TEORÍA EVOLUTIVA DEL AUTOMÓVIL DE HONDA

TEORÍA EVOLUTIVA DEL AUTOMÓVIL DE HONDA

Honda, una de las empresas japonesas más competitivas, se ha hecho famosa por tener capacidad para satisfacer las necesidades y deseos de los clientes, desarrollando sus productos de forma rápida y dominando las nuevas tecnologías.

Cuando en el año 1978 los directivos de Honda se dieron cuenta de que los modelos Civic y Accord eran muy conocidos por la sociedad, iniciaron el desarrollo de un nuevo modelo diferente a lo que la compañía había comercializado hasta ese momento. El conocido lema “teoría evolutiva del automóvil” llevó a la creación del coche urbano Honda City.

Con el principio de esta teoría Honda rompe con el coche bajo y alargado y se plantea el mismo como una esfera, o lo que hoy conocemos como monovolumen; un coche que no se construye a partir del concepto de tres partes: motor, habitáculo y maletero, sino que se piensa como un solo espacio, que permite con las nuevas dimensiones, crear más espacio para las personas.

Fue este coche el que revolucionó la industria automovilística japonesa, que comenzó desde entonces a apostar por coches más altos y cortos.

■ La creación del conocimiento que en 1978 dio lugar al nuevo modelo de Honda, ¿se asentó básicamente en un conocimiento explícito o tácito?

Este proceso se asentó básicamente en un conocimiento tácito que posteriormente se tuvo que apoyar en el conocimiento explícito para poder llevarse a cabo.

El conocimiento tácito es el conocimiento relacionado con las habilidades y experiencias necesarias para desarrollar un trabajo y que no es fácil de expresar ni transmitir. Es algo intrínseco característico de los individuos, y para la empresa se basa en el “saber quién sabe qué” y “quién sabe cómo tiene que hacer que”, es decir, en saber a qué persona poder recurrir para realizar según que cosas porque poseen el conocimiento para hacerlo.

En Honda, los directivos decidieron, basándose en su propio conocimiento del sector, hacer algo totalmente diferente y evolutivo, ya comienzan a darse cuenta de que los usuarios solo disponen de un único modelo de coche y pueden llegar a aburrirse. Para ello solicitan a los ingenieros el desarrollo de un nuevo modelo, que rompa totalmente con los modelos anteriores.

El punto de partida está claramente basado en un conocimiento tácito de los directivos del sector del automóvil y las necesidades de los usuarios, y para ellos recurren al conocimiento tácito del capital humano de la empresa, es decir, buscan al personal que les puede ayudar, ya que “saben quién sabe qué”.

Los ingenieros que desarrollan el nuevo modelo se basan también inicialmente en su conocimiento tácito, experiencia y creatividad, hasta llegar al boceto

...