La socialización, pingüinos y Kaspar Hausser.

La socialización es el proceso en el que todo ser humano  ingresa a la sociedad, a la comunicación e interacción con otros seres que le rodean.

Establezcamos que el lenguaje se refiere a todo tipo de expresión; lingüística, gestual, facial, corporal, táctil, aprendemos de lo que oímos, de lo que vemos, de lo que tocamos, todo eso que percibimos lo procesamos en forma de pensamiento y es precisamente eso lo que nos hace adquirir la lengua del entorno en el que vamos a desarrollarnos al ponerle nombre a los objetos y sensaciones que descubrimos. 

Considero que desde esta perspectiva, el lenguaje es indispensable para la socialización, por ejemplo, al principio de la película podemos notar que Kaspar es una persona enteramente  sumisa, obedece todo lo que le dicen y se queda inerte ante las decisiones de los demás. No tiene voluntad propia, no sabe expresarse pues no sabía articular palabras, no tiene ninguna representación del espacio ni del entorno que lo rodea, no conoce absolutamente nada pues ni siquiera tiene noción de que es el peligro.

A la larga, la presencia de Kaspar se vuelve un problema, pues todos los intentos de asimilarle fracasan lastimosamente. El muchacho se hace incómodo, por eso un personaje decide que tiene que morir. La comunicación no siempre fracasa porque no nos caiga bien una persona, en realidad va más allá. Puede salir mal desde el tono de voz, la postura hasta las palabras que se dicen. En este contexto, la interacción comunicativa juega un papel muy importante.

Los pingüinos son aves muy sociables. Se suelen juntar muchos ejemplares en una colonia. Las colonias son más grandes aún en épocas de nidificación.  La comunicación entre los pingüinos se realiza a través de diferentes actitudes; con movimientos de cabeza, de plumas, etc. 
La colaboratividad es la clave para la sobrevivencia.

En este documental, creo que el tópico principal es el amor de los progenitores, la entrega que va pasando generación tras generación. En verano los pingüinos encuentran pareja y viajan todos al mismo lugar donde nacieron, este lugar se encuentra en la Antártida y es ahí donde ponen sus huevos y los protegen contra el frío. La hembra pone el huevo y el macho se queda a incubarlo mientras la madre regresa a alimentarse y guardar comida para sus crías.

Los machos resisten con el huevo entre sus patas ya que si se cae el polluelo muere. A continuación, las madres regresan y los que se van son los padres para buscar alimento. Las marchas son largas, algunos adultos no sobreviven el trayecto y hay crías que mueren si la comida se demora mucho. 

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