La Muñeca De Porcelana

Había una vez… bueno una niña de unos 7 añitos era muy

linda siempre feliz , sus rasgos eran perfectos, siempre vestía unos

vestidos muy delicados y hermosos que su mama se los hacia,

todos de su familia la querían demasiado, se llamaba Natalia..

Ella conseguía todo lo que quería con tan solo su mirada tierna y su

sonrisa. Natalia soñaba con una muñeca de porcelana tan linda

como ella y se la tenían que comprar la mañana siguiente, ella

estaba muy ansiosa y emocionada la deseaba con todo su corazón.

Natalia despertó muy feliz era su día, que hermosa se había vestido

para una simple compra de la muñeca.

-Mama? Tú crees que la muñeca me quiera como yo la voy

querer?- dijo la niña mientras su madre la peinaba.

-claro que si Nati te va a querer mucho-rio-pero.. por qué preguntas eso?

No lo se mama, de toda la colección de muñecas que tengo te

aseguro que esa será la más linda – sonrió y salieron de la casa.

Cuando fueron a la tienda estaba cerrada y había un cartel que

decía que nunca más se iba a abrir, había cerrado la tienda para

siempre y Natalia se puso a llorar.

La madre no sabia que hacer para calmar a su hija, pero recordó

que había otra tienda de muñecas en la vuelta de la esquina

entonces la llevo, y entraron el que atendía era un señor de un

rostro no confiable pero la niña estuvo entusiasmada cuando vio a

la muñeca de sus sueños era casi igual a ella “era igual” esa fue la

frase que de repente atormento la mente de la madre cuando vio a la muñeca.

-Mama cómpramela por favor por favor!!- suplicaba la niña

mientras el señor las miraba sonriendo irónicamente (tal ves diría

diabólicamente).

-hmmmmm está bien Nati, te la comprare.

La niña estaba realmente muy feliz con su nueva muñeca de

Porcelana.

Cuando la madre fue a la caja a pagar el efectivo y ya se estaba

retirando el señor susurro:

“No es lo que crees niña ja ja ja pobrecita”

Pero no lo escucharon y salieron de aquella tienda que tiempo

después de lo ocurrido se cerró por que el hombre había muerto

misteriosamente.

Cuando la niña entro al auto y se sentó en el asiento trasero noto

que la muñeca había cambiado un poco de aspecto seguía linda

pero tenía la mirada triste, entonces la niña se puso un poco triste.

Llegaron a la casa y cenaron con su familia pero notaron que la niña

estaba un poco triste y le preguntaron si estaba bien y dijo que si

pero se levantó de la mesa y fue para su cuarto a ver a la muñeca

que ahora se veía

...