ACUERDOS DE PAZ COLOMBIA, OPINION.

Juan Sebastián Rodríguez Rojas

12/10/2016

¿APOYA USTED EL ACUERDO FINAL PARA LA TERMINACIÓN DEL CONFLICTO Y LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PAZ ESTABLE Y DURADERA?

Es mucho de lo que se ha hablado acerca de este tema en nuestro país y no es para menos, nos encontramos ante la oportunidad de terminar un conflicto que ha sacudido la sociedad colombiana por más de medio siglo, años en los cuales muchos colombianos no sabemos lo que es vivir en un país sin guerra, independientemente el conflicto no nos haya tocado directamente a nosotros, pero que sin duda ha marcado la historia de nuestro país y el desarrollo del mismo.

Para empezar, debo decir que en un primer momento cuando se dijo por parte del gobierno que la aprobación del acuerdo final iba a estar sujeto a la decisión del pueblo por medio del plebiscito me surgieron varios interrogantes que a continuación me dispondré a desarrollar. Por un lado, es importante tocar el derecho fundamental que está en juego en todo este proceso y es el de la paz, como bien se sabe nuestra constitución en su artículo 22 dispone lo siguiente “La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento.” Con lo cual es pertinente preguntarnos hasta qué punto era necesario la refrendación del acuerdo de paz teniendo en cuenta que es obligación del Estado garantizar los derechos fundamentales y en este caso el cumplimiento de una Paz efectiva para todos los colombianos. Y si queremos traer ejemplos prácticos de procesos los cuales carecieron de refrendación no nos tenemos que ir muy atrás pues en el gobierno del ex presidente Álvaro Uribe este tomó decisiones respectivas a las negociaciones con los paramilitares sin la injerencia de los colombianos. Y es por esta razón que habría lugar para declarar inexequible la norma en la que el Congreso aprobó el convocar a un plebiscito pues se está poniendo en controversia la garantía de un derecho fundamental y deber del Estado. Sin embargo, el Presidente en uso de sus facultades decidió que debía ser el pueblo colombiano quien tendría la última palabra en la aprobación del acuerdo final lo cual blindaría de legitimidad el acuerdo, esto como respuesta en mi opinión a los complejos temas que se desarrollaron durante las negociaciones y los cuales polarizaron a los colombianos desde el mismo momento que empezaron las negociaciones hasta el momento de sufragar, aunque insisto nuevamente en que el presidente tenía todas las facultades para tomar la decisión sin necesidad de preguntarle al pueblo y poner en riesgo el futuro del acuerdo de paz y quedar ante un limbo jurídico en caso de que ganase el no como efectivamente sucedió.

Habiendo aceptado entonces que se convocaría a plebiscito la aprobación del acuerdo de paz, el siguiente interrogante que me surgió y el cual fue tema de debate en nuestro país, fue la pregunta específica que el gobierno escogió que sería la que aparecería

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