Sexismo ambivalente, estereotipos y valores en el ámbito militar

Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra

Recinto Santo Tomás de Aquino

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Estudiante:

Pamela Caro Brito (2013-5265)

Grupo:

 ADM-213-T-002

Profesor/a:

Geisha Carpio

Santo Domingo, D.N.

19 de Febrero 2016.

Análisis

Sexismo ambivalente, estereotipos y valores en el ámbito militar

Hoy en día la presencia femenina es muy notoria debido que se ha generado un sobresalto en la que se está tratando de demostrar que las mujeres puede enfrentar de manera similar las mismas circunstancias que un hombre. Apuntando a la construcción de una sociedad incluyente que reconozca a las mujeres como sujetas exitosas en el ámbito militar, protagonistas de nuevas historias, donde se respete la diferencia, la autonomía y libertad de las mujeres, pero no ha sido tan fácil debido a las diferencias de ideas que existen con respecto a los roles de la mujer y las actitudes que se han implantado frente al tema.

Muchos aún con mentalidad tradicional donde entienden que el género femenino aún esta solo para atender el hogar, percibiendo al hombre como el sexo superior que puede tener la libertad de hacer lo que le plazca tanto en el ámbito laboral como personal. Es esto lo que nos plasma este interesante artículo nombrado “Sexismo ambivalente, estereotipos y valores en el ámbito militar”.

El mismo trata no solo de explicar las diferencias entre los hombres y las mujeres sino también especificar cómo son vistos y percibidos estos dos géneros por nosotros mismos.

Desde la percepción, la identidad de género estudia las creencias de roles y responsabilidades apropiados para hombres y mujeres y la relación que se establece entre ellos. Esto puede ser visto de diferentes formas una de ellas plasma que los hombres se dedican a realizar tareas y aclaran situaciones mientras las mujeres se preocupan por el bienestar y la unidad de los demás.

En la antigüedad las mujeres eran vistas como el género que solo tenía que preocuparse por los quehaceres del hogar, siendo prejuiciadas y consideradas de manera despectiva frente al hombre quien en ese caso era “la fuerza mayor”. Hoy en día gracias a investigaciones se ha demostrado que dichas creencias son totalmente erróneas pero es impresionante, aún en el siglo XXI la discriminación que existe hacia este género.

Los grandes puestos de trabajos según este artículo respaldado por informes, están ocupados por el género masculino y si acaso hay una pequeña brecha para que una mujer ocupe dicha posición son remuneradas muy por debajo de lo que se merece, solo por ser una fémina.

Para entender por qué por un lado se juzga positivamente a la mujer y por otro lado se discrimina se explicó que existe una modalidad denominada sexismo ambivalente donde se combina la antipatía con sentimientos positivos. Este conformado por dos componentes: Sexismo hostil y sexismo benevolente, en la cual el primero se compone de la mentalidad antigua y tradicional, creyendo que la mujer es el género inferior y débil que necesita ser dirigida y gobernada por un hombre.  Otra característica de este componente es que se cree que la mujer no tienen las mismas particularidad para para salir victoriosa en el ámbito público y privado. También está dentro de esta misma categoría la opinión de que las mujeres utilizan el poder sexual para ser peligrosas y manipuladoras.

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