Mayores Cambios Y Sus Efectos En Las Organizaciones

Mayores cambios y sus efectos en las Organizaciones

1. Cambios en la organización.

Al hablar de los cambios en la organización, es necesario hablar de la modernizaciónno como un proceso histórico sino como un cuerpo conceptual de análisis, como lo expresa Pries (Pries:1995), tal vez cabría una equiparación con las narrativas que Coriat (1992) presenta en su obra El taller y el robot; hay una modernización simple en una primera narrativa enclavada en el taylorismo, donde la principal preocupación es la organización técnica del trabajo, en una segunda instancia, la preocupación es sobre la competencia y el mercado y una tercera la era de la electrónica y su impacto en la organización. En las dos primeras y aún en parte de la tercera subyace una modernidad simple, que se torna reflexiva con el surgimiento de corrientes críticas.

2. Cambios en la estructura de la organización: El agotamiento de los modelos tradicionales. La primera narrativa, ubicada históricamente en la fase taylorista y fordista, es un determinante estructural en el manejo del cambio en las organizaciones y está íntimamente relacionada con el agotamiento de los modelos que históricamente prevalecieron y las causas que los minaron. Durante casi treinta años, la forma en que se organizó el trabajo bajo el esquema taylorista y posteriormente con el fordismo, causó gran impacto en las economías de los países del primer mundo, ya que la productividad se elevó a rangos nunca antes vistos, sin embargo, la inequidad en la repartición del ingreso no puede decirse que fue tan impactante para los estratos sociales menos favorecidos. (Coriat: 1999).

El sistema tayloriano está fundamentado en un gobierno de orden, donde la sumisión, la autoridad y el control de la energía puede producir cuerpos útiles y dóciles como años después lo enunciara Foucault (Foucault:1994) , los sistemas de gestión de los recursos humanos están fundados en un gobierno basado en las reglas, la producción de la adhesión, la canalización de la energía psíquica, la transformación de la energía libidinal en fuerza de trabajo, la producción de la motivación y el camino al éxito individual. Con un sistema de producción basado en la masificación de productos y la constante búsqueda de nuevos mercados, el incremento en el volumen de producción combinado con el uso de estrategias de mercado, se maximiza las ventas pero esto no se refleja directamente en una mejora salarial. La hiperdivisión del trabajo y el alto grado de mecanización indispensable para la estandarización de los productos ha rebasado el modelo fordista, ahora se plantea a la organización la necesidad de una revolución tecnológica y organizacional que transforme el origen de la alta productividad, puesto que ésta no sigue un comportamiento lineal que suponga un desarrollo paulatino.

El factor tecnológico por sí solo no ha producido un cambio notable si no va acompañado de instancias políticas, económicas y sociales. Las implicaciones de la adopciónde tecnología y su uso, ya sea racional o irracional en aras de una mayor competitividad, mayor productividad y control interno y externo no son sencillas de evaluar. En una rápida revisión histórica, partiendo de la Administración científica de Taylor, el factor económico ha

3. Cambios en las formas de competencia: del oligopolio a la cadena de valor.

Concor Una segunda determinante estructural del cambio organizacional se encuentra en la transformación de los modelos competitivos. Los contenidos de competitividad han adicionado otros igualmente relevantes tales como la calidad, la ventaja en el mercado y la

paradoja de la diferenciación-integración del mercado; los modelos tayloristas, fordistas y posfordistas ya no encajan en una situación de esta naturaleza. Esto se debe a que estas formas de producción están íntimamente ligadas a la competencia oligopólica, altas tasas productivas y bajos costos, y también una forma específica de competencia

oligopólica con diferenciación: el monopolio.

En el campo económico, desarrollos como el de Michel Porter (Knights, 1992),

consideran a la tecnología como un factor relevante en la obtención de ventaja competitiva, sin embargo, discurren estratégicamente como formas dominantes de poder. Si se observa a través de la perspectiva foucaultiana, - aunque ésta es una perspectiva unidireccional, ya que según Thompson y Ackroyd (Thompson y Ackroyd: 1995, 615), “los estudios foucaultianos no están disciplinados por el mercado... sólo por su propia identidad y subjetividad” - puede ser criticado por su representación, las prácticas divididas que en él se

manifiestan y la subjetivación que hace de los individuos. Según Porter, en el concepto de "cadena de valor" se identifican las formas de generar más beneficio para el consumidor y con ello obtener ventaja competitiva. Este concepto consiste en hacer el mayor esfuerzo para lograr la fluidez de los procesos centrales de la empresa, lo cual implica una interrelación funcional fincada en la cooperación; otro aspecto es el Análisis Competitivo, que es el estudio de los competidores actuales o potenciales de una organización para formular una estrategia competitiva. Para esto se debe considerar las fuerzas competitivas formuladas por Michael E. Porter (Porter:1986): 1) Barreras al ingreso de nuevos competidores, 2) amenazas de productos sustitutos, 3) poder negociador de los compradores, 4) poder negociador de los proveedores y, 5) nivel de rivalidad entre los competidores.

Para Porter, las estrategias de reconocimiento del entorno o de apropiación de la realidad que enfrenta la organización, son en el presente necesarias por la alta velocidad del cambio, la cual cuestiona y altera la validez de los supuestos que orientan la proyección y el ajuste de las unidades económicas; el conocimiento de la tecnología es parte importante de la revisión que al entorno de la empresa debe hacerse, su uso representa un mecanismo de poder y control, por ejemplo, las redes de cómputo procesan información de la organización y coadyuvan en la generación de los bienes y servicios para el consumidor, recorriendo transversalmente a la estructura organizativa y retroalimentándola de una forma ágil, por tanto, se constituyen en una herramienta de administración, pero también regulan los flujos de información, habiendo accesos generales, restringidos o nulos por lo que también llegan a

ser barreras o ventajas para la negociación de los cotos de poder, de acuerdo a quien los posea.

4. Cambios en la productividad: introducción de nuevas tecnologías en la organización.

Una tercera determinante estructural es el aumento en la productividad; su percepción inmediata se produce precisamente

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