada que me permitía ordenar mejor la información que tenía que utilizar para la evaluación que entregaría al profesor. Me faltó aterrizar los temas a situaciones problema para ampliar y facilitar la comprensión de mis alumnos.

Y lo último

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