Sinopsis: Los Cuatro Acuerdos Agosto 21, 2012 | Por: Miguel Arguedas Des, Nunca Podrás Recriminarte De Nada.
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Sinopsis: Los cuatro acuerdos
agosto 21, 2012 | Por: Miguel Arguedas | Noticias, Reciente, Sinopsis de libros
Sinopsis del libro: Los cuatro acuerdos
Autor: Miguel Ruiz
Por: Miguel Arguedas
Desde mi perspectiva, lo que más me impactó de este libro, es la claridad con que el autor expresa la visión de la realidad social ante la domesticación del ser humano desde el momento en que nace. Para realmente tener un entendimiento claro del objetivo del libro, es necesario leerlo. Por cierto que es una obra totalmente recomendada.
El autor ha dedicado su vida a compartir por todo el mundo las enseñanzas de la antigua y milenaria sabiduría tolteca (comunidad del sur de México) las cuales guían al individuo hacia la libertad personal.
Este es el resumen de este maravilloso legado que nos ofrece en su libro “Los cuatro acuerdos”:
En esencia, vivimos en un gran sueño, un sueño de sociedad, de comunidad, de planeta. Nuestros padres nos enseñan los métodos, las reglas de nuestra vida, como encajar en ella, de la misma forma que a ellos se lo enseñaron sus padres, y así hasta el origen. Asumimos las enseñanzas sin casi cuestión. Éste es el sueño, vivimos aquello que generalmente no escogimos, pero lo vivimos como si de realidad se tratara.
Asumimos hasta tal punto, que en aquellos momentos que traspasamos el plano de la duda, de la cuestión, nuestro Juez (educado según el sueño) cae sobre la Víctima. Nosotros mismos llegamos al punto de auto-controlamos, nos auto-reprimimos para continuar dentro del camino.
Se establecen así acuerdos en uno mismo, acuerdos que no se cuestionan, simplemente se siguen, porque son el mecanismo por los cuales todos estamos sumergidos en el sueño.
Hay que romper ciertos de éstos dogmas para poder salirse, ser realmente uno mismo y vivir plenamente.
Primer acuerdo: Ser impecable con las palabras.
Las palabras son armas de doble filo, hay que saber usarlas con razón. Depende cómo, algo dicho puede girarse hacia uno mismo, por eso, la cuestión es no caer en este error, no permitir que nuestras palabras den razones de actuar el Juez. Pero aún no se giren en contra, pueden actuar como armas hacia terceros, con lo que también es un error. Una vez asumido eso, podemos darnos cuenta que estamos libres del poder de las palabras de otras personas hacia nosotros. No daremos oportunidad al Juez, porque sabremos que las palabras son sólo palabras.
Segundo acuerdo: No tomarse nada personalmente.
No seamos egoístas, el mundo no gira a nuestro alrededor, tomarse las cosas a nivel personal, es pensar que somos el centro. Nada de lo que hacen los demás es por ti, lo hacen por ellos. Tomarse las cosa personalmente es cuestionar-se a uno mismo, pero no deberíamos, debemos saber quienes somos y lo que el entorno parezca decirnos, nunca se fomentará en lo real de nosotros, porque sólo nosotros lo conocemos. Aun así, incluso
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