La Gerencia estratégica se define de manera general como la ciencia transversal

La Gerencia estratégica se define de manera general como la ciencia transversal que a través de la formulación, implementación y evaluación de iniciativas permite a las organizaciones alcanzar sus objetivos  (David, 2003),  en este sentido proporciona elementos fundamentales para el desarrollo de un proceso sistémico que apalanca los análisis de contexto institucionales hacia el cumplimiento de la misión y alcance la visión de las organizaciones. Así, el uso de las diferentes herramientas de planeación estratégica ha sido masificado, especialmente en grandes firmas quienes han encontrado ventajas competitivas en cada una de las líneas de mercado en las que se sitúan, de este modo el crecimiento en la participación de los mercados no se deriva de procesos fortuitos o decisiones basadas en desconocimiento de las tendencias y contexto (tanto interno como externo),  por el contrario se conciben estas expansiones como respuesta de la alta dirección en relación con el análisis del contexto empresarial y su articulación con la planeación estratégica (Geus, 1997. Citado por Nieto, 1997).

Si bien en el sector privado la rentabilidad económica de las organizaciones representa un reto para la dirección, es posible identificar símiles en el sector público,  de acuerdo a Gunn (1996, citado por Bautista, 2008) "la gestión pública acepta que el sector público comparte con el privado la necesidad de lograr objetivos de la forma más económica y más eficiente posible", identificados más allá de balances positivos con índices de rentabilidad altos, justamente en las instituciones públicas los objetivos planteados deben estar directamente relacionados con su impacto en la ciudadanía y la apropiación adecuada de los recursos públicos disponibles.  En este sentido es de gran importancia para las instituciones públicas atender las necesidades que tiene la población, en el caso de la Fuerzas Militares estas necesidades se asocian con percepción de seguridad física y de los activos estratégicos de la Nación, para ello es imperioso que mediante el conocimiento del contexto país se desarrollen planes y estrategias acordes con las capacidades, estructuras organizacionales y de personal con que cuentan las Instituciones, Gunn (1996, citado por Bautista, 2008).

Ahora bien, “las instituciones públicas requieren introducir una mayor flexibilidad en la planificación estratégica, a través de: hacer énfasis en su misión; clarificar la definición de propósitos y medidas operacionales; orientarse mayormente a los resultados, a la gestión de la descentralización y a las necesidades de sus clientes; hacer mayor uso de estándares de calidad y desarrollar una cultura orientada al cambio y a la innovación" (Fonseca, 2014.). Para poder entender y articular los beneficios y bondades que ofrece la administración estratégica en las organizaciones de cualquier naturaleza es preponderante la articulación de los objetivos, las iniciativas estratégicas, los planes  con las perspectivas y procesos internos en el modelo de negocio estructurado ( empleados, jefes y alta dirección), en este sentido Wright, Kroll y Parnell (2000l, citados por Lana, 2008)  proponen como a través del conocimiento de la plataforma estratégica de la organizaciones en los niveles operacionales y tácticos se puede alcanzar niveles máximo de desempeño en cumplimiento de las apuestas organizacionales, para alcanzar este despliegue y el compromiso personal, se han diseñado diferentes herramientas de gestión que articulan los aspectos mencionados anteriormente, un ejemplo de estas herramientas es el Balanced Scorecard de acuerdo con (Sanchez, 2010) lo define como " un modelo de gestión que traduce las estrategias de la organización en objetivos relacionados, que puedan ser medidos a través de indicadores y que estén ligados a unos planes de acción que permitan alinear el comportamiento de los miembros de la organización", de acuerdo a la definición construida es posible inferir en como la herramienta BSC facilita  la ejecución del seguimiento de la plataforma estratégica y relacionando directamente el comportamiento de los individuos con los resultados alcanzados.

En consideración a lo anterior la Fuerza Aérea Colombiana realizó la implementación del Balanced Score Card - BSC, como herramienta de gestión empresarial que permitió la   formulación de una estrategia integral desde un enfoque empresarial totalmente innovador para las instituciones públicas y orientado a la consecución de resultados y objetivos. Hoy luego de 15 años de implementada la herramienta y teniendo en cuenta los diversos cambios en los contextos políticos, económicos, tecnológicos y administrativos se  identifica la necesidad de evaluar, formular y rediseñar la plataforma estratégica implementada y aun vigente.  Está claro que la herramienta BSC consiguió el fortalecimiento operacional y administrativo de la Institución, de acuerdo con Andersen (2002), "el hecho de que las organizaciones públicas estén cada vez más precisadas a rendir cuentas por el desempeño alcanzado, hace más necesaria la gestión estratégica". No obstante, los mencionados cambios en el contexto interno y externo de la Institución suscitan la necesidad de identificar las condiciones de su entorno en relación con la disponibilidad de recursos con tendencia a la baja, cambios de las amenazas en su forma de actuar  y evidentemente fortalecimiento de nuevos roles y capacidades como oportunidades estratégicas del sector en beneficio del país.

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