UN EJEMPLO DE DISCURSO DE GRADUACIÓN

DISCURSO DE GRADUACIÓN

Muy buenas tardes tengan todos ustedes, compañeros, Maestros, directivos, padres de familia, y por supuesto todos nuestros invitados que el día de hoy nos acompañan.

Antes de comenzar quiero agradecerle a la persona que hoy me ha puesto al frente de esta ceremonia, ella es la Maestra Ángeles, con la cual estoy profundamente agradecido, pues ha aportado muchísimo en mi vida como estudiante, y quiero agradecerle por este detalle pues es un honor, es realmente un honor y un sueño cumplido, el estar el día de hoy parado aquí, enfrente de todos ustedes, dirigiendo estas palabras para gente que admiro y respeto como no tienen idea. Es una dicha, que todo ser humano desearía, la de poder decirle a sus seres queridos, en su último día todo lo que siente y todo lo que representan para él, y agradecerles por las infinitas cosas que le han hecho pasar y que al mismo tiempo, lo han hecho sentirse vivo, y lo han hecho ser feliz. Porque tal vez lo único que duele más que decir adiós, es no haber  tenido la oportunidad de despedirte de tus seres queridos. Y yo la tengo, por eso es una dicha.

Así que para empezar compañeras, quiero que por un momento volvamos al pasado, en nuestra maravillosa máquina del tiempo que son nuestros recuerdos; y que traigan a su mente, e imaginen, el primer día de clases… aquel día mágico en el que pisaron esta honorable institución, y aquel día en el que comenzaron esta gran aventura. Una aventura que a pesar de ser hermosa, también tuvo momentos de tristeza, de enojo, de desesperación, de miedo, de frustración, de incertidumbre; y que sin embargo, ustedes aguantaron firmemente todos los embates que la vida les dio, pudieron superar

como grandes guerreros el dolor y las adversidades que se presentaron a lo largo de estos años. Y quiero que sepan, que estoy orgulloso de ustedes, quiero que sepan que me siento afortunado por haberlos encontrado en mi camino, afortunado, de que por tres años fueran mi segunda familia, y la institución mi segunda hogar; afortunado, de compartir mi vida y mi tiempo con seres maravillosos y extraordinarios como todos ustedes.

Y seguramente se preguntaran ¿cómo logramos todo esto? ; Pues a través de la armonía, del respeto, de la confianza, pero sobre todo, a través de la unión. Una unión que no se ha quebrantado a pesar de las cuarteaduras; una unión que nos convirtió en ojos, cuando no podiamos ver; nos convirtió en pies, cuando sentíamos que no podiamos continuar, y sobre todo, nos convirtió en hombros, cuando tuvimos problemas y teníamos la necesidad de llorar. Porque si de algo estoy completamente seguro, es de que esta generación tan especial ha dejado huella; estoy seguro de que a pesar de que hoy nos vamos, nuestros nombres perdurarán a lo largo de la historia, en la memoria de nuestros magníficos profesores, los cuales sin duda alguna han sido parte fundamental en el desenlace de esta gran historia; con todas sus enseñanzas, sus consejos, su apoyo y toda esa inspiración que nos impregno todavía más ganas de alcanzar la meta; que nos motivó a ser como ustedes, que nos dio fe y que nos hizo creer que la educación si se puede cambiar, que hay esperanza, a pesar de todo lo malo que se habla de los profesores allá afuera, nos hicieron ver que todavía queda gente diferente, que está dispuesta a dar su vida por el bienestar del otro. Gracias maestro, muchas gracias por toda su sabiduría.

A lo largo de la carrera, seguido mis compañeras me preguntaban porqué elegí pedagogía si pude ser un buen político. Y fue precisamente por eso, porque creo que la política es un sistema sucio y corrupto que nunca va a cambiar, así yo llegara a ser el mejor. Mas sin en cambio,  creo en ustedes, y en todas las personas que en poco

tiempo tendremos en nuestras manos. Pues desde mi punto de vista el cambio de éste país no depende de una sola persona sino de todos en conjunto.

Llegó el momento de salir y emprender la lucha, llegó el momento de actuar, de poner en práctica todo lo que aprendimos, hagamos algo diferente, vayamos por un nuevo camino, salvemos a las nuevas generaciones de la catástrofe que se avecina. Porque ustedes son el futuro de México, ustedes me han demostrado ser esa consciencia y esa bondad que no se subleva ante las injusticas; en sus manos está la vida de muchas personas, en sus manos está el cambio, en sus manos está el sanar y el salvar a toda nuestra gente.

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