Los Pericos
Enviado por amcu • 4 de Noviembre de 2014 • 1.151 Palabras (5 Páginas) • 155 Visitas
El mar Aral es un enorme lago de agua salada situado en el corazón de Asia Central, que llegó a alcanzar los 68.000 km2 de extensión en sus mejores momentos -Extremadura tiene 41.000 km2-. Se situaba en el territorio de la antigua Unión Soviética, y tras la desaparición de ésta y el hundimiento del régimen comunista en 1989, surgieron cinco repúblicas independientes musulmanas en Asia Central. El lago quedó entonces dividido entre los territorios de Uzbekistán y Kazajistán. Por entonces el retroceso del nivel de sus aguas ya era un hecho evidente y desde entonces no ha parado de agudizarse. En determinados lugares, el litoral ha llegado a retroceder más de 150 km y según han ido descendiendo el nivel de las aguas, el desierto ha ido ocupando su lugar.
El desierto de Asia Central es un lugar con lluvias casi inexistentes y una fortísima evaporación durante los meses de verano. En esas condiciones, el nivel del agua del mar Aral depende de la llegada de los ríos que nacen en las montañas situadas hacia el este, a dos mil kilómetros de distancia: el Amu Daria, que llega al sur del mar Aral, nace en el Pamir, entre Tajikistán y Afganistán y recorre los desiertos de Uzbekistán y Turkmenistán, mientras el Sir Daria nace más al norte, en la cordillera del Tien Shan, y discurre por los áridos desiertos del sur de Kazajistán. Ambos se alimentan de las lluvias producidas en las montañas y la aportación del deshielo en las cumbres y los glaciares. Son una especie de Eúfrates y Tigris, ríos que también nacen en las montañas de Turquía y tras cruzar y dar vida al desierto irakí desembocan en el golfo Pérsico. La diferencia estriba en que el Amu Daria y el Sir Daria terminan sus días en un mar interior, el mar Aral.
Este equilibrio hídrico extremadamente frágil se rompió trágicamente a partir de 1950, cuando la entonces Unión Soviética decidió poner en marcha unos proyectos de desarrollo de la zona que incluían la puesta en marcha del regadío agrícola a gran escala. La orografía de la región no es muy proclive al ser humano -altas montañas y enormes desiertos- por lo que había que transformar activamente la naturaleza para poder extraer de ella los recursos necesarios. Por entonces, la ideología de la Unión Soviética obedecía a dicho principio: el desarrollo por encima de todo y la explotación de los recursos a toda costa. El dirigente soviético de la época, el dictador Stalin lo resumía en una terrible frase: "La naturaleza a veces comete errores y debe ser corregida".
Actualmente la esperanza parece llegar al Aral Norte, gracias al cambio de actitud y las medidas tomadas por el gobierno de Kazajistán. Se han propuesto recuperarlo y cuenta para ello con los recursos económicos que proporciona una economía en fuerte crecimiento que gracias a las exportaciones de petróleo, gas y otros minerales está acumulando muchos recursos. Se ha mejorado la eficiencia de los canales y se han controlado las perdidas de agua en los regadíos del Sir daria, río que alimenta la parte norte del Aral, que ahora llega de forma regular a su desembocadura todos los años aportando un importante caudal de agua, y se ha apostado por la construcción de grandes diques que evitan las pérdidas y mantienen estable el nivel del mar. Es el caso de la presa de Kokaral, al lado de la antigua península de ese nombre, gracias a la cual el Aral Norte ha subido tres metros en los últimos tiempos y la salinidad de las aguas ha disminuido con rapidez, permitiendo que volvieran especies de peces desaparecidas anteriormente y que incluso hoy en día se piense en introducir el esturión1.
...