Julieta Lemaitre Fetichismo legal

Reseña: Julieta Lemaitre

Cesar Rodríguez Garavito ubica la obra de Julieta Lemaitre El derecho como conjuro; Fetichismo legal, violencia y movimientos sociales, dentro de la extensa colección que conforman la bibliografía del dilema nacional. Este dilema, consiste en la paradoja de la coexistencia entre la barbarie derivada de la guerra, que ocurre paralelamente al progresismo jurídico en Colombia.

La obra de Lemaitre presenta una posición que asume las criticas hechas a la explicación marxista y liberalista de  la paradoja colombiana. Debido a esto, su obra es una de las mas representativas en torno a la sociología jurídica colombiana de las ultimas décadas. En la obra de Lemaitre, se destacan tres aportes.

 Primero, plantea como solución a la paradoja colombiana hacer un giro teórico donde se ponga de cabeza la critica clásica del fetichismo jurídico. El fetichismo jurídico es explicado por Lemaitre como “no darse cuenta del abismo que separa la aprobación de una ley de su aplicación y de estar de alguna manera engañado por el ritualismo de la norma, posponiendo la confrontación con sus probabilidades de aplicación”. Es decir, considerar que el hecho de la simple existencia de una norma, garantiza las posibilidades reales de su aplicación. En este sentido el derecho no cambia la realidad social, si no que tiene el poder de engañar, y de crear, dando sentido al mundo de los que creen en el derecho. En este sentido, el derecho da las herramientas para que se respete la vida y la dignidad humana en el país, pero esto es impedido por la violencia. Esta posición contradice claramente las marxistas y liberalistas, donde se considera que el derecho es una herramienta para ocultar la realidad de la violencia y la desigualdad social y que no tiene solución, respectivamente.  

Los movimientos sociales surgen entonces como agrupaciones de personas, que aterrorizados por la guerra, decidieron creer en la  nueva Constitución progresista y en la Ley, como medio de garantía para su igualdad y protección.

A pesar de las garantías legalistas, Lemaitre considera la vida emocional como motivación de los movimientos sociales, debido a que ahí encuentra la necesidad de utilizar la Ley para cumplir con ese deseo. Entonces queda claro, que la autora resalta el papel de una nueva generación de activistas, como los LGBT quienes buscan llenar ese deseo de igualdad, por medio de las nuevas leyes progresistas que surgieron de la Constitución de 1991.

Pero en este punto se resalta nuevamente el asunto de la paradoja. Mientras el país parecía avanzar por reformas democráticas e igualitarias, en la periferia se seguían encontrando cadáveres de victimas de la guerra.  Pero si lo que motiva a los movimientos sociales es un deseo que puede ser garantizado por la ley, pero que esta siendo violentado por el conflicto ¿Para que creen en el derecho? Con respecto a esta problemática se considera a otro autor nuevo cuya obra se complementa con la obra de Lemaitre, Mauricio García Villegas, quien es uno de los autores mas representativos de la tercera vía.  Relacionando ambos autores, se puede concluir que la violencia es necesaria para los movimientos sociales debido a que permite generar significados sociales colectivos que facilita la comprensión de la paradoja colombiana.  

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