Folclor San Nicolás Santa Bárbara Honduras

CREATIVIDAD INSPIRADA POR EL ANACAHUITE

Hablar del folclor es agrupar todas las manifestaciones del arte que se vive en los pueblos. El “Festival de la Rosquilla” en San Nicolás Santa Bárbara precisamente esparce contrastes de color, aromas y sabor, en estas manifestaciones se inspiran bajo la majestuosa sombra del anacahuite, la necesidad de pensar en cómo se puede enriquecer este evento y desde luego sacar el mejor provecho con los productos que se ponen a disposición de sus visitantes.

La danza mantiene vivo el ritual sagrado sobre la naturaleza, que se practicaba desde los nativos de esta nación. Fomentar estos eventos conlleva una serie de actividades que desde el inicio de este festival han sabido realizar desde hace cinco años.

Ser originario de la región e identificarse con el “Festival de la Rosquilla” es sinónimo de cultura, que se recupera con la práctica de dialectos autóctonos como la lengua Lenca, bailes folclóricos como palito verde y el compartir de los asistentes de la zona y visitantes.

Este compartir junto con las manifestaciones culturales crea un impacto socio cultural y económico que está sub utilizado. La ausencia de variedad de productos de la zona fue notable por los visitantes y avalado por otros que expresaban por qué no estaban presenten los productores de hortalizas de San Vicente y los fabricantes de artículos de tusa, tule y junco. Los últimos dos si estaban pero con poca variedad.

Las rosquillas delicia que deleita a las familias que viven en la localidad y fuera de ella. Uno de los pilares fuertes de la economía nicolasense, por su calidad y además el estandarte del festival es una de las fuertes motivaciones para la asistencia a este evento. La combinación perfecta y otro de los pilares fuertes de la economía: el café. Producto de calidad y muy bien posicionado con su aroma y abastecimiento, dejó bien marcada su presencia en el festival.

La presencia de la rosquilla producto protagónico del festival también está dentro de la lista de ausentismo.

Ahora bien, ¿Por qué no invitar a todos los productores de la zona para que den a conocer su producto? Si el festival es de la rosquilla ¿Por qué la representación de rosquillas es tan pobre?

Haciendo uso de la creatividad es importante recomendar mayor promoción del evento para que las familias completas se hagan presentes y según la demanda pensar en otras actividades en la zona. Extender las invitaciones para la promoción y ventas de productos de la región. Dar mayor posicionamiento protagónico a la rosquilla y desde luego continuar y apoyar estas actividades que permiten darle inspiración a la existencia humana y nada mejor que bajo la sombra del anacahuite que acobija colores, aromas y sabores.

Carmen Ma. España Polanco

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