“Yo, mi carrera y mi país.”

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“Yo, mi carrera y mi país.”

Institución: Universidad Privada Boliviana

Asignatura: Comunicación

Autor: Sofía Claros De Rada

Fecha: 9 de octubre de 2015

“Yo, mi carrera y mi país”; es un tema que podría albergar diferentes temas. El tema que yo elegí para este ensayo es la educación, y como yo, personalmente, puedo influir en esta. La educación es lo más importante para el desarrollo de un país, y yo como boliviana, quiero que mi país prospere y mejore; y si puedo ayudar, mejor. Este no es un ensayo sobre patriotismo; ni mucho menos un ensayo sobre Bolivia. Lo que escribo hoy y de lo que yo quiero hablar es sobre que puede cada uno, personalmente, hacer con su propio país; no solo con Bolivia, sino cualquier persona de cualquier parte del mundo por su propio país. No me voy a dirigir solo a los bolivianos, no me voy a dirigir solo a mis compañeros de carrera; me voy a dirigir a cualquier persona que quiera ayudar a su país a mejorar, pero siempre siguiendo sus sueños.

Siempre me he considerado como una persona amante de su país. Bolivia, es para mí, el mejor país para vivir. Desde que soy muy pequeña que pensaba en vivir en Bolivia toda mi vida, cuando tenga hijos y nietos. Todavía está en mis planes; y también está en mis planes ayudar a mi país. No solamente podemos ayudar a nuestro país siendo ejecutivos, o economistas, ni políticos. Cada uno de nosotros, con creatividad, sueños y metas, podemos crear algo grande. Cada persona tiene sueños que desea seguir. Si alguien tiene un sueño y no se convierte en meta, este sueño es inservible. Muchas personas dejan atrás sus sueños porque tienen miedo de fracasar, por lo tanto los sueños son simplemente eso, sueños. Yo, personalmente, siempre intenté seguir mis sueños. Muchas veces fracasé y podría dar muchos ejemplos de mis fracasos; pero eso no me evitó seguir soñando.  Desde pequeña soñaba con ser la primera gimnasta boliviana en ir a los Juegos Olímpicos; lamentablemente, fracasé. Años más tarde, soñaba con ser la mejor gimnasta de Bolivia. No lo logre; pero no deje de practicar este deporte que tanto amaba. Yo quería representar a mi país en los Juegos Olímpicos, quería llegar al coliseo de gimnasia con la bandera de mi país puesta en alto; quería que mi país este orgulloso de mi, al igual que yo de mi país. Siempre fui amante de mi país, como mencioné antes, y no creía que había mejor forma de demostrarlo que llevarlo al mayor evento deportivo del mundo. A pesar de todo esto, la gimnasia fue siempre solo mi pasatiempo; jamás se me ocurrió hacer de la gimnasia mi profesión. Para mí siempre fue importante tener una profesión y un pasatiempo; una profesión que amas y que te da gusto, y aparte un pasatiempo que te haga sentir igual. Jamás junte mis pasatiempos con mi vida profesional. Claro, a los 6 años a ninguna niña se le ocurre pensar en su profesión muy seriamente. Pero pasados los años, cuando enserio piensas que quieres hacer el resto de tu vida, comienzas a buscar opciones de profesión; que estudiar en la universidad una vez que salgas del colegio; en que trabajarás, etc. A los 15 años yo me di cuenta finalmente de que era lo que yo quería estudiar. Pedagogía y educación parvularia. No había nada que cambie mi opinión; me decían que iba a ser pobre; no hay trabajo para las profesoras; debería mejor estudiar administración y abrir una guardería, y dedicarme a la administración de esta y no a enseñar, así ganaría más dinero. A pesar de todo esto, yo no cambié mi opinión. Pero nada en la vida es fácil. Por razones personales, de las cuales no voy a hablar, decidí dejar atrás mi sueño de enseñar y decidí buscar otra carrera. Después de meses de buscar y averiguar, decidí entrar a la carrera de Comunicación, que era mi segunda opción, de la UPB en La Paz. Sinceramente, nunca estuve 100% convencida de