Tu liderazgo puede hacerte rico o pobre

Tu liderazgo puede hacerte rico o pobre

Las habilidades más importantes de un empresario son resolver problemas e influir en las personas. La palabra común a estas habilidades es: Liderazgo.

Usualmente los millonarios son personas con una eficacia impresionante que logran persuadir a inversionistas, clientes, audiencias enteras y cualquier persona que se les presente.

Convertirte en un líder no es acerca de tener seguidores, es acerca de lograr que las personas te reconozcan como líder. Te comparto 3 cosas que, a mi parecer, son claves para crecer tu liderazgo.

Si tu creces como persona puedes ayudar a otros a crecer y a recibir de otros lealtad por lo que les has aportado.

Un gran líder tiene una visión clara, la cual sólo se logra mediante un proceso de introspección así como experiencias de fracaso y aprendizaje.

Los grandes líderes pueden servir más allá de su ego o de buscar el reconocimiento. Ellos ayudan a otros a brillar.

Llegar al éxito requiere cantidades exorbitantes de energía, requiere una gran cantidad de intentos sin garantía de éxito y un deseo ardiente de ganar que supere al miedo de perder. La palabra clave de ese trayecto es la pasión.

Pasión por lo que haces es una energía inagotable que alimenta tus intentos diarios, que te mantienen de pie cuando fracasas y que te hace llevar al límite tus emociones. Obviamente, el resultado natural de intentarlo una y otra vez es acertar, aprender y en un mediano plazo volverte mejor en lo que haces.

Emprender es lo que realmente te apasione, te permite lograr una maestría y superar los obstáculos. Sin embargo, muchos emprendedores no se sienten apasionados o han perdido la pasión por lo que hacen. Te comparto 3 sencillos tips para medir tus niveles de pasión en lo que haces:

• ¿Disfrutas lo que haces?
• ¿Lo haces con energía?
• ¿Conoces tu misión en la vida?
• ¿Tienes claridad de tu futuro?

Mientras más claridad tienes en la vida más pasión desarrollas en tus habilidades cotidianas.

He conocido a cientos de empresarios y emprendedores que han leído “Padre rico, Padre pobre” pero solo unos cuantos logran el éxito o facturan en 7 cifras y eso sucede porque para emprender no se requieren conocimientos, se requieren habilidades.

Una habilidad es un conocimiento puesto en práctica, pero las buenas intenciones y los muchos deseos de lograr tu libertad financiera no te van a llevar a ningún lado si no actúas.

Te comparto algunas habilidades que tuve que desarrollar en el camino a lograr el éxito y que trajeron grandes resultados a mis finanzas.

• Influir sobre las personas
• Liderar equipos de trabajo
• Vender y enseñar a otros a vender
• Tomar riesgos y vencer mis miedos

Uno de los aprendizajes más importantes que obtuve y que realmente a impactado en mi bolsillo es aprender a trabajar en mi contexto, más que en mi contenido.

¿Qué es contexto y qué es contenido?

Seguramente te estarás preguntando qué son estas dos palabras y la manera más fácil de entenderlo es con un ejemplo: imagina que tienes 5 mil litros de agua pero solo tienes una cubeta de 20 litros, el contenido en este caso es el agua y el contexto la cubeta. Si tu no creces el tamaño de la cubeta probablemente no podrás aprovechar el contenido.

Algunos empresarios al estar frente a grandes cantidades de dinero son rebasados por sus emociones y por el miedo de perder por que el contexto es reducido.

La regla es simple.

No puedes manejar más dinero de lo que tu contexto te permite. Entonces ¿Cómo incremento mi contexto?

• Identifica tus áreas de oportunidad en lo emocional y tus miedos que no te han permitido crecer.

• Conoce a personas con un contexto más amplio, usualmente son personas que tienen éxito en los negocios.

• Asiste a entrenamientos de desarrollo personal.

Tres claves definitivas para mejorar tus resultados financieros.

Durante mi trayecto como empresario me he preguntado qué es lo que hace que algunas personas tengan éxito y otras no. A continuación te resumo algunos puntos que te acortarán tu camino como empresario y que son el resultado de diez años de crecimiento personal.

Comprométete. Tus resultados vienen de tu enfoque y tu enfoque viene del compromiso. Una vez que has decidido ir por algo, tu mente y tu creatividad liberan formas y caminos para lograrlo. Pero esto solo pasa tras el verdadero compromiso.

Conviértete en el mejor. En esta época estamos rodeados de oportunidades como de competidores. Si tu logras crear una verdadera diferencia de servicio para tus clientes vas a lograr impactar radicalmente en tus ventas. Conviértete en el mejor desarrollando pasión por lo que haces.

Trabaja en tu liderazgo. Tu liderazgo es el límite de tus resultados. Si tu resultado solo te permite manejar un equipo de cinco personas de manera efectiva, ahí tienes tu primera limitación. Tu liderazgo te permite que otras personas confíen en ti y depositen su tiempo o si dinero.

Como atraer inversionistas a tu proyecto.

Los inversionistas invierten en las personas. Tu idea es importante paro más importante es tu liderazgo. Usualmente los inversionistas profesionales son empresarios que han creado sus propias fortunas y ya han pasado por el camino en el cual tú te encuentras. Ellos entienden que lo más importante no es una idea, sino la habilidad de un empresario para hacer que esa idea se convierta en realidad.

Invierte en tus relaciones.

En la medida de que tu habilidad para influir mejora, se te hará más fácil crear relaciones. Las relaciones son la puerta para obtener nuevos inversionistas. Antes de referirte a alguno de sus contactos las personas tienen que creer en ti como personas. Crea una marca personal y comprométete con los resultados. Tu palabra es lo más importante.

3 cambios que generaron un giro de 180° en mis finanzas.

Convertirme en mejor líder. Cuando empecé a crear lideres y equipos que no dependieran de mí, mis resultados en los negocios empezaron a multiplicarse. Ya no era el único que podía resolver problemas en mi equipo, ya no era el único que vendía en mi equipo como tampoco era el único que podía llevar a mi equipo a la cima. Los negocios son equipos y necesitan de un líder ¡no lo olvides!

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