ZOMBILANDIA

ZOMBILANDIA

Luis era un niño feliz. Vivia con sus padres en un barrio moderno, con casas iguales y sin jardin. Se reunia a jugar con sus amigos y el perro de su papá en el parque y casi siempre hasta la noche, con juegos inventados por ellos mismos en los que no faltaba el perro de su papá. Todos los niños del lugar se conocian y al encontrarse, hablaban de mil cosas, se contaban secretos porque se consideraban beffos y se enamoraban y desenamoraban todos los días, era un gran locura, una gran aventura.
Sin embargo, los padres de aquellos chicos estaban preocupados y un poco malhumorados pues no le gustaba que llegaran tarde a casa, todos sucios y la algarabía y pasión  de los niños no los dejaba ya ni dormir.
Asi que algun dia alguien se le ocurrió que los niños tenian mucho tiempo libre e ideó una manera de distraerlos: se trataba de una red silenciosa que los comunicaba entre ellos. Esta red llegaba hasta todas las casas del barrio y los niños seguian su señal en unas pantallas luminosas que los padres terminaron por comprarles, convencidos de que esto les quitaria las molestias de encima.
Al principio los niños se resistieron a esta intromisión en su libertad, pero poco a poco fueron cayendo bajo en influjo de esta red: se les veia entonces idiotizados al frente de las pantallas, conectados con diez mil amigos irreales, con los cuales podian jugar todos los juegos alli inventados, enamorarse con los mensajes de amor prefabricados, contarse chistes siempre repetidos y enviarse notas impersonales que los mantenian ocupados todo el tiempo, de modo que los padres por fin pudieron descansar.
Sin embargo, se dieron cuenta de algo preocupante: los niños ya no salían y preferían encerrarse en sus habitaciones, no dormían y de dia permanecían pálidos y somnolientos, cansados de tanta distracción.
Solo sus sonrisas y sus voces a traves de la puerta les permitian saber a los padres que sus hijos estaban bien. "Buenas noches hija", le decian a Aredna sus padres y ella se sumergia en su mundo de fantasia y se olvidaba de comer, de dormir y a veces hasta de existir.
Un dia, los niños comenzaron a enfermar y su padres muy preocupados otra vez, los llevaron al médico. Este diagnósticó que no era nada grave:los niños habian muerto hacia tiempo de inanición pero su inteligente organismo los habia convertido en criaturas mas evolucionadas: eran Zombies.
Los padres suspiraron aliviados y felices e inclusive, cuando los niños se hicieron mayores les construyeron un barrio al lado del suyo, sin jardines ni parques. Se llegaba a este sin caminar mucho y a la entrada un curioso cartelito recibia a los visitantes: ZOMBILANDIA - 1 KM.
Asi que desde aquel dia los niños viven alli, tranquilos y dichosos y jamas ninguno de ellos sale a la calle pues los rayos del sol les sientan muy mal, duermen de dia y al caer la noche todos están puntuales al frente de las pantallas luminosas que los hacen felices y llenan sus vidas.
Si alguna vez se encuentran por casualidad en la calle, no saben ni siquiera sus nombres y solo se hacen un saludo con la mano y murmuran en voz baja.
Si alguna vez sentis la tentación de ir hasta alli o si os perdeis en la noche y llegais por casualidad a Zombilandia, llevad por favor una linterna para orientaros, pues lo único que alli permanece iuminado son las luces de las diez mil pantallas que permanecen prendidas hasta el amanecer.

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