Explotación Minera La Española

Retos y Oportunidades de la Explotación Minera en la Zona Fronteriza para la República Dominicana y Haití

Datos Geográficos

La República Dominicana y la República de Haití son dos naciones que comparten la isla La Hispaniola, con elementos comunes pero, con particularidades e identidades diferentes.

Convergen y comparten una frontera de 391 kms. cuadrados, la cual está integrada en la zona Norte por las provincias dominicanas de Montecristi, Dajabón (Restauración)  y algunos municipios de Elías Piña y por las Departamentos del Nord Este (Juana Méndez, Fort Liberte) en Haití.  En el centro por la Provincia de Elías Piña y el Departamento del Centro (Mirebalais, Hinche y Las Caobas);  y, en la Frontera Sur, compuesta por las provincias de Independencia y Pedernales, lado dominicano y Departamentos Haitianos del Oeste (Font Parisien y Font Verettes) y Sur Este (Anse-a-Pitre).

Su delimitación fronteriza se basa, principalmente, en el curso de tres ríos: Al Norte el río Dajabón (Masacre), al Centro el río Artibonito-Macasías y al Sur el río Pedernales.

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Generalidades de las Dos Naciones

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Elaborado por la Unidad de Estudios de Políticas Económicas y Sociales del Caribe del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo de la República Dominicana (MEPyD). Informe País,  2013

Riqueza Hidrográfica

En la zona fronteriza se encuentran ríos de gran importancia para las dos naciones. En la Loma Nalga de Maco, territorio dominicano, nace la cuenca más importante de la isla, río Artibonito; en su recorrido de 321 kilómetros, penetra a territorio haitiano  re-ingresando a tierras dominicanas para culminar su recorrido irrigando las tierras del plato central de la República de Haití, desembocando en el Golfo de la Gonâve.  

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Igualmente, se encuentra la desembocadura de la cuenca más importante del territorio dominicano, río Yaque del Norte. Estos dos ríos constituyen el patrimonio natural hidrográfico de la Zona Fronteriza, incluyendo, además,  las cuencas de los ríos Maguaca-Chacuey, Macasías, Las Barías y Pedernales.

Biodiversidad de la Zona Fronteriza

La frontera Dominico-Haitiana es una zona con una inmensa riqueza de biodiversidad. Existen diversas zonas bioclimáticas que abarcan desde zonas secas con pluviosidad de 450mm/año a húmedas (2.500 mm/año) con altitud que va desde el nivel del mar hasta los 2.200 metros, originando múltiples regiones micro-bioclimáticas que van desde “bosque seco espinoso” hasta “bosque húmedo montés”.

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                           Fuente: www.educando.edu.do

En la zona fronteriza se comparten tres ecosistemas de cadenas montañosas en los cuales se concentran polos de población que infringen una presión a los recursos naturales; que en su interacción mantienen relaciones comerciales en mercados binacionales de naturaleza formal e informal. Comparten  pobreza y pobreza extrema, en ambos lados, que reflejan, en escala, las grandes diferencias de los niveles de desarrollo de los dos países.

En la realidad geográfica de esta zona,  se encuentra en el sur, el Ecosistema de la Reserva de la Biosfera Enriquillo que se enlaza en el territorio haitiano con el Massif de La Selle (parte del corredor ecológico con los parques nacionales y áreas protegidas del Parque Jaragua, La Sierra de Bahoruco del lado dominicano y, El Parque La Visite, el Lago Azuei y Foret de Pins del lado haitiano.

El Segundo ecosistema montañoso lo constituye el corredor biológico Sierra de Neiba y Montaignes Noires (Montanas Negras), con los parques nacionales Sierra de Neiba y el Monumento Natural Las Caobas, del lado dominicano. Y las áreas de Boin Rouge y Mome Boeuf, a constituirse en áreas protegidas del lado haitiano.

El Tercer ecosistema montañoso corre a lo largo de la Cordillera Central, extendida en territorio haitiano en la Chains du Nord (Cadena del Norte), extendiéndose hasta la parte occidental haitiana, Mole Saint Nicole.  En este ecosistema,  se encuentran, del lado haitiano, el Parque Nacional La Citadelle, Mont Organise o Rio Libón, Petit Paradis (Pequeño Paraíso), Baies de Lacul du Nord, Isla de la Tortuga, Caracol, Presqu’ile du Mole Saint Nicole, a ser declarados parques nacionales.  En el lado dominicano, los Parques José del Carmen Ramírez, Juan Bautista Pérez Rancier,  las Reservas Científicas de Valle Nuevo y Ébano Verde; ubicadas en la zona fronteriza se encuentran Nalga de Maco. Parques nacionales Armando Bermúdez y Montecristi.  Este último,  cuenta con el Parque Nacional Submarino de Montecristi, el Parque Nacional El Morro y la Reserva de Vida Silvestre Cayo de los Siete Hermanos, que incluyen ecosistemas tales como:

• Arrecifes coralinos: desde el Morro hasta Punta Rucia;
• Praderas marinas: viveros y hábitat del manatí y la tortuga verde;
• Estuarios: Bahía de Manzanillo con la desembocadura del río Chacuey, río Masacre y Caño Tapión;
• Manglares de Estero Balsa: 92 km2 que son el 40% de todo el mangle del territorio dominicano;
• Salitrales
• Lagunas Saladilla y Yabacoa: 12 km2 en el curso del río Masacre.

Pobreza de la Región Fronteriza.

La frontera entre la República Dominicana y Haití cuenta con las ciudades más pobres de ambos países, con altos niveles de pobreza y bajos índices de desarrollo socioeconómico y cultural. A pesar de las diferencias culturales y lingüísticas, las poblaciones dominicanas y haitianas de la frontera comparten los efectos de los mismos problemas, que incluyen la desnutrición, la falta de educación y asistencia médica, la degradación medioambiental, las violaciones de los derechos fundamentales y, en definitiva, el bajo nivel de vida (Morillo, 2003; Morillo, 2005; SESPAS, 2006 y Urbano, 2011).

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Elaborado por la Unidad de Estudios de Políticas Económicas y Sociales del Caribe del Ministerio de Economía,

Planificación y Desarrollo de la República Dominicana (MEPyD). Informe País,  2013

Es una zona económicamente deprimida, con escaso empleo y mal remunerado (Murray, 2010). Actualmente, se encuentra entre las zonas más pobres de los dos países y se caracteriza por una carencia de servicios básicos, graves problemas ecológicos y un sistema inadecuado de infraestructuras viarias (SESPAS, 2006; SEE, 2006; ONE, 2007.   En términos demográficos se observa un desequilibrio entre ambas zonas, con tendencia a un incremento de la densidad demográfica en Haití y al despoblamiento o estancamiento poblacional en la parte dominicana (ONE, 2007).

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