Los Animales

Levanta el ánimo.

Y es que, sobre todo para aquellos que no conviven con más gente, una mascota proporciona afecto constante y elimina la sensación de soledad por su simple presencia.

• Estimula la comunicación.

¿Qué dueño no habla a su perro o gato? La mayoría de personas dan instrucciones, hablan y hasta “conversan” con su mascota, hecho que conduce a una mejora de la comunicación verbal.

• Aumenta la autoestima

Si se consigue una buena comunicación con el animal, es corriente la sensación de “auto-realización”, dado que sacrificamos parte de nuestro tiempo para atender a las necesidades del animalito, que nos corresponde con su compañía.

• Supone una responsabilidad

La mayoría de mascotas requieren de cuidados precisos y diarios. Si el dueño no está al tanto de ellos, el animal difícilmente podría subsistir, por lo que una mascota, normalmente, hace más responsable a la persona que la cuida.

• Suponen diversión

Al poder jugar con la mayoría de mascotas, la persona se divierte y pasa ratos agradables con ellos, por lo que, en cierto modo, el hecho de cuidar a una o más mascotas puede convertirse hasta en un “hobbie” apasionante.

• Alivian el estrés y pueden eliminar la depresión

En muchos casos, una mascota se convierte en un muy buen amigo del que la cuida, y, a su manera, llega a actuar hasta de “confidente”. Es por esto que, si bien suele ser más gratificante contar con una persona física para comunicarle nuestros pensamientos, una mascota puede obrar milagros en cuanto a recuperación del ánimo.

• Dan mayor sensación de seguridad

Especialmente si el dueño vive solo en casa, una mascota suele contribuir a formar un ambiente más seguro y hace que nos podamos relajar un poco más.

Los conejos son animales que se dejan acariciar con facilidad, manejables y que inspiran ternura. Esta terapia está indicada para gente principalmente con depresión y con problemas en la comunicación. El hecho de tener el animal en sus brazos les hace sentirse importantes, protegidos y seguros de lo que están haciendo.

Se ha demostrado hace poco que la presencia de un gato en la vida de una persona con problemas del corazón le reporta una gran mejoría. Esto es así por la tranquilidad que le reporta el animal

lLa terapia con delfines está indicada tanto para enfermedades físicas como psíquicas. Niños y adultos mejoran la atención por sus ganas de interactuar con estos animales. Los ejercicios de realizan tanto dentro como fuera del agua. Entre otras cosas, tras el tratamiento se ha demostrado una mayor sincronía entre ambos hemisferios cerebrales., la reducción de estrés y la distensión que sienten.

La equinoterapia o terapia con caballos está indicada para enfermedades de tipo neuronales y neuromusculares que afectan al movimiento. Estas son

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