Pedagogia y andragogiapor Marisol Hernández Orellana

las diferencias de pedagogia y andragogiapor Marisol Hernández Orellana, docente online – UNIACC*

Los campus virtuales, o las llamadas universidades en línea, se han convertido en un fenómeno extendido en el planeta. En este escenario educativo, cobra importancia, para el éxito del proceso de enseñanza- aprendizaje en la educación a distancia, la interrelación comunicativa y emocional que se dé entre los distintos actores pedagógicos. Por este motivo, centramos la mirada en el triángulo pedagógico del e-Learning, dado que a partir de la fluida intercomunicación entre sus actores se enriquecerá o empobrecerá la construcción democrática y colaborativa del conocimiento.

Los espacios exclusivos para albergar cursos y alumnos en la red son los campus virtuales o las llamadas universidades en línea. El e-Campus, por tanto, es una plataforma tecnológica de eLearning, cuyo sistema informático permite la gestión de todas las etapas de un proyecto de enseñanza a distancia (Sánchez, 2007). Como asimismo, permite el acceso a la formación y/o capacitación, a través de modelos de enseñanza virtual flexible, inclusiva y sin restricciones espacio-temporales (García, 2003).

No obstante, en la educación, en general, sigue coexistiendo el perfecto reducto de la ambivalencia entre el progreso v/s el status quo, entre la confianza y la desconfianza. Espacio en el que entramos de lleno a un escenario parecido al del mito de la caverna, donde intentamos proyectar desde nuestra penumbra, las fortalezas y debilidades de lo que es y ha sido la educación, más aún, de lo que es y será la educación eLearning. Tierras tan poco conocidas, realmente, son las que intentaremos recorrer.

El esfuerzo apunta a develar, más allá de la inminente realidad, de que con el progreso de la tecnología, la formación y la capacitación a través de Internet, han implicado una expansión de la educación a distancia (Sánchez, 2007). Sino más bien, a cómo en la actualidad las universidades en línea o eCampus, especialmente UNIACC en Chile, han iniciado un camino innovador y de vanguardia en materia educativa. Ellas han tenido que involucrarse y asumir, derechamente, temáticas como: mediación pedagógica, nuevos paradigmas pedagógicos, integración de los recursos tecnológicos, educación inclusiva y flexible, y planeación y diseño pedagógico -entre otras- adecuándolas a la educación a distancia.

El triángulo pedagógico eLearning es una muestra de la innovación en materia educativa andragógica -o educación de adultos- en la educación a distancia. De la armoniosa interrelación de los actores pedagógicos presentes en éste, creemos se marca la diferencia, fundamental, entre una educación eLearning y un e-reading. Entendiendo por este último, plataformas educativas centradas, fundamentalmente, en el empaquetamiento de contenidos (Sánchez, 2007), sin espacios pedagógicos virtuales que consideren la interacción cognitiva y afectiva necesaria para instar a la construcción colaborativa y democrática del conocimiento.

Antecedentes

Consuelo Undurraga (2004) aborda la manera en que aprenden los adultos y cómo el triángulo pedagógico se sitúa como un modelo descriptivo de ello; conjugando variables que inciden en el proceso de aprendizaje. Integrando este modelo el que aprende, el que enseña y el objeto a enseñar, subrayando el contexto sociocultural en que se desarrolla la situación de formación. Todo ello enmarcado en la educación presencial.

No obstante lo anterior, son diferentes las metodologías que se han debido implementar en el aula virtual, todo ello con la intención de lograr un proceso educacional efectivo y afectivo, que permita evolucionar hasta alcanzar diferentes habilidades, indispensables, para permanecer participativamente en esta experiencia educativa eLearning.

Es interesante destacar lo relativo a la implicancia emocional, que vivencian tanto los estudiantes como los docentes online, al participar de este proceso de enseñanza – aprendizaje eLearning; que va más allá de la interacción con las herramientas tecnológicas. Apuntamos al impacto interpersonal que se genera en esta modalidad de aprendizaje, mediada a través de todos los canales de comunicación verbal y no verbal. (Herrera, L; Mendoza, N. & Buenabad, M., 2009)

Cabe destacar que, considerando lo expuesto anteriormente y teniendo como objeto de análisis la realidad particular de la universidad UNIACC, es que se elabora este constructo teórico. Por tanto, puede o no ajustarse a la realidad de otras entidades universitarias.

El triángulo pedagógico eLearning surge al alero del sustrato teórico de los postulados de Undurraga (2004) y los de Herrera et al. (2009), considerando –asimismo- que la educación eLearning nace del hacer pedagógico en un ambiente colaborativo, de comunicación bi y multilateral, de carácter asincrónico y/o sincrónico; del cual pende el aseguramiento del logro de los objetivos. (Hernández, 2010)

Entenderemos por triángulo pedagógico eLearning al modelo explicativo de la mediación pedagógica que se produce a través del trabajo colaborativo entre el docente y la díada alumno-alumnos online y la interrelación comunicativa y emocional entre estos y el facilitador académico comunicacional. Cada uno de los cuales han integrado las TICs y superado la multiubicuidad tecnológica. (Hernández, 2010)

La Integración curricular de las TICs implica superar las fases de apresto tecnológico o proceso de iniciación en el uso de las tecnologías y la de incorporación que centra la atención en la utilización tecnológica. Cuando hemos superado todos los obstáculos anteriores (pérdida de miedo, conocimiento y uso sin propósito educativo claro), dejando a un lado la mirada tecnocéntrica del uso tecnológico por un énfasis claramente pedagógico, bien direccionado y apropiado de las TIC estamos frente a integración. (Sánchez, 2002, pp. 3 - 4)

Asimismo, cuando logramos utilizar las TICs sin cuestionar su funcionamiento sino que centramos la mirada en el logro de un objetivo determinado, tornándolas invisibles, hemos superado la ubicuidad tecnológica. (Sánchez, 2002, pp. 3 - 4) Así por ejemplo, cuando deseamos comunicarnos telefónicamente con alguien no nos cuestionamos cómo funciona el mecanismo tecnológico llamado celular, sino que nos centramos en que queremos comunicar “algo a alguien”. Por extensión,

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