Visita al mercado de Sonora

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Mercado de Sonora

Con ésta visita al Mercado de Sonora, se pretende encontrar o al menos darle sentido al por qué de la gente en tener éste tipo de creencias que son minoría en una sociedad donde mayoritariamente todo ciudadano es católico y, ante los cuales es mal visto.

Pudimos observar la diversidad que existe dentro de éste sombrío y mágico mundo, pues van desde herbolaria medicinal, amuletos muy sencillos, brebajes, lociones, oraciones y demás, hasta lo que consideramos comenzó a ser algo más obscuro como los ritos con animales vivos.

Dentro de todo lo que pudimos observar y preguntar, encontramos que existe una gran cantidad de objetos, como veladoras, inciensos, remedios, oraciones, muñecos entre otros artículos que los brujos/comerciantes afirman sirven tanto para hacer el bien como el mal.

De igual manera, nos percatamos del respeto que se presentan unos a otros y sobre todo del respeto que se tiene hacia ciertas figuras que sirven para venerar como La Santa Muerte y algunas otras de la santería, algunas de éstas cuentan con grandes altares llenos de velas y algunos adornos. Entre otras figurillas, también encontramos trolls y algunos elfos.

De igual manera, entre los pasillos encontramos una figura muy particular que al verla sentimos  algo de horror y pánico, tenía forma de humano y estaba sentado, todo vestido de negro y tenía una máscara de gas y lo que parecía ser sangre por todo el cuerpo además de pequeños bebés y también algunas partes de ellos que le salían por todo el cuerpo. Al preguntar, sólo nos dijeron que ése era un demonio.

Creemos que esto se da por la necesidad del ser humano de atribuir cada hecho que nos podría parecer bueno o malo, ya sea un milagro o una maldición.

Lo poco que pudimos observar es que la gente que frecuenta el mercado tiende a ser muy devota; quizá sea por eso que la gente se arriesga tanto en practicarlo, pues quieren atraer cosas buenas para sí, evitando las malas pues éstas se dice regresan. De igual manera, eso no les impide buscar algún mal ajeno.

Estas personas son realmente celosas de sus trabajos pues había quiénes nos veían feo sólo por preguntar, otros rotundamente desde que nos vieron nos dijeron NO.  Por ésta cuestión es que se nos dificultó conseguir algunos de los puntos pedidos en el trabajo, como en el caso del amarre, nadie quiso responder.

También nos percatamos de las diferencias que se siente y también que se ve al estar frente a un brujo aparentemente bueno y uno malo. Algunas comparaciones son que, aun estando dentro de un mercado había ciertos locales digamos “sagrados” pues tenías que pedir permiso para pasar, y por el tipo de figuras que tenían, en su mayoría varias representaciones de La Santa Muerte y otros altares similares, nos da a pensar que obviamente era un lugar de magia negra.

Igualmente llegamos a pasar por lo que creemos es un local de magia blanca, en él no se sentía para nada esa vibra tan fea y pesada, sólo tenía un olor a incienso que no era para nada molesto y en su mayoría lo que tenían a la vista eran tés, veladoras y brebajes naturales.

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