PROPUESTA DRAMÁTICA Y ESCÉNICA BASADA EN LA OBRA "LA PLAZA DE LA TOLERANCIA" ESCRITA POR JOSÉ LUIS GÁMEZ.

República Bolivariana de Venezuela.

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria.

UPEL. Universidad Pedagógica Experimental Libertador.

IPC. Instituto Pedagógico de Caracas.

Especialidad: artes escénicas.

Materia: Método de las enseñanzas de las artes escénicas.

PROPUESTA DRAMÁTICA Y ESCÉNICA BASADA EN LA OBRA “LA PLAZA DE LA TOLERANCIA” ESCRITA POR JOSÉ LUIS GÁMEZ.

Caracas, 15/02/2013.

PROPUESTA DRAMATICA

La propuesta Dramática basada en la pedagogía teatral es una estrategia que aporta disciplina y contribuye en insumos al proceso de enseñanza y aprendizaje del estudiante, desde una perspectiva crítica y reflexiva sobre las artes escénicas. La intención pedagógica es contextualizar la acción dramática del actor y la actriz en escena como una acción social y cultural. Conectando la comunicación teatral entre el espectador y el actor. Para ello nos basaremos en la teoría y conceptualización de cuatro autores puntuales que son Bertolt Brecht, Augusto Boal, Constantino Stanivlasky y Enrique Buenaventura.

Bertolt Brecht:

Brecht (1898-1956) fue un Poeta, director teatral y dramaturgo alemán que ha influido enormemente en la creación y en la producción teatral moderna. Una de sus técnicas muy destacada es el método del Distanciamiento que consiste en alejar al espectador de la representación teatral y despertar en ellos una actitud critica racional que le permitirá sacar sus propias conclusiones en vez de dejarse cautivar por sus emociones que fácilmente resultan improductivas, tal es el objetivo central del efecto del distanciamiento. Esta técnica consiste en crear a través de apartes, texto y las máscaras, la ruptura de los procesos de identificación que surgen en los espectadores con los personajes por procesos de tipo emocional, dándole de esta manera, un sentimiento de extrañeza que obliga a que el que recibe el mensaje, piense, lleve a su esfera racional, lo que de una manera emocional lo podía estar manipulando a pensar de una determinada forma. De acuerdo con Brecht (1898-1956). Este rompimiento de secuencia e identificación, al generar, un proceso de enfriamiento emocional puede hacer que al formularse preguntas, tenga la obligación de responderse. Esto genera una racionalización que evita la manipulación emocional, fundamentada en el manejo de la identificación y reconocimiento de la situación. Producir el choque de la ruptura del mensaje emocional, por otra parte, puede al distanciar, volvernos fríos e insensibles. Por ello esto hay que manejarlo, de manera muy equilibrada.

Partiremos de este recurso para aclarar algunas confusiones que se desarrollaron en los actores a medida que avanzaban los ensayos, todo esto para despejar dudas tanto en la escena interpretada como en los espectadores y puedan reflexionar sobre lo que se le esta planteando, debido a que el tema de la obra es la homosexualidad y la ninfomanía, los cuales son difíciles de digerir para el publico general, por ello de que son “temas tabús”. Aunque el dramaturgo Gámez lo manejo con una comedia, esto puede ser un punto a favor del director-directora (Montoya y Maita) como no lo puede ser. Debido a que por medio de la comedia el espectador solo se sumerja en las risas superficiales que otorga la obra y no llegue a esa reflexión sobre el tema, por ello es muy importante apalancarnos en la técnica del Distanciamiento Brechtiano. El espectador podrá entender que no es una burla, sino una critica social, que es una condición de vida aceptada por entes gubernamentales y que todos merecemos ser respetados y tratado decentemente independientemente de la profesión u oficio que ejerzamos. La igualdad como persona y la tolerancia, son tópicos tocados en “La plaza de la Tolerancia” que como directores no debemos permitir que el espectador pase por alto y llegue a la reflexión del mensaje inmerso en la obra. Para ello se utilizaran dos distanciamientos, el primero basado en una duda que tuvieron los actores referentes al texto que es:

En este fragmento se hace el distanciamiento, debido a que el actor (Montoya) decía que “tampoco” cree que las que se llaman Susanita son putas, donde la actriz (Maita) se sale del personaje y le aclara que el escritor lo que quiso decir es que “también cree que las que se llaman Susanita son putas”, afirmando que así esta en el texto. Como fue una disputa que se tuvo mientras se ensayaba la obra, fue pertinente anexarlo como parte del descubrimiento y experiencia del actor y actriz dentro del montaje, para justificar la duda generada.

El segundo distanciamiento forma parte de la justificación de por qué no es una simple comedia sino una crítica social hacia la intolerancia de algunas personas en aceptar a otras personas que son diferentes, en este caso la diferencia radica en la homosexualidad y ninfomanía, mencionado anteriormente. Para ello lo vamos a expresar en el siguiente fragmento:

“Distanciamiento: porque no debemos de juzgar a nadie, por ser diferente… son personas que ya existen en la sociedad. No se les pide que las acepten, pero si que las respeten y las toleren, porque son seres humanos igual que todos nosotros”. Así el espectador podrá comprender con claridad la crítica de la obra y no sólo se sumergirá en las risas y el drama de esta, considerándolo algo ajeno a la realidad. Sino que el mensaje va directamente a cada uno de ellos.

Augusto Boal:

Boal (1931-2009) dramaturgo, escritor y director de teatro brasileño. Conocido por el desarrollo del Teatro del Oprimido en Brasil de 1971, bajo la joven forma del Teatro Periódico, con el objetivo específico de tratar problemas locales desarrollándose a escala como un movimiento mundial estético, no violento, que busca la paz, pero no la pasividad. siendo un método de Humanización por medio de un sistema de Ejercicios, Juegos y Técnicas basado en el Teatro Esencial, para ayudar a los hombres y a las mujeres a desarrollar lo que ya poseen dentro de sí mismos: el teatro. El Teatro del Oprimido ofrece al actor el método estético para analizar el pasado, presente e inventar el futuro, sin esperar por él. Ayuda a los seres humanos a recuperar un lenguaje que ya poseen, aprendemos como vivir en la sociedad jugando al teatro. Aprendemos como sentir, sintiendo; como pensar, pensando; como actuar, actuando. El Teatro del Oprimido es un ensayo para la realidad. Se puede definir como oprimidos a los individuos, o grupos, que son socialmente, culturalmente, políticamente, por razones de raza o sexualidad, o en

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