VISIÓN EDUCATIVA: ENFOQUE HUMANISTA EN LA EDUCACIÓN

VISIÓN EDUCATIVA: ENFOQUE HUMANISTA EN LA EDUCACIÓN

La presente reflexión pretende establecer la relación entre la globalización y su incidencia en la educación, reflexionando así sobre los principales problemas que se presentan en la actualidad en un aula de clases y las posibles soluciones que se deben implementar.

Con base en lo anterior proponemos como posible solución ver la educación desde la perspectiva del desarrollo humano como una alternativa que permite pensar hacia dónde puede orientarse la educación, potenciando el desarrollo humano más allá de los simples conocimientos cognoscitivos, para formar personas con actitud crítica, hábiles para convivir, capaces de reflexionar y dirigir cabalmente su propio desarrollo.

En la actualidad pareciera que a la educación le corresponde la tarea de ser solamente el medio por el cual el mercado puede suplir sus necesidades de capacitación.

Como lo expresa Castro (2007) a la educación se le está exigiendo la formación de estudiantes (especialmente para los niveles de la básica y la media) que adquieran ciertas habilidades y conocimientos que den cuenta a distintos cambios generados por el mercado. Las y los sujetos de la formación compiten con otros por un espacio en el mercado laboral. Ya la relación cambia, no es lo local lo que determina las condiciones para el trabajo; lo global marca la pauta para que quienes tengan esas habilidades y conocimientos, puedan ser los beneficiados del mercado.

En este panorama la educación se cuestiona. No sólo se discuten sus resultados en términos de los “aprendizajes” y “conocimientos apropiados por los estudiantes, sino que se deja por fuera otros ámbitos de la vida de los sujetos. La formación para la vida, para la convivencia, para las relaciones, para el desarrollo, no aparecen claramente explícitas como propósitos a “valorar” en

esta mirada de lo educativo. Ello significa que la educación se centra en el desarrollo de procesos cognitivos (asociados al aprendizaje) y deja de lado otras dimensiones del ser humano (su vida social, emocional, afectiva).

A causa de lo anterior podemos ver problemas reflejados en el aula de clases relacionados con: convivencia escolar, comunicación, motivación, autonomía, rendimiento académico, liderazgo, afectividad.

Siendo para nosotros el eje central de estos problemas la convivencia escolar, por lo cual proponemos un cambio en la manera como concebimos la educación, debemos empezar a verla como una estrategia que tiene como principio de formación la humanización en un mundo materializado; como escenario para la defensa de la equidad, la igualdad de oportunidades, la democratización. En este sentido, la escuela (concepto que abarca todos los niveles educativos), deberá convertirse en un espacio para la construcción de escenarios democráticos y participativos.

Implementando así estrategias tales como:

Desarrollar dinámicas sobre cohesión de grupo, las cuales promueven la solidaridad, la motivación, el sentido de equipo y la consecución de objetivos comunes.

Así mismo las técnicas de cohesión actúan sobre los elementos particulares de la vida del grupo, como las barreras de comunicación o las diferencias por el liderazgo. Reforzando la ideología y valores del grupo, favoreciendo así el desarrollo de roles y toma de decisiones.

De manera análoga se pueden llevar a acabo juegos cooperativos, tal como lo expresa Piaget (1956), el juego forma parte de la inteligencia del niño, porque representa la asimilación funcional o reproductiva de la realidad según cada etapa evolutiva del individuo. Las capacidades sensorio

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