La película como medio estratégico motivacional para el fortalecimiento de los valores en los estudiantes

Universidad Nacional Abierta[pic 1]

Dirección de Investigaciones y Postgrado

Maestría en Ciencias de la Educación mención

Planificación de la Educación

La película como medio estratégico motivacional para el fortalecimiento de los valores en los estudiantes de educación primaria

                       Maestrante: 

                                          Serrano Gordelia

            Facilitador:

                                                                  MCs. Danny Bolívar

Lara, Julio 2018

CAPÍTULO I

1.- PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

1.1.- DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA:

    Esta crisis social que estamos viviendo en la actual Venezuela, nos coloca en una profunda reflexión para buscar una solución que pueda solventar al menos uno de los problemas más importantes en este momento como lo es la pérdida total de los valores por una gran parte de nuestra población venezolana,  debido a que atenta contra la dignidad y la conducta de las generaciones futuras más jóvenes de nuestra sociedad.

    Cabe destacar que día a día se observa con preocupación que la cultura de  las personas va sumando un punto a la decadente crisis de valores que está siendo proyectada por la permisividad moral adoptada por los modelos a seguir de sus padres, quienes con sus estilos de vida y modos prácticos de ver y entender sus ritmos de supervivencia en este momento tan crítico no aportan nada positivo al crecimiento de sus hijos.

    En ese mismo sentido se observa que estos comportamientos incitan en muchas oportunidades y sin medir las consecuencias a niños, adolescentes y jóvenes adultos a reemplazar los valores adquiridos con conductas inapropiadas que de una u otra manera van degradando sus principios morales y por ende creando más problemas en su etapa adulta, al carecer de un timón de dirección que los guie en el fortalecimiento de los valores frente a esta problemática.

    Por lo que se refiere a la familia, esta tiene el rol principal y la responsabilidad de instituir en sus hogares la formación en valores para sus hijos, ya que son el reflejo de sus padres pues deben dar el ejemplo, aunado a que los valores son parte integral del individuo y provienen originalmente del núcleo familiar agente natural y primario de la educación.

    Asimismo la educación es vital en el crecimiento y desarrollo humano, es la escuela donde se refuerzan los valores mediante las acciones y la relaciones de cada participante,  materializadas en la interacción continua o el intercambio cultural y social presente en la comunidad donde residen, este escenario educativo debe valerse de la práctica de una enseñanza de calidad para que fortalezca el desarrollo social, intelectual y espiritual en la personalidad de cada estudiante.

    Por consiguiente el docente tiene el compromiso de generar una ofensiva constructiva e integradora, con una nueva estructura para educar, dirigir y liderar con ética, principios, creatividad, compromiso y amor, donde sea capaz de desarrollar tanto en sus estudiantes como en sí mismo, las habilidades y destrezas que puedan lograr sensibilizar los educandos y los escenarios con sus respectivas acciones, que puedan hacerlos reflexionar en relación a sus conductas asimismo examinarse y reconocer por qué actúan de esa forma o por qué lo hacen y así poder analizar las consecuencias de sus actitudes y aprender a autocorregirse.

    Es evidente que lo expuesto anteriormente no resulta tan sencillo, debido a que la escuela se ha debilitado en un considerable nivel sobre la puesta en práctica de los valores, pudiendo ser la causa generada principalmente por la disfuncionabilidad familiar aunado a la debilidad o apatía de las enseñanzas docentes, por ello urge una comunidad educativa que se comprometa, involucre y se dedique a cultivar en los estudiantes desde la etapas iniciales de su desarrollo educativo el amor hacia los demás dando inicio de esta forma a fomentar los valores para que puedan tener sentido de interiorizarlos en sus estudiantes.

    En este sentido los valores son principios éticos con respecto a los cuales las personas sienten un fuerte compromiso emocional y que emplean para juzgar conductas. De acuerdo a eso Garcia (2005) expresa:

El alumno aprende valores humanos y de la propia cultura en un proceso complejo, que va mas allá de la transmisión de experiencias o conocimientos; por lo que se puede inferir que, el ambiente educativo debe ser el espacio propicio, donde se acrisolen las más elevadas virtudes frente al resquebrajamiento de los valores.

    Los valores son guías de la vía que permiten referirnos a una enseñanza constante, son funciones sociales que aseguran la convivencia y el respeto mutuo; así pues, toda comunidad e institución educativa debe implantar los valores de convivencia y respeto. Respecto a esto Bello (2004), dice que:

“Cuando hablamos de valores nos referimos a la guía de vida que marcara todo lo que hacemos y lo que no debemos hacer, los valores tienen función social de asegurar la convivencia y el respeto mutuo”.

    De acuerdo a lo expresado por el autor, toda sociedad debe incluir en su conjunto de normativas los valores hacia las buenas acciones, costumbres, hábitos y virtudes que existen en el ser humano; no obstante la pérdida de valores se refleja en la carencia de la tolerancia, el respeto, el amor y la solidaridad, por esto hay que concentrarse en los aspectos a potenciar tales como la autoestima así como  la empatía, hacer ver que uno mismo puede educarse en valores.

    En consecuencia el docente debe escoger su profesión casi que por vocación y recibir la aprobación de conciencia que le permita no solo instruir sino también formar estudiantes mediante sus saberes, sus conceptos, sus palabras con la oportunidad de moldear sus ideas y comportamientos sobre otra perspectiva de ver la vida; es el ser más significativo que puede influir en sus estudiantes mediante la programación de los valores a través de las actividades de sus contenidos aplicados en el aula.

    En efecto no se trata de memorizar los contenidos o aplicar los conceptos al pie de la letra, de proyectar imágenes o publicar laminas decorativas, se trata de integrar los valores, de hacerlos nuestros, que formen nuestra realidad y sean parte de nuestra personalidad, que se apropien de nuestro ser y logren transformarnos para que así puedan resultar indicadores a seguir en nuestras aulas de clases.

    Considerando que el aprendizaje es una acción que produce estímulos en los estudiantes, se deben implementar estrategias motivacionales que logren desarrollar actitudes básicas de convivencia mediante la transmisión de los ya fortalecidos  valores, que muestren modelos de identificación en los estudiantes y que se transformen en una actividad compartida, continuada y coordinada donde se puedan definir los objetivos de vida, de aceptación de sí mismos, de comprender a los otros, de sentimientos de armonía personal y de relaciones equilibradas y maduras en el ambiente escolar, apoyado en los medios o recursos para tal fin, por ello la incorporación de las nuevas tecnologías educativas puede ser un medio útil para fomentar los valores en la escuela.

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