Visajismo Para Peinados

Visajismo para peinados

El Visajismo estudia la forma del rostro y plantea la aplicación de un canon que permita observar cuáles son los inestetismos que se deben corregir. Los inestetismos no son otra cosa que esos pequeños defectos que deseamos suavizar, es decir, ciertas características de nuestra morfología que se salen de los cánones estéticos establecidos como correctos.

Asimismo, plantea cuáles son las distancias adecuadas para que un rostro se considere perfecto, tanto en el hombre como en la mujer.

El visagismo para el peinado en las mujeres, es decir, en cómo podemos adaptar el peinado en función de la fisonomía del/ de la cliente/a para disimular ciertos defectos y armonizar el rostro.

Rostro Redondo:

Es un rostro dilatado con las líneas de contorno redondeadas. Son recomendables los peinados con volúmenes en la zona superior que produzcan la sensación de alargamiento del rostro. También se aconseja dirigir el cabello hacia la cara para disimular el volumen lateral del rostro.

Rostro Triangular:

Está descompensada la anchura de la zona superior con el ensanchamiento de la zona de la barbilla.

Deben realizarse peinados que posean volúmenes superiores y compensen el mayor peso de la mandíbula:

- Volumen en la zona superior y la línea de la sien.

- Alguna mecha frontal con dirección descendente

- Dirección del cabello en los laterales hacia la cara, cubriendo parte de la mandíbula.

Rostro Cuadrado:

Es un rostro ancho, pero las líneas del contorno son geométricas y angulosas.

Deben corregirse dando volumen superior. Otra buena opción es dirigir mechones de cabello hacia el rostro para disimular la línea de contorno.

Rostro triangular invertido:

La zona superior es más ancha y se estrecha en la barbilla, por lo que los volúmenes deben predominar en la zona inferior a ambos lados de la mandíbula; la zona superior con algún mechón o flequillo.

Rostro rectangular:

Predomina el largo sobre el ancho y las líneas son duras y angulosas. Se corrige con volúmenes laterales, orientación horizontal del cabello, líneas suaves con texturas onduladas, flequillos y mechas dirigidas hacia la cara, cubriendo parte del mentón.

Rostro alargado:

Es un rostro en el que domina el alto sobre el ancho. Se recomienda realizar peinados que aporten volumen lateral y que produzcan un efecto óptico de acortamiento.

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