MÉXICO NEGRO.

MEXICO NEGRO.

En lo poco que leí el libro, pude notar como el autor hace mención de lo que las grandes potencias hacen con México, principalmente Estados Unidos, que prometen a los mexicanos grandes mejorías, ya sea en economía o con trabajo, pero lo que en realidad hacen es quitarnos nuestro patrimonio, mientras que nuestro gobierno no hace absolutamente nada al respecto, y solo hace lo que le es ordenado por los países poderosos, lo que lleva a mi memoria lo visto en clase: el objetivo del capitalismo no es la igualdad, no es acabar con el hambre, sino, ver que tanta riqueza puedo acumular.

Con respecto al gobierno, Lázaro Cárdenas fue el único que se atrevió a llevar la contra a Estados Unidos y detener, al menos por un tiempo todas las injusticias que estaba cometiendo, al expropiar el petróleo, que como sabemos no fue aprovechado por un largo tiempo, pero al fin de cuentas era nuestro. Yo creo que esto se debe a que las grandes potencias nos hicieron lo mismo que a nuestro país hermano Cuba, nos amarraron los brazos para que, mientras el petróleo fuera solo nuestro, no pudiésemos extraerlo ni disfrutar de sus beneficios, y de esta manera al final terminaríamos accediendo a sus intereses y mandatos.

Otra cosa que observe, fue el poder de la iglesia como medio de control, ya que como cuenta Don José Guadalupe respecto a la batalla de Puebla, se negaba a aceptar a “los republicanos” según por ser traidores, lo que si me sorprende es que los campesinos tuvieron el coraje de ir en contra, aun cuando sabemos que nuestros compatriotas de antaño fueron controlados por la iglesia, que les limitaba muchas cosas y que además les negaba, dice don José, a darles la última bendición, lo cual debió significar mucho para alguien que no tiene otra cosa más que esperar de quienes le prometieron una vida mejor, y una vida después de esta.

Por otra parte, se nos ha convencido de que tendremos un mejor futuro y un gran porvenir, y de que hay cosas que nos limitan este avance, tal es el caso de los campos petroleros que afloraban en la región huasteca, y que según afectaba a la agricultura y la ganadería.

En fin, todas las naciones poderosas han tratado de quitarnos algo que por derecho nos pertenece, mientras que nuestros “lideres” no hacen nada por evitarlo. Mientras que el pueblo pide a gritos que se le libre de esta injusticia, y el resto de los mexicanos nos quedamos cruzados de brazos sin hacer nada. Tal vez no nos creemos capaces de hacer algo, o tal vez esperemos a alguien que sea capaz de organizarnos y hacer algo, lo cierto es que la historia nos ha enseñado que solo haremos algo cuando sintamos el agua hasta el cuello, y la corriente halla arrastrado a nuestros hermanos, y trataremos de remediar con sangre lo que en su tiempo pudimos solucionar por la paz.

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