ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

¿poruqe dudamos?


Enviado por   •  13 de Marzo de 2016  •  Ensayo  •  1.937 Palabras (8 Páginas)  •  327 Visitas

Página 1 de 8

Dudar es más común de lo que imaginamos, de hecho dudamos a cada rato, nos cuestionamos acerca del mundo que nos rodea y de nosotros mismos; incluso dudamos de la misma duda, si no lo has hecho has conocido o escuchado e alguien que si lo ha hecho. Esto es inesperadamente más útil de lo pensado, pues  si Isaac Newton no se hubiera preguntado porque caen las manzanas, nunca hubiéramos conocido a la gravedad. Aun así, muchas veces la duda es algo que hemos preferido ignorar porque a nadie le gusta estar dudando en todo momento.  Pero ¿Por qué lo hacemos?, ¿hay alguna posibilidad de dejar de dudar? Y ¿Cuáles serían las consecuencias de que eso pasara?

No sería raro pensar que la duda está presente desde el nacimiento, porque un bebe cuando llega al mundo no sabe absolutamente nada acerca de este, pasarían por su mente miles de preguntas como ¿quiénes son sus padres? o ¿por qué lo llaman de esa forma tan rara?, es decir, por su nombre.

Sabemos por experiencia propia que cuando él bebe crece, aprende muchas cosas que antes desconocía y no podía parar de preguntarse sobre ellas; ahora sus pensamientos son más complejos y no deja de hacerse preguntas, sino que esas van cambiando y haciéndose más complejas, de tal manera que nunca deja de dudar.

Entonces se puede decir que una razón por la cual nunca dejamos de dudar es porque cambiamos y con nosotros también cambia nuestra manera de pensar haciendo que después de responder una duda tengamos miles más que surgieron a través de esa respuesta, ignorarlas o no es decisión nuestra.

De pregunta en pregunta adquirimos conocimientos, y vamos dejando a nuestra propia ignorancia un poco atrás. La mayoría de ellas las respondemos con el análisis, más allá de los sentidos. No soy la única que dice que los conocimientos más complejos no se adquieren con los sentidos sino con el pensamiento, pues muchos filósofos ya han hablado de eso siglos  antes de que yo naciera, de hecho el famoso Rene Descartes fue el que inspiro la hipótesis de este trabajo, pues el expuso a la duda como método para la obtención de conocimientos; a ese método lo llamo duda metódica y consiste en cuestionarse acerca de todos los conocimientos para hasta tenerlos claros.

Me atrevo a decir que la duda, más allá de un método, es una causa; incluso inconscientemente, nos damos cuenta de nuestra propia ignorancia y comenzamos a dudar, después depende de nosotros decidir si resistirnos a las ansias de conocimiento o no. Precisamente por ese último paso, la duda podría ser más aceptada como causa que como método. Cabe destacar que esto no significa que Descartes esté equivocado, porque si no ignoramos las ansias de conocimiento, la duda irrefutablemente sería un método; lo único que digo es que antes de decidir eso hay una pregunta, es decir, la duda es causa antes que método.

Allí encontramos otra razón por la cual dudamos, esta segunda respuesta es porque no lo sabemos todo y queremos saber más. Entonces la duda nos impulsa a adquirir conocimientos sobre un tema específico, el mismo poseso repetimos una y otra vez hasta saber sobre mas temas, solo porque la duda nos dio una razón para hacerlo.

Algunas veces el miedo se apodera de nosotros y evita que lleguemos a saber algo más de lo que ya conocemos, este es el clásico miedo a lo desconocido. Aunque suene contradictorio ese miedo puede llevarnos a dudar más acerca de eso, desconfiamos de lo desconocido y queremos saber más, esa es la razón por la cual los protagonistas de las películas de terror suelen preferir solucionar el tenebroso misterio que tanto los atormenta en lugar de huir.

Aunque mencione eso ultimo solo por dar un ejemplo, puede sonar poco creíble, entonces daré otro: en la edad media los creyentes confiaban ciegamente en Dios y en la iglesia católica, pero también tenían miedo porque sabían muy poco acerca de Dios, la biblia estaba fuera del alcance del pueblo, a ella solo tenían acceso el clero y (pocas veces) la alta nobleza y realeza; muchas personas dudaban secretamente acerca de la verdadera existencia de Dios. No es de extrañar que al medioevo le pusieran un apodo relacionado con la oscuridad y la ignorancia.

En ese momento San Agustín justifico  la existencia de Dios con la duda, a la que tanto desprestigia en su filosofía, explico que si Dios no existiera ni siquiera podríamos dudar, por eso (para el) la existencia de Dios debe ser indudable.

“Sin embargo, ¿quién dudará que vive, recuerda, entiende, quiere, piensa, conoce y juzga?; puesto que si duda, vive; si duda, recuerda su duda; si duda, entiende que duda; si duda, quiere estar cierto; si duda, piensa; si duda, sabe que duda; si duda, juzga que no conviene asentir temerariamente; Y aunque duda de todas las demás cosas, de éstas jamás debe dudar; porque si no existiesen, sería imposible la duda". (S. Agustín. La Trinidad, X,X,14)

Con este último ejemplo puedo ubicar al miedo y la desconfianza como otra razón por la cual dudamos, sería la tercera que nombro en este trabajo.

Esa y todas las razones explicadas anteriormente se pueden resumir en una razón final, esta razón es porque la duda es algo natural; nacemos dudando, vivimos dudando y morimos dudando. Es algo que hacemos incluso inconscientemente, y resulta sorprendente que neutro subconsciente acepte nuestra ignorancia, cuando el orgullo nos impide hacerlos mientras estamos conscientes de ellos, de hecho admitir la ignorancia es en un paso que se da obligatoriamente pues, el dudar sobre algo es admitir que nuestros conocimientos acerca de eso pueden estar errados.

Para proteger nuestro orgullo, generalmente el paso de reconocer la ignorancia, se hace inconscientemente, entonces dudamos sin darnos cuenta de que lo hacemos, lo cual indica que eso es natural para nosotros.

Dudar es más común de lo que imaginamos, de hecho dudamos a cada rato, nos cuestionamos acerca del mundo que nos rodea y de nosotros mismos; incluso dudamos de la misma duda, si no lo has hecho has conocido o escuchado e alguien que si lo ha hecho. Esto es inesperadamente más útil de lo pensado, pues  si Isaac Newton no se hubiera preguntado porque caen las manzanas, nunca hubiéramos conocido a la gravedad. Aun así, muchas veces la duda es algo que hemos preferido ignorar porque a nadie le gusta estar dudando en todo momento.  Pero ¿Por qué lo hacemos?, ¿hay alguna posibilidad de dejar de dudar? Y ¿Cuáles serían las consecuencias de que eso pasara?

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (11 Kb) pdf (89 Kb) docx (10 Kb)
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com