PROPUESTA. "Favorecer La Autonomía Con El Trabajo Colaborativo En Las Escuelas De Educación básica"

PROPUESTA.

“Favorecer la autonomía con el trabajo colaborativo en las escuelas de educación básica”

INTRODUCCION

Cuando hablamos de la palabra educar y escuela, inmediatamente nos inclinamos a pensar en los niños y las niñas, en los maestros como responsables del acto educativo, así como las relaciones que se establecen en ese ámbito como son: de afecto, respeto, confianza, además de el conocimiento de la realidad para resolver de manera razonable problemas que se presenten favoreciendo la autonomía que se pretende en este nivel de preescolar.

Para que se logre dicha tarea, es necesario que la educadora identifique la concepción que tiene el (la) niño(a) sobre el mundo y la realidad que le rodea. Ante los retos actuales, es necesario realizar reconstrucciones muy significativas para los educandos a través de un proceso específico tomando como base los fundamentos, propósitos y principios que enmarcan el Programa de Educación Preescolar 2004, que rige actualmente el perfil de egreso de los educandos a través competencias a favorecer en los Campos Formativos establecidos en el Programa vigente.

Para ello es imprescindible el diálogo constante entre alumnos y educadora pues ésta última debe estar consciente que a pesar de ser quien imparte educación, no es quien da todos los conocimientos, es primordial que abra su visión para aprender junto con sus alumnos a través de conversaciones de calidad y confianza donde reconozca que los niños son capaces de tomar decisiones, de interactuar y lograr acuerdos en este proceso de enseñanza-aprendizaje.

Si queremos que el niño favorezca su autonomía en el aprendizaje, es fundamental darle oportunidad de apropiarse de estrategias y técnicas que le ayuden a interpretar, transformar, contrastar, construir, reconstruir críticamente la información que recibe motivándolo y despertando la necesidad de aprender a aprender.

Para ello, se puede crear una necesidad y un ambiente de aprendizaje e investigación donde pongan en juego su curiosidad, capacidad de relacionarse con los demás a través del respeto, apoyo, organización para formular sus propios objetivos y metas.

Saber trabajar en equipo es una competencia muy importante, si se aprovechan las cualidades de las personas se pueden realizar actividades con éxito, saber negociar y tomar decisiones con la ayuda de otros, son habilidades que nos hacen más eficientes en nuestro desempeño en diferentes actividades tanto personales como institucionales; esto se da en los diferentes niveles y grados entre las personas para trabajar de manera armónica para su subsistencia y desarrollo.

En el trabajo en equipo(colaborativo), de acuerdo con José Luis Espíndola Castro “se establecen nuevas rutinas y cada miembro contribuye con sus propias expectativas, temores y motivaciones de forma consciente o inconsciente y de alguna manera se pone en juego del dominio de otras competencias como comunicación, flexibilidad, negociación, capacidad para lograr acuerdos, liderazgo, integridad y proactividad”.

Se considera que el papel de la educadora es fundamental en el aula, pues a través de fomentar la autoconfianza, seguridad, disposición al riesgo, autoevaluación reflexiva y crítica, así como tomar la función de investigadora de la propia práctica docente tendrá un crecimiento profesional adquiriendo experiencia más amplia y específica además de una base para su intervención educativa.

Con estas consideraciones sobre la experiencia entre la teoría y la práctica, se pretende realizar una unidireccionalidad apoyada en estrategias de vinculación y participación que se llevan a cabo a través de las relaciones entre los contenidos que se manejan en este nivel educativo.

El desarrollo de las conductas pro-sociales, es uno de los temas relevantes en el trabajo docente, las cuales abarcan muchos aspectos del desarrollo personal y social en los procesos de construcción de la identidad, comprensión y regulación de las emociones y la capacidad de establecer relaciones interpersonales en estrecha relación permitirá enfocar experiencias en el grupo, además se debe considerar la influencia de las familias en el desarrollo de éstas capacidades y la manera de intervención en las diferentes actividades de otros campos formativos para reconocer la importancia de ésta en relación con el trabajo en las diferentes competencias que se pretende favorecer en los niños.

ANTECEDENTES

Ante los presentes retos a que nos enfrentamos en el nivel preescolar respecto al uso de diferentes formas de organización considerando las nuevas tecnologías y no perdiendo de vista la función del Jardín de Niños como un espacio de aprendizajes escenciales(significativos) y de interrelaciones para el futuro de los niños en su escolaridad; además de apertura hacia los demás y a su mundo, un lugar de descubrimiento de sus alcances y logros personales en su propio beneficio respondiendo a sus necesidades y deseos con eficacia a través de prácticas pedagógicas articuladas y con sentido utilitario para los alumnos.

El juego y el trabajo colaborativo son fundamentales como un recurso de enseñanza, pero no son los únicos, pues los niños son capaces de concentrarse en otros tipos de actividades como la observación de diferentes elementos, experimentos sobre la naturaleza, elaboración de explicaciones o la búsqueda de información al interior de sus prácticas cotidianas, etc. siempre y cuando despierten su interés y tengan sentido para ellos dando la oportunidad de buscar la resolución de problemas y el intercambio de puntos de vista con sus iguales favoreciendo su autonomía.

Para ello se puede incluir el aporte de César Coll: “La concepción constructivista asume que las personas aprendemos mediante un proceso de construcción de significados acerca de la realidad que pretendemos conocer. Dicho proceso implica el establecimiento de relaciones entre los conocimientos y experiencias previas de que se dispone y las características de la parcela de realidad a que se refiere el aprendizaje”.

Esta actividad es un medio de aprendizaje compartido, comprometido donde se adquieren experiencias significativas a través de intercambios verbales, de escritura donde la interacción es un factor de suma importancia para acceder a nuevos conocimientos.

De acuerdo con Vigotsky, “La actividad compartida constituye un significativo contexto social para el aprendizaje. Cuando un niño comienza a aprender una habilidad, el contexto social puede ser lo único que haga significativo el aprendizaje; el niño puede tratar de aprender simplemente porque la interacción con el maestro es muy agradable”. La interacción social constituye un apoyo físico y motivacional cada vez más fuerte si se da en un contexto

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