PROFESIONALIZACIÓN DOCENTE Y ESCUELA PÚBLICA EN MÉXICO 1940-1994

PROFESIONALIZACIÓN DOCENTE Y ESCUELA PÚBLICA EN MÉXICO 1940-1994

SEGUNDO SEMESTRE

ENSAYO

“LA EDUCACIÓN SINDICAL EN LA FORMACIÓN DE MAESTROS”

HIDALGO DEL PARRAL, CHIH. JUNIO 2011

Introducción.

El tema educación, es generalmente parte del discurso político; las reformas educativas son caprichos necesarios de la clase empresarial coludida con los políticos quienes siempre tienen grandes compromisos con este pequeño segmento de la población. El Sindicato Nacional de trabajadores de la Educación (SNTE), fue creado con propósito de defender los intereses de la clase trabajadora en el ramo educativo; ciertamente se han logrado beneficios para sus agremiados, a precio excesivamente caro ya que el SNTE por siempre ha mantenido una relación política perversa con los gobiernos en sus tres órdenes: municipal, estatal y nacional; manipula a sus agremiados, los amenaza veladamente sino acceden a caminar por la ruta que ellos marcan.

Siempre detrás de un movimiento sindical existe el interés de la cúpula del SNTE por ocupar cargos políticos, u obtener beneficios económicos personales, o familiares, Elba Esther Gordillo es un claro ejemplo de ello; vendió las prestaciones de los compañeros del subsistema federal en el momento en que no logró obtener lo que pretendía del que fuera siempre “el partido de los maestros”: El Partido Revolucionario Institucional (PRI), llegando al grado de formar su propio partido. Los maestros a su servicio se encargaron de aplacar a la base revoltosa que se oponía a tal despojo; fueron pocos ciertamente, ya que la educación que el SNTE brinda al docente es más bien antidemocrática, puesto que educa capitalizando únicamente la obediencia, y la conservación a través de la metodología de la coerción, y las técnicas: Disciplina y obediencia; el maestro es encausado a la ideología de la jerarquía, la cual persigue un fin individual y no colectivo.

El presente trabajo se elabora con la finalidad de analizar de forma sintética y breve la formación del maestro, la cual es determinante en el proceso educativo que viven los estudiantes del país; el maestro pone en práctica la metodología y técnicas con las cuales el SNTE lo educa a él. En el salón de clase existe también la democracia como concepto, sin embargo en la práctica se convierte en autocracia; todo bajo la ley del maestro; es quien tiene el poder y control, la ideología jerárquica se hace presente, los mecanismos de autocontrol ejercidos en el aula, punto bueno, punto malo, alumno con privilegios, alumno al que hay que someter mediante la discriminación, el escarnio etc.

Lo antes descrito es similar a los niveles desde los cuales el SNTE forma al maestro, y que luego él traslada al salón de clase, y de ahí a la sociedad en la que el estudiante está injertado.

Otro de los objetivos es que al momento de leer el documento el futuro docente o el que ya labora como tal se encare con su realidad, reflexione lo importante que es tanto dentro de la organización sindical, como en la comunidad escolar, y tome la determinación, de aportar proyectos que cambien la actual manera en la que las escuelas normales del país están formando a los futuros maestros, las cuales merecen ser sujetas a un análisis profundo y comprometidas a dejar las viejas maneras de entrenar maestros, puesto que la globalización exige otro tipo de educación, la cual será imposible de lograr si antes no se cambian las estructuras educativas de las escuelas normales.

El maestro al egresar debe haber desarrollado las habilidades del análisis, la reflexión y crítica; esenciales para oponerse a la formación equívoca que promueve el SNTE.

La educación sindical en la formación de maestros

Todas las instituciones de la sociedad civil forman al hombre en concreto; lo forman en armonía y en contradicción con ellas, el maestro es formado también por el conjunto de instituciones en las cuales existe (escuela, familia, etc.) sin embargo se contempla la educación normal como la institución responsable de su formación, sin que esto implique que la educación normal sea la única que forma maestros, aún cuando sea la encargada por el Estado para hacerlo; es aquí justamente donde radica un problema relevante para la formación del docente.

La escuela normal forma al profesorado en cuatro años, posteriormente lo arroja a ser profesor por primera vez; justamente cuando finaliza su rol de alumno comienza el de docente; la normal no lleva un seguimiento de su inserción y desarrollo en el mundo de la docencia, por lo tanto no sabe lo que el profesorado está haciendo.

Sin una evaluación de la práctica de los docentes recién egresados no hay manera de asegurarse sobre la efectividad de la formación que se le proporcionó, quedando de lado la posibilidad de una transformación de la escuela normal buscando formar trabajadores académicos no en lo abstracto sino provisto de elementos teóricos y técnicos que posibiliten su desempeño con conciencia y capacidad en su labor.

La carencia de evaluación trae un grave problema no sólo para la educación normal, sino para el mismo docente como se menciona en el párrafo anterior; el nuevo docente se encuentra expuesto a la influencia del contexto familiar al que pertenecen los educandos, además contribuyen otros factores como los medios de comunicación que intervienen en la formación del docente y de sus alumnos, el sindicato al cual pertenece también interviene en su actuar como maestro, es evidente que la educación formal desatiende antes de lo indispensable a su producto y serán otras las circunstancias y las instituciones que lo seguirán formando.

El docente recién egresado es ya un trabajador que se ve abandonado por la institución que lo ha formado y refugiado en una organización sindical, la cual tiene una estrecha relación con su función docente ya que el maestro esta involucrado de diversas maneras en la vida interna sindical. El sindicato ejerce una influencia directa que el maestro vive orgánica y cotidianamente; el SNTE es un sindicato burocratizado por lo que no puede educar en el análisis y en la crítica; lógicamente una institución con las características ya mencionadas está incapacitada para educar en y para la transformación.

La educación que brinda esta institución es más bien antidemocrática, ya que educa capitalizando únicamente la obediencia y la conservación, la vida interna en el SNTE es susceptible de analizarse desde tres niveles: el primero atañe a la ideología del sindicato; el segundo a su estructura orgánica, y el tercero a los mecanismos susceptibles de control.

Primer nivel. El SNTE tiene una ideología del nacionalismo, la democracia,

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