Poco ético O Poco Moral

¿Poco ético o poco moral?

Este es el caso del empresario y por un breve plazo político chileno, Francisco Javier Errázuriz Talavera, más conocido como “Fra-Fra”, quien ha tenido una seguidilla de actos inoportunos con sus empleados en el último tiempo.

Todo se remonta al pasado 01 de junio cuando tres trabajadores paraguayos se quejan en la fiscalía nacional y en la embajada de Paraguay ubicada en Santiago, de que el empresario no ha cumplido con los pagos prometidos. Tras la denuncia la autoridad guaraní se contactó con el Ministerio Público chileno, donde se decidió abrir una investigación, movilizando a la PDI (Policía de Investigaciones) y a un equipo especializado del organismo perseguidor con estancia en Rancagua para determinar la posible comisión del ilícito.

A raíz de ese caso se empieza una investigación del tema y se descubre que en el fundo “Esperanza” ubicado en Marchihue, sexta región, se encontraban alrededor de 150 empleados paraguayos que trabajaban de manera ilegal. No sólo eso provocó el espanto de la ciudadanía y de las autoridades, sino que además estos eran tratados de una manera inadecuada, recibían una sola alimentación al día, sus condiciones higiénicas eran bastantes precarias, y sus estados de salud no eran óptimos. Uno de ellos declaró que eran tratados como verdaderos esclavos.

La investigación fue evolucionando y según fuentes judiciales se descubrió un tráfico de inmigrantes, a lo cual Errázuriz responde que no eran trabajadores sino que se encontraban en una capacitación en un programa de intercambio.

A Través de grabaciones de voz se escucha al empresario declarar que “tiene santos en la corte” por lo cual la justicia no pasará sobre él.

El pasado 25 de octubre fue citado por el Tribunal de Garantía de Pichilemu, en el cual se ausentó por encontrarse internado en la clínica UC San Carlos de Apoquindo, por un problema de sintomatología cardiovascular.

Dicha institución ordena al SML (Servicio Médico Legal) de verificar la fidelidad del asunto, por lo que los resultados fueron con comprobados positivamente.

Recordemos que el empresario ya había sufrido un caso similar hace algunos años atrás cuando se le citó al tribunal por problemas financieros, en el cual en aquella ocasión sufrió un paro cardiorespiratorio.

¿Es posible que el poder económico pueda evadir la justicia?

Sí. De eso ya nos hemos dado cuenta, pero ¿qué pasa con los derechos humanos que están en juego? ¿Es que acaso el sr. Errázuriz no tiene conciencia moral?, ¿el poder es más grande que la vedad?

Estas son preguntas que probablemente muchas personas se han hecho, pero realmente pocas de ellas han logrado responder.

Por mi parte

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