Tendencias actuales en la investigación de la ciencia cognitiva

Tendencias actuales en la investigación de la ciencia cognitiva

Alexey Góez Úsuga

Profesor: Diego Alfredo Tamayo Lopera

SPAM – Procesos Cognitivos Básicos

Departamento de Psicología

Universidad de Antioquia

25 de agosto de 2021

Tendencias actuales en la investigación de la ciencia cognitiva

Desde sus orígenes en la década de 1950 con la llamada revolución cognitiva, la ciencia cognitiva se ha constituido un ámbito disciplinar muy activo y vigoroso que se ha robustecido con los desarrollos computacionales, la cibernética, la inteligencia artificial y todos los descubrimientos científicos en las fronteras de la física, la biología, así como los desarrollos en medicina, ingeniería y en general de las ciencias aplicadas. Es así como la ciencia cognitiva se ratifica en su naturaleza multidisciplinar manifiesta desde un principio. Sin embargo, indicadores bibliométricos y socio-institucionales sugieren “que con el tiempo la perspectiva de una ciencia cohesivamente integrada no se ha materializado” (Núñez et al, 2019, p. 782). De acuerdo con los hallazgos de los investigadores citados, adscritos al Departamento de Ciencia Cognitiva de la Universidad de California,

Estos indicadores muestran consistentemente que el programa multidisciplinario ideado no logró la transición a un campo coherente interdisciplinario maduro. Bibliométricamente, el campo ha sido subsumido en gran parte por la psicología (cognitiva), y educativamente, exhibe una notable falta de consenso curricular, lo que plantea interrogantes sobre el futuro de la empresa de ciencia cognitiva (Núñez et al, 2019, p. 782)

Con todo y lo anterior, y en consecuencia de una multidisciplinariedad que deriva en una gran explosión de diversos esfuerzos investigativos, resulta llamativo como inclusive la banca privada auspicia tales iniciativas. Es el caso del Future Trends Forum financiado por la Fundación Innovación Bankiner. Los expertos reunidos en el foro hacen un ejercicio proyectivo visualizando escenarios posibles para el año 2030 entre los que destacan en los siguientes objetivos (Fundación Innovación Bankinter, 2020a):

1. La evolución en las técnicas de neuro imagen. Se espera seguir avanzando de forma cada vez mas potente en el desarrollo técnologico que arroje información exacta y refinada del cerebro, sus estructuras, interconexiones y funcionamiento. Esto permitirá profundizar en distintas enfermedades y desentrañar el funcionamiento de procesos mentales como la memoria o el sueño.
2. La aplicación de las neurociencias en la educación. Es precisamente una de las tentativas que unifica tanto esfuerzos académicos, como estatales. Se fundamenta en la idea de que el conocimiento neurocientífico y las neurotecnologias deben crean condiciones favorables tanto para la tarea docente, como para el proceso de aprendizaje.
3. Humanos mejorados. El desarrollo de dispositivos inteligentes dotados de sensores basados en neurotecnología ya está contribuyendo a potenciar las capacidades humanas. Hay quienes afirman que para el 2050 tendremos desarrollos para la comunicación telepática. De manera similar se espera contar cada vez más con mejores dispositivos inteligentes para aumentar la autonomía de las personas con discapacidades. Igualmente se espera la creación de dispositivos móviles inteligentes para el cuidado de la salud, que potencien la telemedicina y el diagnóstico precoz de enfermedades.
4. Curar enfermedades incurables “Es un hecho que hay muchas patologías humanas para las que se va a descubrir un tratamiento mucho mejor que el que hay hoy en día.  Todos esperamos que ese sea el caso y que podamos lograrlo”, asegura Antonio Damasio, asistente al foro. Los expertos aseguran que se descubrirán las causas primarias del Alzheimer y los tratamientos estarán disponibles para el público general en 2026 y que solo unos años después, se encontrará una cura para el Alzheimer.
5. Salud mental: nueva concepción y tratamientos Los expertos están de acuerdo en que este va a ser uno de los campos en los que más se avance en los próximos años a medio y largo plazo. Concretamente, apuestan por que se desarrollarán tratamientos que no sean tan invasivos para desórdenes relacionados con el sistema nervioso central. Los expertos auguran que, para 2026, mejorará la comprensión de la base neuronal implicada en las enfermedades mentales. Aun así, a pesar de los avances, es necesario ser consciente de que diez años es un periodo muy corto de tiempo para hacer predicciones tajantes y lo más probable es que para 2030, las enfermedades psiquiátricas o relacionadas con el desarrollo neurológico aún no estarán curadas.

En el caso particular de la pandemia del Covid-19 llama la atención como han surgido diferentes neurotecnologias para paliar los efectos adversos sobre la salud mental (Fundación Innovación Bankinter, 2020b):

Intuition Robotics está creando asistentes virtuales que crean lazos emocionales, son empáticos y establecen una relación duradera entre seres humanos y máquinas, influyendo en los sentimientos y comportamientos de las personas. El asistente ElliQ está siendo actualizado para ayudar a las personas mayores a enfrentarse mejor a la pandemia.

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