Todos Los Futbolistas Van Al Cielo

El libro trata de la historia de un muchacho llamado Sócrates, el cual al principio fue catalogado por su abuela que su nacimiento había sido una desgracia y que desde ese momento se había acabado el fútbol en la casa, El causante de esta desgracia, de acuerdo a la abuela decía que fue Amadeo, porque su mama se embarazo de uno de los futbolistas que llevaba a entrenar a la casa.

Desde ahí su abuela empezó a convertirse en un terror de los niños de la cuadra que querían ser futbolistas y que jugaban ahí en la cuadra junto a la casa de Sócrates, paso de ser una bondadosa señora a lo peor de la cuadra, siempre decomisaba los balones de los niños que jugaban ahí en la calle, hasta los padres de los niños intentaban hablar con ella, pero siempre fue negada, pero luego de que naciera Sócrates todo cambio, volvieron los balones de los niños y podían jugar tranquilos ahí en la cuadra, organizo torneos y a los ganadores les daba dulces.

Cuando Sócrates creció empezó a convivir con Amadeo y siempre lo iba a buscar a su cuarto para que le contara historias de futbol, para hablar de futbol, le contaba y contaba de historias como el legendario Maradona, Sócrates le comenzó a gustar mucho más el futbol, su mama comenzó a perder las esperanzas de convertirlo en un gran estudiante, en verdad a Sócrates no le gustaba el estudio, ni los libros, y siempre le sacaba la excusa a su mama que iba a ser el mejor jugador del mundo, Amadeo lo llevaba los martes, viernes, sábados a entrenar en la cancha de Tenerife, esa cancha le gustaba Amadeo el comenzó a jugar en el equipo unión Tenerife donde conoció a sus primeros amigos: el Tanque García, Flaco Solís, Tino Muñoz, Mono Reinaldo, Pibe Valderrama, Fernandino Prada, Tiberio Bautista, Calixto Candado.

Sócrates y sus amigos después de los entrenamientos se iban a bañar a la orilla del rio donde también se iban a bañar unas niñas y ahí fue donde conoció a una muchacha llamada Xiomara de la cual se había enamorado pero nunca se había atrevido hablarle por pena. Luego Que a Sócrates se le presentó la oportunidad de jugar en un duro partido, logro meter un gol, el gol de la victoria, jugando mal y un poco chiflado por la tribuna y se le sacaban en cara, de que no jugaba también como su papa Felipe solano, el triunfalismo se le estaba subiendo a la cabeza. Siempre y después de todos los entrenamientos Sócrates iba a la orilla del rio, a ver a Xiomara así aun no le hablara, por la pena que le daba aun, muchas veces dijo que se quería olvidar de todo he irla a buscar. Una tarde luego de un entrenamiento estaba Sócrates detrás de un árbol viendo a Xiomara cuando de repente le pego un grito, era tiberio, y lo primero que él dijo estás enamorado de Xiomara, Sócrates se quedó en silencio, y le dijo no se me puede notar tanto, estuvieron hablando un buen rato ellos dos y al fin Sócrates decidió dar un paso enviarle un libro que no quería leer. Al siguiente día, Sócrates estaba muy tranquilo ya que tiberio no hablo ni una sola palabra de esto.

Al domingo siguiente el unión Tenerife logro ganar 2-1 al último de la tabla, Sócrates marco el primer gol, aunque amadeo estaba furioso ya que se relajaron después de ir ganando y terminaron pidiendo tiempo, los jugadores luego de terminado el partido se fueron a celebrar, luego de varias horas, estaba muy borrachos, no supieron medir la celebración, ya les había hecho efecto el alcohol, a Calixto candado, era el centro de las burlas y el más borracho de todos, empezó a chocar con tiberio, luego llega amadeo, y empezó a decirles irresponsables a todos, no se supieron medir, hasta regaño el que les vendió el alcohol, como típicos adolescentes, o bueno Sócrates muy rebelde se fue para la casa ya que no quería escuchar la cantaleta de amadeo, detrás de esto querían emborrachar a Calixto para que le dieran la oportunidad

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