Un Mundo Feliz Y La Isla, Aldous Huxley

Hoy en día las personas tienden a pensar que la felicidad y el amor son similares, pero no lo son, a pesar de que no existe una definición clara de estos dos conceptos ya que sus definiciones tienen que ver más con pensamientos filosóficos, unidas a las experiencias propias.

La felicidad es una elección personal que va ligada con experiencias y hechos vividos que son necesarios para nuestra satisfacción emocional. La felicidad al ser una emoción, no así un sentimiento como el amor, tiende a ser pasajera dejando un vacio que debe ser llenado constantemente.

Tanto lo material, lo espiritual, lo filosófico y lo pasional son algunas de las expresiones que producen satisfacción.

En lo material encontramos a personas que buscan a toda costa el éxito reemplazando así la falta de afecto, los problemas, la falta de identidad, etc. Creando un vacío que es llenado momentáneamente aunque este tipo de persona es verdaderamente feliz de forma pasajera, lo que se transforma en una necesidad creando una adicción. En otra de estas expresiones encontramos el lado espiritual, donde Dios y todas las creencias existentes en el mundo complacen de la misma forma los seguidores de estas. En el ámbito de la ciencia se cree que esta satisfacción es creada debido a la necesidad de tener una realidad alterna dentro de la cual exista alguien superior y mejor a uno mismo, creando un lugar que libera de las opresiones de la vida actual haciendo que sea la vía de escape a la solución de los problemas, dando lugar así al optimismo. Esta necesidad y posterior adicción se origina a partir del vacío emocional como relata el libro:

“El sentimiento religioso tiende a desarrollarse a medida que en la imaginación y los sentidos son menos excitables, entonces nuestra razón haya menos obstáculos en su camino, se ve menos ofuscada por las lágrimas, los deseos y las distracciones en las que solía entretenerse. Ese es el momento en que Dios emerge… Sentimos la necesidad de apoyarnos en algo permanente, en algo que nunca puede fallarnos, en una realidad, en una verdad absoluta e imperecedera… Este sentimiento religioso es por naturaleza tan puro, tan delicioso para el alma que lo experimenta que nos compensa de todas las demás perdidas.”

En cambio las personas que profesan distintas religiones piensan lo contrario, sintiendo así que este sentimiento es movido por fe, necesidad y amor real, no en forma imaginaria e idealizada formando dependencia del ser divino, esta no necesariamente tiene que ser por causa de la soledad, tristeza y sentimiento de abandono, sino para que este sentimiento sea genuino debe haber una aceptación por completo de un ser superior, amoroso y sin defectos, que no es ajeno a la humanidad.

En el ámbito filosófico la felicidad y las satisfacciones que esta conlleva son vistas como el razonamiento de las acciones del ser humano que producen deleite. Uno de los grandes exponentes de la felicidad vista desde un punto filosófico es Epicteto de quien expondremos un breve fragmento de su teoría:

“Tenemos que aprender a distinguir qué es lo que podemos cambiar, y de esta forma saber en qué se puede mejorar. Pero hay muchas cosas que no podemos cambiar, entonces, no nos queda más que aceptarlas. Aprendiendo a aceptarlas seremos felices, pero también debemos hacer un buen uso de las «representaciones» o las ideas y así distinguir lo que es útil de lo que no lo es. “

En el ámbito pasional los seres humanos tienden a buscar satisfacciones carnales, la cual también puede volverse una adicción hasta el punto de producirse una enfermedad llamada Ninfomanía, que se ocasiona cuando el sexo domina de manera excesiva el pensamiento de un individuo influyendo notablemente en su vida. Esto se produce debido a que el cerebro crea enlaces neuronales que provocan una merma en el impacto de la sensación placentera, estas son más impactantes cuando son novedosas ya que el cerebro aun no las procesa.

El amor al igual que la felicidad tiene que ver con satisfacciones para el ser humano, sin embargo este es un sentimiento, por lo tanto perdura con el tiempo. También el amor abarca tanto lo psicológico como lo físico y emocional haciendo así que sea más completo, no obstante con el paso del tiempo el concepto del amor ha ido cambiando. En la edad media las parejas se formaban a conveniencia mediante dotes haciendo así que en esta época el amor no fuera un sentimiento desinteresado, sino que era un negocio. En cambio en la época actual el amor se basa en la influencia del cine y la literatura creando así expectativas irreales que no son factibles en el acto de amar.

“Si

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