ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Lukács y la dialéctica de la naturaleza de Engels


Enviado por   •  24 de Junio de 2015  •  Tesina  •  3.348 Palabras (14 Páginas)  •  197 Visitas

Página 1 de 14

← Lukács y la dialéctica de la naturaleza de Engels

Gramsci y la cuestión meridional →

El papel de la violencia (Marx, Engels y el marxismo)

Publicado el 16 diciembre 2013 de Antonio Olivé

no violencia (Klee)Amigas y amigos hoy vamos a tratar de un tema que a lo largo de la historia no ha perdido su vigor e importancia. Hace unos años, de la mano del genial dramaturgo Bertold Brecht, ya dedicamos una entrada a este tema: la violencia. Hay, como en el ser aristotélico o en el concepto de democracia, muchos tipos de violencia. No hace mucho hemos visto la violencia entre hinchadas rivales en los campos de fútbol o la lacra de la violencia de género. Pero también existe violencia política o violencia económica (como la muerte de tres personas por ingerir alimentos en mal estado debido a la falta de recursos). Hay violencia estructural y hay violencia capitalista.

Para saber qué papel desarrolla el concepto de violencia en Marx y Engels y en la tradición marxista, a continuación difundimos un excelente trabajo de Gabriel Vargas Lozano, profesor-investigador del Departamento de Filosofía de la Universidad Autónoma Metropolitana-Iztapalapa y director de la revista Dialéctica. Os recomendamos la lectura que empieza ya…

Salud y república. Olivé

_______________________________________________________________

EL PAPEL DE LA VIOLENCIA (MARX, ENGELS Y EL MARXISMO)

Gabriel Vargas Lozano*

NADA más complejo en este último periodo de la historia que referirnos al significado de la violencia para el marxismo, o mejor, si queremos acotar más el tema, de su significado en las obras de los clásicos marxistas.

Las causas de esta complejidad provienen del cúmulo de malentendidos, deformaciones y distorsiones que hay que remover para descubrir cuáles eran las tesis sostenidas por ellos, tanto en relación con la violencia como en tomo a otros temas. Las fuentes de estos malentendidos provienen de todos lados: de las deformaciones intencionadas de quienes percibieron, desde el primer momento en que apareció esta teoría, de que se trataba de una impugnación radical al capitalismo; de su conversión de teoría crítica en ideología legitimadora de un sistema que se construyó en su nombre y que resultó opuesto a las intenciones más profundas de sus inspiradores; y, finalmente, de una práctica política que, con frecuencia, no ha sabido captar el verdadero espíritu, abierto y creador, crítico y autocrítico de Marx, y que ha acabado cayendo en posiciones voluntaristas, militaristas o espontaneístas.

Pero el problema de los malentendidos no se detiene aquí. La obra de Marx y Engels estuvo condicionada por los movimientos históricos de su época; por la evolución de su propio pensamiento y por las tendencias ideológicas que constituían lo que podríamos llamar “el espíritu de su época“. Además, como proyecto inacabado dejó, junto a todos sus aciertos, problemas para ser desarrollados, vías clausuradas e incógnitas por resolver.

Así que tomando en cuenta todo esto, preguntémonos: ¿cuál era la concepción de la violencia que tenían Marx y Engels?; ¿ocupaba un lugar central en su obra?; ¿constituía una apología de ella como la que encontramos en Sorel?; ¿la consideraban como la única vía del cambio histórico?; ¿hasta qué punto estos dos autores estuvieron influidos en su práctica política por los efectos de la Revolución francesa?; ¿su concepción de la violencia se opone a la democracia?, y finalmente, a la luz de lo transcurrido en el siglo XX, ¿sus concepciones, en este respecto, se han vuelto obsoletas?

Trataré de responder a estas preguntas distinguiendo tres aspectos:

a) El análisis objetivo del papel que juega la violencia en la conformación del capitalismo y su relación con el Estado.

b) Las características de la contraviolencia.

e) La tesis del fin de la violencia política.

EL PAPEL DE LA VIOLENCIA EN LA CONFORMACIÓN Y SOSTENIMIENTO DEL SISTEMA CAPITALISTA

La obra de Marx y Engels se inscribe tanto en la vía de las concepciones realistas abierta por Maquiavelo como también en las románticas de Rousseau, los revolucionarios franceses y los socialistas utópicos.

Marx parte del reconocimiento de un hecho: la formación del capitalismo sólo fue posible mediante una serie interminable de actos violentos. En efecto, en El capital nos dice que “en la historia real [a diferencia del relato idílico de la economía política] desempeñan un gran papel la conquista, la esclavización, el robo y el asesinato; la violencia, en una palabra“. (1)

En ese proceso, el capitalismo requirió de una serie de precondiciones económicas, sociales, históricas y culturales, que estuvieron íntimamente vinculadas a la violencia: la colonización; la venta de esclavos; las guerras entre los señores feudales; el despojo violento de los medios de producción de grandes conjuntos de hombres que fueron lanzados al mercado de trabajo como individuos libres e, inclusive, las medidas coercitivas que se tomaron en las ciudades mientras en éstas no existieran las posibilidades de asimilar dicha fuerza de trabajo. Todos estos “despojos brutales, horrores, vejaciones que lleva aparejados la expropiación violenta del pueblo desde el último tercio del siglo XV hasta finales del siglo XVIII” , (2) no sólo son descritos por Marx sino también condenados moralmente.

En el mismo sentido, Federico Engels, en su Anti-Dühring (libro en el que dedica tres capítulos a la violencia), considera que: “Son siempre y en todas partes las condiciones económicas y los recursos de poder de que se dispone los que ayudan a la violencia a triunfar y sin los cuales ésta deja de ser violencia“. (3) La violencia no es, como cree Dühring, el mal absoluto, la causa original sino que el lugar y la forma de la violencia están condicionadas por su función en el proceso económico y, dentro de éste, se desarrolla un sector específico de la violencia como lo es la tecnología armamentista.

De tal modo que para Marx y Engels, en primer lugar, la violencia no puede ser aislada como causa pura sino que se presenta como una consecuencia de las condiciones económicas. En segundo lugar, la violencia tiene la función de desencadenar el conflicto. En este sentido, Marx dice, en El capital, que: “La violencia es la comadrona de toda sociedad vieja que lleva en sus entrañas otra nueva. Es, por sí misma, una potencia económica“. (4) Adolfo Sánchez Vázquez, al comentar esta frase en su Filosofía de la praxis, dice que la violencia no es la que produce los cambios por sí misma “la partera

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (21 Kb)
Leer 13 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com