esta carrera. Deje mis sueños en pausa, y cada día me arrepiento. No sé como expresarme bien cuando hablo de mi carrera actual, ni sé muy bien que hare con mi título cuando acabe la universidad, pero tengo una pequeña idea. Me cuesta mucho explicar de que trata mi carrera, y creo que esto se debe a que es un sustituto de mi sueño inicial. Cuando hablas de algo que te apasiona, podrías hablar horas y horas, y dar muchos detalles. Y así es como cada uno de nosotros nos damos cuenta de lo que verdaderamente amamos y deseamos hacer en nuestras vidas. Tal vez una carrera empresarial o corporativa te haga ganar más dinero, tal vez consigas más trabajo, tal vez  hagas feliz a tus padres al ser un CEO muy importante. Pero y tus sueños, ¿dónde quedan? Claro, si tu sueño es ser CEO de una compañía multimillonaria internacional, y lo logras, está perfecto. Pero las personas que toman un trabajo solo por el dinero o por el futuro, y dejan sus sueños atrás, ¿qué ganan? Un buen futuro, pero ¿dónde queda la felicidad?  Y hablando de la felicidad me detengo, para volver a hablar del desarrollo del país, en nuestras manos. ¿Quién dice que no se puede hacer algo que amamos, aunque no ganemos mucho dinero, y ayudar al país? Sí se puede, solo hay que encontrar la forma. Volviendo a mi ejemplo, yo amo la enseñanza, amo a los niños, y para mí no hay cosa más gratificante que formar a un niño para su futuro. Y así es como yo quería –y a veces aún quiero, aunque no estudie pedagogía- ayudar a mi país. Lo más importante en el mundo es la enseñanza, la educación. Y todo es un círculo vicioso. Yo quiero enseñar para que este niño que eduqué vaya a la universidad, para que elija una carrera que le apasiona, para que ayude al desarrollo del país. Tal vez piensen ustedes que la enseñanza parvularia, de niños entre los 2 años (aproximadamente) y 6 años de edad, no es tan esencial para la formación profesional de una persona. Yo pienso diferente. En sus primeros años de vida es cuando un niño crea su personalidad, su carácter, y muestra primeros indicios de sus intereses y actividades preferidas. Como dije, la educación en lo más importante para el desarrollo de un país, no solo el nuestro. Pero usando el ejemplo de Bolivia, hay muchos datos que deben ser puestos sobre la mesa. Bolivia no es un país iliterato, ni mucho menos un país con poca educación. El 96% de la población esta alfabetizada, convirtiendo a Bolivia en uno de los países menos iliteratos de Latinoamérica. Bolivia no es un país con poca educación, tiene una extensa cantidad de universidades y de escuelas tanto públicas como privadas; pero el problema en nuestro país es la calidad de la educación que es brindada. La educación en las escuelas fiscales o públicas es muy básica. Otro problema es que muchos niños, especialmente de áreas rurales, no van a la escuela o la abandonan después de unos años para trabajar y ayudar a sus familias financieramente. La educación está ahí, disponible para todos; pero para muchas personas es más importante ganar dinero de alguna forma, que continuar y terminar con su educación. Y por eso es que creo que es importante mi carrera actual. La comunicación, sea corporativa o social, es una carrera muy extensa y con muchas ramas, las cuales se pueden utilizar de muchas formas. Un ejemplo seria el periodismo; para informar a las personas sobre diferentes temas, ya sean políticos, sociales, nacionales e internacionales, etc. Es por esto mismo que estoy estudiando comunicación. Mi meta ahora es poder informar al país y a la población sobre los problemas actuales en la educación de nuestro país; informar sobre las soluciones que deben ser tomadas para mejorar esto. Tal vez decidí no estudiar pedagogía, tal vez no seré profesora; pero indirectamente ayudaré en el ámbito de la educación y de la información que a esta se refiere.

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